Movilidad En Bogotá

Universidad Nacional de Colombia

Sede Bogotá

El hábitat, el entorno de lo urbano, la salud y la vivienda – Julio Sánchez Leiba

Entrega final: Grupo 7

Camilo Andrés Baquero Santos (Ing. Civil)

Camilo Andrés Martínez Martínez (Ing. Eléctrica)

Jairo Andrés Barrera Romero (Ing. Civil)

Carlos Ernesto Rodríguez Criollo (Ing. Civil)

Transporte público en Bogotá.

¿Un castigo o privilegio?

Seguramente nadie ha escapado a la hostilidad con la que funciona nuestro transporte público. Taponamientos, contaminación por ruido, por gases tóxicos e indisciplina, son un factor determinante. Esta “forma de vida” se ha arraigado de tal manera en la ciudad que ha creado una conciencia generalizada en el sentido de creer que no existe solución al respecto y que lo que debemos hacer es someternos, procurando de manera egoísta un beneficio temporal, sin importarnos que la dificultad es de todos.

Se pretende con este ensayo sugerir algunas causas, consecuencias y posibles soluciones a esta problemática, conscientes de que una verdadera solución está distante de ser llevada a efecto, pues ni siquiera se ha podido determinar las verdaderas causas del caos en el que vivimos.

¿Es humano el transporte público de Bogotá? Basta ver el rostro de desespero e insatisfacción de la mayoría de personas que han tomado un autobús para transportarse a su destino y con mayor razón aquellos que intentan hacerlo y no lo consiguen, para darnos cuenta de la verdadera dimensión del problema que tenemos en materia de transporte público en la ciudad.

La ausencia de un sistema de transporte masivo optimizado y suficiente para el número de pasajeros en necesidad de ser transportados, hace que el existente a través de buses, busetas, taxis y otros sistemas de transporte público, colapse en los horarios denominados “pico” [1], es decir en horas de la mañana y de la tarde cuando la mayoría de personas se desplazan desde su residencia a sus trabajos y viceversa.

Otra causa agravante a esta problemática es que en el sistema actual de buses colectivos se presenta una competencia, conocida como “guerra del centavo” [2], lo cual da lugar a que

[1]: Según Transmilenio, las horas pico en Bogotá son: De lunes a sábados de 5:30 am a 8:30 am y de 4:30 pm a 7:30 pm.

[2]: Esta competencia ha llegado a causar incluso la muerte: http://www.citytv.com.co/videos/908880/video-una-mujer-murio-atropellada-en-medio-de-la-guerra-del-centavo

los conductores de estos buses tengan que disputarse los pasajeros, pues de ello depende su sustento, provocando una dificultad adicional, que es la indisciplina, la agresividad y la intolerancia de los conductores, trayendo como consecuencia mayores taponamientos e inconformismo entre pasajeros y peatones, pues unos y otros son víctimas del abuso y la mala conducta de estos conductores.

Como ingrediente que contribuye a agravar aún más esta problemática debemos mencionar el atraso de la ciudad en infraestructura. “Una de las problemáticas más importantes en el transporte actual es el deterioro de la malla vial. Según cifras del IDU cerca del 75% de las vías están en mal o regular estado, lo que obliga a los conductores a reducir la velocidad y en algunos casos se disminuye la cantidad de carriles o tramos en los que se puede transitar. La falta de rutas conlleva extensos trancones que causan grandes pérdidas de tiempo para los habitantes, y el mal estado de las vías trae costos adicionales en el mantenimiento de los vehículos y un gasto superior de combustible por no poder mantener una velocidad constante. En la siguiente tabla se puede apreciar la evolución del estado de la malla vial en Bogotá, donde se evidencia que el deterioro de las calles ha aumentado con el tiempo y la falta de mantenimiento es indiscutible, por lo que se hace mucho más costoso el mantenimiento de las vías.” [3]

“Fuente: instituto de desarrollo urbano (IDU), base de datos del inventario y diagnóstico de la malla vial. Diciembre 2006.” [4]

[3]: Este fragmento del artículo consultado, nos hace reflexionar en el sentido de que esta corrupción, también contribuye a una mayor contaminación en el medio ambiente, pérdida de recursos naturales, pérdida de tiempo para los usuarios, etc.

[4]: A pesar de que la gráfica no es reciente, podemos apreciar que la mayoría de vías, sean locales, intermedias o principales, se encuentran en mal estado, situación que en vez de mejorar con el pasar de los años, ha empeorado, incluso ahora, también las losas de Transmilenio se han ido deteriorando.

Podemos analizar la situación teniendo en cuenta el hecho de que el sistema Transmilenio, tiene prioridad en las vías de la ciudad, ya que dispone de carriles privados (en la mayoría de casos descongestionados) [5], mientras que los otros sistemas de transporte público comparten las vías con los carros particulares, con motos, con bicicletas, zorras, etc.

Debido a medidas como el “pico y placa”, muchos usuarios han decidido tener dos o más carros con el fin de no usar el transporte público, esto condujo a un aumento del parque automotor, contribuyendo a la congestión en las vías por las cuales circulan los buses de servicio público, taxis, etc. En la

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