Mi Carrera Por Emocion

MI CARRERA, ¡ POR EMOCIÓN !

¿Quién no se ha dejado llevar alguna vez por un impulso y ha elegido entre varias alternativas sin analizar en detalle las ventajas y desventajas de cada opción?

Entonces, si nuestras emociones dirigen a menudo nuestras acciones, nuestra conducta, ¿cómo no tenerlas en cuenta a la hora de elegir la carrera que puede marcar nuestras vidas?

Sabemos que una profesión es la herramienta más valiosa que nuestros padres nos dejan para poder defendernos en nuestra vida, pero somos nosotros los arquitectos de nuestra vida y nuestro destino, somos los únicos que elegimos la dirección y el rumbo de nuestra vida, al escoger una carrera tomamos quizás la decisión más importante y difícil, pero debemos hacerlo con un ingrediente fundamental: con emoción, sentimiento, vehemencia y pasión por nuestra profesión ya que mediante por ella, alcanzaremos nuestras metas y objetivos trazados a largo plazo.

Algunas personas estudian con razón no con emoción, solo piensan en sus intereses más que todo materiales, en la remuneración que puedan obtener después de estudiar durante 5 años en la universidad, creen ellos es el mejor instrumento para superarse en la vida, piensan alcanzar bienestar pero nunca lograrán la satisfacción que se puede conseguir : “cuando uno hace lo que le gusta” y es que cuando hacemos, lo que realmente queremos, somos capaces de disfrutarlo, nos invade un entusiasmo infinito, y brindamos nuestro trabajo al servicio de otras personas, reconociendo lo valiosos que somos. Cuando estamos alegres con algo, lo gozamos, no vemos ningún esfuerzo en realizarlo ni tampoco le encontramos algún defecto, todo nos parece perfecto y comprendemos que nuestra elección fue la más acertada, que no hay de que arrepentirse por una sencilla razón, porque “Elegiste lo que querías ser”.

En cambio si elegimos nuestra carrera por razón, pensando solo en los beneficios futuros trabajaremos por obligación, para cumplir con nuestros deberes laborales, cuando es nuestro derecho poder disfrutar de ellos. Es por ello que gracias a este artículo me doy cuenta de que nuestra vida profesional debe estar fundamentada en la convicción por nuestra carrera, y orientada a encontrar el éxito personal en todas las dimensiones de nuestra vida, encontrar nuestra verdadera vocación es la única manera, de que así pasen 40 años, lleguemos cada mañana y nos sentemos en nuestro escritorio, sabiendo que somos los mejores en lo que hacemos y dispuestos a seguir explotando nuestro talento al máximo.

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