Macrofagos

Proyecto significa de acuerdo al diccionario: Proyección en perspectiva, sinónimo de asunto, apunte, bosquejo, esbozo, esquema, maqueta.

Desfilan en esta sociedad actual escenas donde vemos personas desorientadas, que no saben adónde van, qué esperan de la vida, sin objetivos claros, tal vez como un rasgo más de la crisis del humanismo occidental. Vidas ajetreadas, sin metas demasiado elevadas, seres que corren tras esos aires que soplan hoy hacia acá, mañana hacia allá, impulsados y masificados muchas veces, por el poder avasallador de los medios que erigen como postulados, el hedonismo, la frivolidad y la falta de compromiso.

En medio de tantas incertidumbres, de tantas influencias negativas del medio social, es posible y necesario, construir un Norte que dé sentido a la existencia y que nos permita mantener el rumbo, saber de sus orillas, de sus peligros y de sus numerosas maneras de crecer y aprender. Por ello es importante proponerse un proyecto de vida que contemple la amplia gama de aspectos que troquelan la personalidad humana.

Es decir: saber lo que uno quiere hacer con su vida y arbitrar los medios y herramientas necesarias para poder lograrlo, teniendo siempre presente que las metas deben ser accesibles, concretas y a corto plazo. De esta manera se podrá evaluar mejor lo realizado, hacer los ajustes necesarios y estimularnos con los pequeños logros alcanzados. Porque de eso se trata la vida: de unir aciertos y desaciertos, errores y éxitos e ir enriqueciendo así, la infinita cadena de aprendizajes que suponen cada existencia.

El proyecto se asocia a objetivos, a corto, mediano y largo plazo. Dentro de la tendencia de la administración moderna se considera un rubro importante el tener un proyecto con objetivos alcanzables, medibles y evaluables. Esto por supuesto requiere un conocimiento y análisis de la realidad, de su entorno, recursos y limitantes y es la clave del éxito de toda empresa o persona, que se precie de ir a la vanguardia del proceso administrativo y contextual en la globalización de la educación.

Las corrientes educativas y psicológicas también adoptaron las diferentes etapas del proceso considerando que los sujetos que entran en él interactuan y modifican su actuar en el momento de concluirlo, que éste es dinámico y evolutivo, que debe ser abierto y nunca termina, pues cuando se considera concluido inicia otro más. En el terreno empresarial la planeación es el punto de partida para cualquier proyecto: pequeño o ambicioso. Si esto sucede en el terreno de la economía ¿cómo es que nuestra vida la dejamos a la deriva?, piensa cuántas veces en tu vida haz realizado un alto y te sentaste a analizar tu realidad, tus recursos y alcances y en base a esto planeaste tu futuro, es que acaso ¿no es tu vida el proyecto más ambicioso de tu existir?

Trata de regresar por el tiempo a las diferentes etapas que haz cruzado, la niñez, la adolescencia, y algunos la edad adulta. Recuerda cómo fue que enfrentaste las diferentes crisis existenciales, ¿te sentaste alguna vez con papel y lápiz en la mano? A anotar en un lado tus problemas, en el otro las posibles soluciones. No, no es que sea pesimista, por el contrario, consumo fuertes dosis de realidad cada día y estoy convencido de que debemos planear nuestro futuro. Asi como en la juventud nos empeñamos en formar una familia, obtener un título, un empleo, así como más tarde en nuestra edad adulta nos obsesionó quizá el tener un auto, una casa, los cuales aseguramos por aquello de los accidentes, así como tal vez aseguramos nuestras vidas para un consuelo económico de la familia, así debemos planear nuestras acciones del futuro.

Aún es tiempo de buscar las estrategias necesarias para que los realices, no le hagas caso a la frustración, ¡es pésima consejera!, no la escuches, no permitas que te obligue como a un robot a empujar una roca sin alcanzar la meta.

-¡inténtalo, mientras tengas vida, puedes lograr lo que planees! Anota en un papel todos tus anhelos, analiza lo que posees, registra los obstáculos por vencer y establece tiempos para cada uno de los objetivos en la vida. Pregúntate que quieres en relación a:

-tu cuerpo, ¿lo cuidas, le das descanso, lo alimentas?

-tus pensamientos ¿los nutres, los dejas crecer y volar?

-tus sentidos ¿están despiertos, alertas, responden a los estímulos? O tal vez están sedados o atrofiados por no escucharlos.

- tus sentimientos ¿los dejas fluir? O tu corazón es de piedra y no te permites las sonrisas

o las lágrimas,

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