PHALAENOPSIS Y SU CULTIVO TAXONOMÍA

PHALAENOPSIS Y SU CULTIVO

TAXONOMÍA

Familia: Orchidaceae.

Subfamilia: Epidendroideae.

Tribu: Vandeae.

Subtribu: Sarcanthinae.

Las Phalaenopsis son las orquídeas de interior más cultivadas en Europa y Norteamérica; son conocidas como las orquídeas mariposa.

GENERALIDADES

El género consta de unas 50 especies originarias del sur de Asia, Filipinas y norte de Australia. A partir de ellas se han llegado a crear unos 10.000 híbridos, que son los ejemplares que nos encontramos expuestos para la venta en los viveros.

Se trata de plantas epífitas o litófitas que se desarrollan en los bosques húmedos y cálidos, a una altitud que va desde los 200 a los 1500 metros.

Los híbridos son fáciles de cultivar, ya que se adaptan muy bien a las condiciones de temperatura de nuestras casas. Además sus requerimientos de luz son relativamente bajos, por tanto son ideales para adentrarse en esta maravillosa afición.

Florecen generalmente en otoño-invierno y las flores son de larga duración (de dos a diez meses). La inflorescencia nace de la base de las hojas.

Son monopodiales, formando una mata única, poseen hojas gruesas, carnosas y de color uniforme.

Sus gruesas raíces son frágiles y normalmente se salen de la maceta.

CULTIVO:

• RIEGO: Son plantas de crecimiento prácticamente constante, carecen de pseudobulbos que les permita almacenar agua y nutrientes; por esa razón se deben regar sin establecer periodos de descanso pero teniendo en cuenta lo siguiente: en invierno, cuando la temperatura puede descender por debajo de los 17ºC la planta soporta mal el exceso de agua. En ese periodo reduciremos el riego considerablemente, dejando el sustrato parcialmente húmedo con zonas secas; hay que evitar mojar la corona central de la planta, ya que ocasionaría su pudrición.

Si mojamos las axilas de las hojas o la corona (punto de crecimiento) y no se ha secado antes de la noche o no la hemos secado absorbiendo el agua con, por ejemplo, papel de cocina, provocaremos la llamada pudrición de corona. En tal circunstancia deberemos limpiar toda la zona podrida, teniendo en cuenta que la planta ya no va a crecer más por el centro. Habrá que esperar a que nazca un brote lateral desde la base de la planta (keiki basal).

Cuando la temperatura es alta, el riesgo de pudrición es mucho menor; el sustrato debe mantenerse húmedo pero evitando el encharcamiento.

Como se cultivan en tiestos de plástico transparente, la regla general a seguir consiste en esperar a que las raíces se vean de un color claro; al regarlas pasarán a un verde intenso, y no volveremos a regar hasta que vuelvan a tener color claro.

• FERTILIZANTE: El uso de fertilizante es importante para producir plantas fuertes y con muchas flores. Cuando se encuentran en crecimiento, se deben fertilizar de forma regular con un fertilizante rico en nitrógeno (30-10-10) en muy baja concentración

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