POSICIÓN FRENTE A LA ORALIDAD O LA ESCRITURA

POSICIÓN FRENTE A LA ORALIDAD O LA ESCRITURA

No podemos excluir la oralidad de la escritura, puesto que como es claro ambas se complementan, ya que no podría existir la escritura sin antes hacer “sonar” eso que deseamos escribir en nuestra cabeza y del mismo modo aunque puede existir la oralidad sin escritura, está la complementa, no la sustituye antes bien la enriquece más.

Podría decir que frente a la oralidad o la escritura es más importante la oralidad, ya que fue una de las primeras maneras de comunicarnos, y como dice Ong la escritura es un avance “tecnológico” dentro de esta manera de comunicación. Desde niños nuestro primer lenguaje es el oral y de allí viene el escrito, por lo tanto se entiende que la expresión oral es más espontánea y natural y está llena de matices afectivos que dependen del tono que utilicemos ya sea dulce o un poco más severo y de los gestos, claramente. Por eso tiene gran capacidad expresiva, lo que hace que sea más fácil de entender.

La el lenguaje oral según Ong en su recorrido historicista de la oralidad y la escritura, plantea la existencia de un contraste entre las mismas. A diferencia del habla oral la escritura es artificial. La primera surge del inconsciente para luego crear vida consiente. En cambio, la escritura también trabaja sobre la conciencia pero no surge del inconsciente.

Con respecto a la memorización oral podría decirse que es una cualidad valiosa, ya que podríamos pensar que el uso de la escritura interfiere en procesos orales porque hace que el lector no introduzca en la mente para luego recordar puesto que será más fácil recopilar leyendo. Como sabemos el sonido permite identificar el objeto y de alguna manera envuelve al individuo, por esta razón para la gran mayoría de la humanidad es mucho más fácil verse una película que leer un libro, ya que mientras en el lenguaje oral Hay interacción entre emisor y receptor, lo que hace que sea más ameno y entendible.

Para concluir como cita Ong en su libro “debemos olvidarnos de tales extremos dualistas, de que uno es mejor que el otro”, y dice que “se trata de complementos, sociedades orales con escritura y sociedades orales sin escritura”.

BIBLIOGRAFÍA:

Luria, A. R. (1980). Lenguaje y pensamiento. Barcelona, Fontanella.

Ong, W. J. (1982). Oralidad y escritura. Tecnologìas de la palabra. 

Salvador, M. B. (1996). La importancia del lenguaje oral en educación infantil. Aula de innovaciòn educativa.

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