Resolución de conflictos en el ámbito educativo adolescente

[pic 1]15/07/2021

Resolución de conflictos en el ámbito educativo adolescente.

Cuando escuchamos la palabra conflicto, automáticamente lo asociamos de manera negativa, pensamos en problemas, peleas y discusiones, pero no tiene que ser siempre así ya que el conflicto es una prueba donde demuestra que somos personas diferentes, todos hemos tenido un disgusto con la gente que nos rodea, la única forma en la que no tendríamos conflictos sería que no tuviéramos relación con nadie, por eso es parte natural de la vida. Viéndolo de lado positivo se puede decir que promueve el cambio, crecimiento y la madurez.

Existen diferentes tipos de conflictos y dependiendo del contexto o la forma en que se manifiestan podemos intervenir para solucionarlo y no convertirlo en una disputa, por esa razón, como docentes tenemos doble reto, por un lado mediar los comportamientos conflictivos y por el otro, darle las herramientas a los estudiantes para que sean ellos mismos los que intervengan de la manera correcta, así estarán también desarrollando competencias como respeto, empatía, escucha activa, negociaciones de acuerdo, comunicación efectiva, análisis de situaciones en conflicto, etc.  Es muy importante que el educador tenga un buen dominio de las emociones para mantener la calma y poder analizar las situaciones de manera clara, obteniendo así decisiones más acertadas, otra crucial competencia también es la formulación de alternativas de solución basadas en criterios validos de pertinencia.

Algunas de las estrategias para resolver estos desacuerdos que podemos tener en el aula de clase es tratar de imponer a la otra parte la solución deseada por uno, otra alternativa sería la de ceder, esta se utiliza para llegar a una solución de manera rápida, la otra es intentando encontrar una opción que satisfaga las aspiraciones de ambos lados, la intervención de una tercera parte también ayuda a identificar las cuestiones y llegar a un acuerdo. La retirada o el no hacer nada ante este en ocasiones no resulta favorable, es por eso que muchas veces se combinan estas estrategias para una aplicación adecuada. Evitarles conflictos a nuestros estudiantes, no hace que los tengamos protegidos porque no dejamos que desarrollen estrategias para su resolución y privamos de experiencias importantes de aprendizaje.

Montserrat Valenzuela Simón

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