Leyes De Nezahualcoyotl
Enviado por rezzaptr • 21 de Agosto de 2012 • 910 Palabras (4 Páginas) • 3.955 Visitas
e) Las Leyes de Nezahualcóyotl fueron ochenta,8 mismas que repartió entre
Cuatro Consejos Supremos:
1º. Causas Civiles y Criminales,
2º. Música y Ciencias,
3º. Guerra y
4º. Hacienda.
En el Primer Consejo o de las Causas Civiles y Criminales, mandó que se procesaran
todos los litigios relacionados con acciones y pretensiones civiles y penales. Creó
normas que contenían el presupuesto y la consecuencia que debía aplicarse en caso
de que aquél se actualizara. A este consejo le encomendó castigar con todo rigor
la homosexualidad masculina. La traición al señor o a la república la sancionarían
con una muerte cruel, en el castigo incluirían el saqueo y la destrucción de la casa
del que fuera condenado y
la esclavitud de sus descen-
dientes hasta la cuarta ge-
neración. El tecuhtli o señor
que se alzara contra
las tres
cabezas
(Tenochtitlán, Cul-
huacán y Tacuba), habiendo
sido sujetado una vez, sería
apresado y ejecutado a gol-
pes de porra hasta destro-
zarle la cabeza.
También sería condena-
do a muerte por golpes de
porra, quien se vistiera con
mantas o portara divisas
que sólo los señores podían
llevar. Para usar ropa ele-
gante o mejorar la imagen
personal, así como para edi-
fcar casas, se requería de la
autorización del señor, que sólo la concedía a quienes
habían realizado hazañas o hechos que justifcaran
tal distinción, la infracción se castigaba con la pena
de muerte.
Los adúlteros que fueran sorprendidos por el ma-
rido, durante la consumación del acto, morirían ape-
dreados públicamente.
En caso de que sólo se sospechara el adulterio, a
petición del supuesto ofendido, se daría inicio a una
investigación, y si de la misma resultara responsa-
bilidad para los indiciados, ambos serían ahorcados;
esa misma sanción se impondría a quienes hubie ran facilitado o fomentado la falta. Si los adúlteros además asesinaban al ofendido,
el varón moría asado con gran suplicio, y la mujer ahorcada. Si los adúlteros eran
principales, se les castigaba con garrote y sus cadáveres eran incinerados.
El ladrón de poco valor era esclavizado; si boqueteaba la casa, moría ahorcado,
igual sanción se imponía al que robaba cosas de mucho valor o en casa habitación
o en la plaza.
Para el que robara en el campo, aunque
el hurto no fuera mayor de siete mazor-
cas, Nezahualcóyotl estableció la pena de
muerte, a golpes de porra en la cabeza.
Los hijos de los señores que despilfa-
rraran las riquezas o bienes de sus padres,
merecerían la pena de muerte con garrote.
Al borracho, en caso de que fuera ple-
beyo, lo trasquilarían públicamente, en la
plaza y en el mercado, su casa sería derri-
bada, y él echado a vivir al campo, como
bestia, ya que el alcoholismo se conside-
raba una situación similar a la bestialidad.
Si llegara
...