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Técnicas de dimensionamiento de lotes

Resumen

El objetivo de este trabajo es analizar los siguientes modelos determinísticos de inventarios para demanda independiente: cantidad económica de pedido (EOQ), algoritmo Silver–Meal (SM), costo unitario mínimo (CUM), balanceo de periodo fragmentado (BPF) y algoritmo de Wagner–Whitin (WW). Estos modelos se basan en el supuesto de la independencia entre las demanda de artículos que se llevan en inventario. Con la intención de lograr el objetivo planteado, los modelos mencionados son aplicados para el cálculo de los tamaños de lotes óptimos de Megaspray, un nuevo producto de la empresa Decopinta, de acuerdo con la demanda estacional pronosticada para los próximos doce meses. La principal conclusión que se deriva de los resultados obtenidos es que el método de un solo pedido, comparado con los modelos EOQ, CUM, BPF y WW, es el más costoso y, en consecuencia, el menos indicado.

Palabras clave: Costos de los inventarios, aprovisionamiento, gestión de inventarios, modelos determinísticos de inventarios, tamaño del lote.

Introducción

La función de la Gerencia de Producción consiste en planear, organizar, dirigir y controlar las actividades requeridas y puede definirse como la administración de los recursos directos necesarios para producir los bienes y/o servicios que ofrece una organización, y que se venderán a los clientes directos y/o empresas. El término Gerencia de Producción fue acuñado con el surgimiento de la industria manufacturera, y el énfasis subsiguiente en la gestión de la producción en ese sector.

En este sentido, la Gerencia de Producción se basa en la gestión de la compra y venta de artículos, materias primas y demás que le permitan a las empresas acumular los inventarios suficientes para satisfacer las demandas de sus clientes. Por lo anterior, el presente trabajo tiene como objetivo analizar los siguientes modelos determinísticos de tamaño de lote: cantidad económica de pedido (EOQ), algoritmo Silver–Meal (SM), costo unitario mínimo (CUM), balanceo de periodo fragmentado (BPF) y algoritmo de Wagner–Whitin (WW), para el aprovisionamiento de materiales como parte de la gestión de inventarios sujetos a demanda independiente.

Teniendo esto en mente, el presente trabajo se divide en tres bloques: en la primera parte se plantean los costos y modelos más sobresalientes para la gestión de inventarios; después, en el segundo bloque se presenta la aplicación de los mencionados modelos de gestión de inventarios para la demanda del Megaspray de la empresa Decopinta, realizando un comparativo entre ellos. Finalmente, se indican las conclusiones más importantes derivadas de la aplicación de estos modelos al caso analizado.

Costos de los inventarios

Los inventarios agrupan el conjunto de bienes que las empresas requieren para satisfacer la demanda de los productos o servicios que ofertan. Las principales razones para  mantener inventarios se centra en lograr economías de escala, enfrentar la incertidumbre, suavizar la variabilidad de la demanda, restricciones de la logística empresarial y costos de los sistemas de control (Nahmias, 2007).

Así las cosas se tienen varios tipos principales de inventarios dependiendo del sector en el que se desempeñe la compañía: inventario de materiales y suministros, de producto en proceso y de producto terminado, este es el caso de empresas industriales dedicadas a la

Compra, producción y venta de productos tangibles elaborados. Por otra parte, las empresas de servicios, “no mantienen inventarios de productos para la venta” (Horngren et al., 2002: 36), sin embargo pueden mantener inventarios de suministros que contribuyan a la prestación del servicio.

Con respecto a la naturaleza de las operaciones de la empresa pueden distinguirse: (1) inventarios cíclicos, generados al producir por lotes y no de manera continua; (2) inventarios estacionales, de productos que poseen demandas que dependen de algún ciclo o temporada; (3) inventarios de seguridad, cuyo fin es cubrir cambios imprevistos en la demanda; e (4) inventarios especulativos, los cuales se generan cuando se espera un aumento en los precios superior a los costos de manejo del inventario (Díaz, 1999).

En cuanto a sus costos, los inventarios son “uno de los activos más caros para muchas empresas, a veces llega a representar el 40% del capital total invertido” (Heizer y Render, 2001: 43). En línea con lo anterior, más del 50% de los costos totales en las empresas industriales son costos de materiales, mientras que en las empresas comerciales o de ventas, los costos de las mercancías representan cerca del 70% de los costos totales (Horngren et al., 2002).

De acuerdo a los teóricos Heizer y Render (2001) los costos asociados a los inventarios se agrupan en (1) costos de pedido, los cuales se refieren a los costos de especificaciones, orden de compra, seguimiento a los proveedores, documentos de oficina, personal administrativo, etc., necesarios para procesar el propio pedido;  y (2) costos de mantenimiento, los cuales incluyen los costos de alquiler de almacenes, depreciación, costos operativos, impuestos, costo de oportunidad del capital, seguros, costos de financiamiento, pérdidas, desechos, obsolescencia, etcétera.

Aprovisionamiento y modelos de gestión de inventarios

La función de aprovisionamiento consiste en proporcionar en el momento oportuno y al costo adecuado las materiales, equipos y/o elementos requeridos para el desarrollo de sus actividades, involucrando procesos de compra, almacenamiento y la gestión de inventarios. Esta última se ocupa de la determinación de cuanto hay que pedir y cuando debe colocarse una orden de acuerdo a los múltiples factores involucrados, como los son la certidumbre de la demanda y los plazos de entrega, así mismo, debe darle seguimiento a los pedidos, desde el despacho por parte del proveedor hasta la entrega en el punto pactado.

Así las cosas, el objetivo de la Gestión de Inventarios es mantener unas existencias tales que impidan en cualquier momento el retardo en la elaboración o disposición de los productos para la venta por falta de los elementos requeridos, mientras que se minimiza el costo de abastecimiento y mantenimiento de las existencias en el inventario (Blanco, 2003). Para esto, la función de aprovisionamiento se vale de modelos de gestión de inventarios, basados en procedimientos determinísticos y/o estocásticos para el cálculo de cantidades óptimas de pedido, los cuales, según Chase y Aquilano (1945: 642) se definen como “el conjunto de políticas y controles que supervisa los niveles de inventario y determina cuáles son los niveles que deben mantenerse, cuándo hay que reabastecerse el inventario y de qué tamaño deben ser los pedidos”.

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