Libro Educativo
Enviado por castro1525 • 13 de Diciembre de 2013 • 3.966 Palabras (16 Páginas) • 192 Visitas
Chayote: algunas recomendaciones técnicas para su cultivo
Chayote, Sechium edule, (Swartz), es una cucurbitácea originaria de México y América Central, que se cultiva y consume desde la época precolombina. Es una planta trepadora de tallos semileñosos, con zarcillos, con frutos ovoides o en forma de pera, con una semilla plana; la piel puede ser con o sin espinas, de color blanco-márfil a verde oscuro. El peso del fruto varía según cultivar y se pueden encontrar frutos de 0.05 hasta 2 kg. de peso. Sus raíces tuberosas con alto contenido de almidón son comestibles y muy apreciadas en algunos países.
PRODUCCION
El destino principal de la producción del chayote es el mercado local, el cual no establece normas de calidad para este producto. Sin embargo, el mercado de exportación exige entre otras características que el fruto debe tener forma de pera, piel lisa, color verde claro; de 12 a 15 cm., de largo y peso entre 0.3 y 0.5 kg.
El chayote se produce mejor entre los 500 y 1,500 msnm. La temperatura ideal para el cultivo oscila los 18 y 30 grados C. Necesita, por lo menos, de 2,000 mm de lluvias por año, bien distribuidas, o riego equivalente. La planta de chayote crece bien en suelos arcillo arenoso, de buen drenaje, de media a buena fertilidad y alto contenido de materia orgánica. Las parcelas de producción deben colocarse en áreas planas o ligeramente onduladas, protegidas de vientos fuertes.
PREPARACION DEL TERRENO
La preparación del terreno para la siembra consiste en la limpieza de la parcela mediante chapeo y eliminación del material resultante. Posteriormente, se debe labrar el área donde van las semillas. En vista que el cultivo tiene raíces superficiales y suculentas, se debe de formar una "esponja" en cada punto de siembra a manera de cubrir las raíces.
SIEMBRE
Este cultivo se puede reproducir por esquejes, acodos y semillas. Cuando se utilizan semillas, usualmente se colocan de una a tres semillas por golpe, en un ángulo de 45 grados, separadas a 25 centímetros cubriéndolas con una fina capa de tierra para protegerlas del sol.
Es recomendable que la semilla se coloque 0.5 libras de fertilizante completo (12-24-12; 15-30-8, entre otros) al fondo del hoyo, tapando con una capa de tierra de unos 5 cm, para evitar el contacto con la semilla. La época de siembra tradicional es al inicio de la temporada lluviosa, pero si se dispone de riego, puede hacerse en cualquier época del año.
Las recomendaciones para las distancias de siembra varían de acuerdo al sistema de tutoramiento utilizado, oscilando de 4 x 4 m hasta 10 x 10 m entre plantas e hileras.
SISTEMA DE TUTORAMIENTO
Existen diversos sistemas entre los que se pueden mencionar:
• Sistema tipo "enramada" o "techo cerrado". Con éste método se dificulta las labores culturales, especialmente las fumigaciones para el control de plagas y enfermedades, pues se crea un micro-ambiente de poca luz y alta humedad, muy favorable para el desarrollo de enfermedades foliares.
• Sistema de cerca simple vertical. Proporciona mayor aereación e iluminación, además de facilitar las fumigaciones, pero presenta problemas para la cosecha. En experiencias de otros países no se han encontrado diferencias en cuanto a producción de frutos por hectáreas, entre este sistema y el de techo cerrado.
• Sistema intermedio de "enramada larga". Consiste en espalderas de 3 a 4 metros de ancho por 100 metros de largo, con calles de 2 a 3 metros. Al separar las enramadas se eliminan las desventajas de los otros sistemas. La altura de las enramadas debe ser como mínimo de dos metros. Las calles deben mantenerse con podas periódicas.
FERTILIZACION
La fertilización depende de la fertilidad natural del suelo y del número de plantas por hectáreas que se utilice. Lo más recomendable es enviar una muestra de suelo al laboratorio. Generalmente, se hacen aplicaciones de Urea a razón de 0.5 libras/mata, a los 30 días, 90 y 120 días después de la siembra. Posteriormente, a los 160 días se aplica 1 libra de Urea cada mes por cada mata. También, se utilizan abonos foliares de fórmula completa (15-15-15; 12-24-12; 20-20-20; etc.), cada tres o cuatro meses después de iniciada la floración.
CONTROL DE MALEZAS
Es necesario controlar las malezas sólo en los primeros meses, cuando la luz del sol llega al suelo del área plantada. Esto se hace manualmente, con machete o azadón, con un herbicida quemante con pantalla protectora.
PODA
Se realizan podas constantes después del segundo mes de la siembra (poda ligera). Esta se hace eliminando las guías que no tienen buen desarrollo, o las que se pasan las calles entre espalderas. También, se deben eliminar los frutos, hojas y guías enfermas o con ataque de plagas.
En el caso de plantas muy afectadas por enfermedades, se recomienda la poda drástica, que consiste en la poda de toda la planta, cortándola a 10-15 cm del suelo.
COSECHA
Desde los tres a cinco meses de la siembra se inicia la producción de frutos, aunque por la densidad del follaje, la producción normal empieza casi al año. En una planta adulta, la producción es constante todo el año si se siguen las recomendaciones mínimas de cultivo.
La cosecha debe hacerse manual, preferiblemente con una tijera de podar, para no maltratar el fruto al arrancarlo del pedúnculo. La misma debe hacerse cada cuatro o cinco días. Se debe evitar lastimar los frutos. Por esto deben colocarse en cajas o canastas forradas con papel periódico.
Se estima que una planta de chayote en buen estado, produce cerca de 250 frutos por año. Si se tienen 550 plantas por hectáreas, significa que la producción por hectáreas sería de unos 137,000 frutos.
Pepino
En el estado de Morelos, el pepino de riego es una de las principales hortalizas que se cultiva durante el ciclo Primavera-Verano, cosechándose un promedio anual de mil 224 hectáreas durante los últimos diez años, con rendimientos de 15.1 toneladas por hectárea. En 1999 dentro de las hortalizas ocupó el tercer lugar por el valor de su producción.
TEMPERATURA:
Es menos exigente en calor que el melón, pero más que el calabacín.
Las temperaturas que durante el día oscilen entre 20ºC y 30ºC apenas tienen incidencia sobre la producción, aunque a mayor temperatura durante el día, hasta 25ºC, mayor es la producción precoz. Por encima de los 30ºC se observan desequilibrios en las plantas que afectan directamente a los procesos de fotosíntesis y respiración y temperaturas nocturnas iguales o inferiores a 17ºC ocasionan malformaciones en hojas y frutos. El umbral mínimo crítico nocturno es de 12ºC y a 1ºC se produce la helada de la planta. El empleo
...