Lenguaje y comunicacion. Cuatro funciones básicas

Lenguaje y Comunicación

El sujeto humano desde su existencia ha tenido la necesidad de comunicarse con su entorno y sus semejantes para poder vivir en armonía, ya sea mediante el uso del lenguaje oral, no verbal,  signos, símbolos o sonidos para transmitir una idea o sentimiento. Ambos elementos tanto el lenguaje y la comunicación se ven envueltos en dicho proceso con el mismo objetivo o fin, de compartir algo de nosotros mismos para los demás.

Todos y cada uno de nosotros al formar parte de una sociedad intercambiamos nuestras experiencias, sensaciones o conocimientos referentes a un tema en específico, ya sea de interés propio o general.  La expresión de dicha idea es la mejor manera de decir presente en una conversación, pues dependiendo de quién sea el actor principal de la interacción automáticamente tenemos un rol en la misma; ya sea el de emisor o receptor.

La comunicación no sólo consiste en externar nuestra opinión o sentir a alguien más, sino  buscar las formas adecuadas para lograr que esa idea a transmitir sea concreta y entendible hacia los demás. (Wilbur, Shramn 1972)

Según Bühler  (1973) el lenguaje distingue tres funciones: representativa, expresiva, apelativa o de llamada. Estas son utilizadas por el hombre para comunicarse, por ejemplo la primera de estas, es decir la función representativa son los signos o símbolos que utilizamos para representar una idea, ya sea un letrero de wc en algún restaurante o el logotipo de los juegos olímpicos. La segunda función expresiva va más relacionada con los sentimientos o emociones, dado que como su nombre lo indica queremos denotar algo más que con palabras no se puede y finalmente la tercera función apelativa es una forma de advertencia o captar la atención del receptor ya sea un anuncio de velocidad en la carretera o el ladrido de un perro, todos y cada uno de estos son ejemplificaciones en escenarios cotidianos dado que en todos los ámbitos se ven involucradas.

La diferencia principal entre lenguaje y comunicación, es que el primero únicamente es verbal, según Morris (1985) “es un conjunto de signos estructurados para dar a entender una cosa”  en tanto la segunda es verbal y escrita.

El lenguaje forma parte de una cultura, una sociedad o nación sí lo vemos de esta forma, obviamente cada una de estas con sus anglicismos, regionalismos, etc; en pocas palabras adaptan el lenguaje a su entorno. (Blake y Haroldsen, 1980)

Por otra parte la comunicación oral es un proceso dinámico, ya que siempre se encuentra en un ir y venir de información; es decir siempre hay un feedback entre el emisor y el receptor, en tanto la comunicación escrita se encuentra plasmada ya sea en un cuaderno, un libro o audio; es decir no habrá una interacción dado que esa idea se encuentra alojada  en un objeto físico o virtual por lo cual puede llegar a dificultar el proceso de entendimiento a lo cual conocemos como ruido.

El ruido según Berlo (1980) “son las barreras y obstáculos que se presentan en cualquier momento del proceso  y estos a su vez provocan malos entendidos, confusiones o desinterés” todos hemos sido afectados en algún momento, ya sea que tengamos prisa y no pongamos la debida atención al emisor o algún sonido que interfiera en el proceso por lo cual no podamos captar el mensaje a plenitud.

No sólo la escritura y el habla las utilizamos para comunicarnos, en este caso podemos recurrir a un tercer tipo de comunicación “no verbal” ya que en esta podemos utilizar gestos faciales y movimientos corporales (gesticulaciones y ademanes). En los gestos faciales podemos decir que las expresiones más notables son alegría, enojo, preocupación, tristeza; en cambio en los movimientos corporales denotan  antivalores sí lo vemos de alguna forma como lo son, autoridad, desinterés, egocentrismo sólo por nombrar algunos aunque para poder entender mejor estos tendremos que encaminarnos mejor al campo de la psicología para poder tener una mejor lectura de los mismos  y así tener una comunicación exitosa.

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