ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Recurso De Revision


Enviado por   •  2 de Diciembre de 2013  •  3.635 Palabras (15 Páginas)  •  216 Visitas

Página 1 de 15

LA UTOPÍA DE THOMAS MORE (1)

Enrique Suárez-Iñiguez (2)

seminariodeestudiosprospectivos@yahoo.com.mx

Resumen: El autor elabora un análisis sobre la Utopía escrita por Tomás Moro y describe ese reino civilizado y estruct7urado idealmente donde el estado vigila y no hay ocio, aunque algunos autores critican esa sociedad donde no existe libertad ni propiedad individual, finalmente es un planteamiento que ha dado nacimiento a toda una corriente. Finalmente el ser humano siempre ha estado interesado en generar las sociedades utópicas.

Palabras clave:Tomás Moro, Utopía, sociedad utópica, utopienses

Thomas More (el apellido inglés More se latinizó como Monis y de ahí se castellanizó como Moro) (1478-1535) humanista, amigo de Erasmo, hombre culto, jurista, canciller de Inglaterra en 1529, pagó con su vida su fe cristiana por oponerse a las pretensiones de Enrique VIII de convertirse en cabeza de la Iglesia y divorciarse de Catalina de Aragón. Fue beatificado en 1886 por León X y canonizado en 1935 por Pío XI. Fue el representante más conspicuo del tardío y breve humanismo inglés y tuvo una gran importancia como hombre de letras. En 1516 escribió, en latín, la Utopía fue publicada en inglés en 1551 ya muerto More. El libro al parecer (3) tuvo gran éxito durante el siglo XVI y fue traducido a varias lenguas. Incluso se pretendió llevarlo a la práctica. Se sabe, por ejemplo, que Vasco de Quiroga fundó dos pueblos-refugio en México inspirados en la Utopía.

El hombre ha escrito siempre sobre Estados o sociedades utópicas (4). Homero nos habla de los Campos Elíseos, Hesíodo de la Edad Dorada y Plutarco describe una Esparta Utópica. En el siglo XVII, Campanella publicó La cittá del Sole y Bacon New Atlantis. En 1890 W. Monis escribió News From Nowhere y en nuestro siglo H.G. Wells dio a conocer A Modern Utopia en tanto que James Hilton inventó Shangri-La en su Lost Horizon. También podemos sumar el 1984 de Orwell, el Walden de Henry David Thoreau, el Walden dos de B.F. Skinner y el Mundo Feliz de Aldous Huxley, entre las más célebres utopías y por mencionar sólo algunas. More escribe una de las más importantes, altamente influida por la más famosa de todas: La República de platón. Se ha escrito ya mucho sobre las similitudes y diferencia entre estas dos utopías para volver sobre ello.

More creía que las condiciones concretas de vida eran fundamentales para conseguir un Estado más justo. Skinner, en nuestro siglo, piensa algo similar: para él la felicidad depende de circunstancias propicias en la vida diaria. (5) Por ello ambos bajan a diseñar detalles que harán la vida más agradable y útil.

La forma literaria de la Utopía de More es la de un diálogo entre el propio More, el editor Peter Giles, amigo de More, y el narrador Rafael Hithloday (el apellido significa experto en sin sentidos o quizá también “visionario”), en Amberes en los jardines de la casa que ocupaba More.

En el libro I se dialoga sobre lo que podríamos llamar las funciones del intelectual y del político, pues More y Giles aconsejan a Hithloday que entre al servicio de un Rey debido a sus múltiples conocimientos y experiencias, pero aquél responde con una negativa ya que, a su juicio, los gobernantes europeos no le escucharían pues estaban más preocupados por hacer la guerra y por enriquecerse que por aprender y dirigir a sus súbditos. Un gobernante debe hacer cosas que no suele hacer:

que viva de lo suyo sin perjudicar a nadie; que no gaste más de lo que puede; que refrene la maldad; que prevenga los vicios y aparte las ocasiones de delito dirigiendo bien a sus súbditos y no permitiendo que aumente la maldad para castigarla después; que no se apresure tanto en resucitar leyes que la costumbre ha abolido, especialmente las que llevan largo tiempo olvidadas y nunca echadas de menos ni necesitadas y que nunca, so capa y pretexto de trasgresión, imponga multas y fianzas que ningún juez toleraría que impusiera ningún particular por injustas y llenas de artimañas. (6)

El papel del filósofo está en sus escritos: ese es su único deber. La política lo obliga a compromisos innobles. Pretender aconsejar al rey es tarea yana “pues o bien debería decir cosas distintas de las que dicen ellos y entonces sería igual que si no dijera nada o debería decir lo mismo que ellos y... ayudar a propagar su locura” (I, 427).

Ahora bien, es casi imposible, dice el personaje Hithloday, que esa república gobierne justamente y florezca con prosperidad si hay propiedad privada (I, 436) pues con ella no habría sino pobreza y carencias ya que lo que se le da a uno se le quita a otro (I, 451). “Así estoy completamente persuadido de que no puede hacerse ninguna distribución equitativa y justa de las cosas y de que aquella perfecta plenitud no existirá nunca entre los hombres a menos que esta propiedad sea proscrita y prohibida” (I, 446). ¡Tesis radical si la hubo! En pleno siglo XV More —aunque a través de su personaje Hithloday pues él dice estar en contra (7)- sostiene un comunismo más próximo al de Marx que el de Platón, pues éste sólo lo pretendía para los guardianes. Planteado lo anterior como fundamento pasa entonces a describir el reino de Utopía en el libro II de la obra.

Utopía es un reino civilizado que aventaja a todos los otros reinos de su tiempo, dice Hithloday. Después de describir su geografía aprendemos que la isla está gobernada por el rey Utopo, que tiene cincuenta y cuatro bellas ciudades o capitales de demarcación (8), que todos hablan la misma lengua y que tienen leyes y costumbres parecidas (II. a: 20). En el campo hay granjas provistas de todo género de instrumentos y herramientas para la agricultura en donde viven los ciudadanos por turnos. Cada granja está habitada por cuarenta personas por lo menos, dos esclavos (9) bajo las órdenes del cabeza de familia y de su esposa, “personas muy inteligentes, discretas y ancianas”.

De cada una de estas familias o granjas van cada año a la ciudad veinte personas que han estado previamente dos años seguidos en el campo. En su lugar, el mismo número de repuesto es enviado de la ciudad, los cuales serán instruidos y enseñados por los que ya han estado allí un año y son por tanto expertos y hábiles en las tareas del campo. Y ellos enseñarán a otros el año siguiente.

Esto lo hacen por miedo a que la escasez pudiera producirse por falta de conocimientos si todos fueran nuevos (u, a: 29-36).

Respecto a las ciudades, todas son parecidas y la principal, su capital, es Amaurota, sede del Consejo. Está rodeada de una muralla alta y gruesa, tiene un foso seco, profundo y ancho plagado de arbustos, zarzas y espinos por tres lados y por el cuarto el río (II, b: 25-27). Nada dentro de las casas es privado

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (21 Kb)
Leer 14 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com