Resolución Conflictos

En mi opinión, la resolución de conflictos es un tema hasta tal punto importante que lo podríamos elevar a la categoría de "fundamental" para la supervivencia del ser humano, tanto como comer, dormir, y otras funciones que normalmente consideramos básicas.

La idea que plantea el artículo para la resolución de conflictos, el reconocimiento de los otros a través de la educación, no sólo me parece acertada, sino posiblemente la única que realmente funciona tanto a corto como a largo plazo.

Tanto es así, que sociedades que han fallado en establecer dicho reconocimiento mucho han sido incapaces de resolver sus diferencias llegando a protagonizar cruentos y dramáticos enfrentamientos, como es el caso del conflicto palestino-israelí, que representa el mejor ejemplo de cómo no resolver un conflicto puede amenazar la supervivencia de las personas hasta el punto de perder la vida.

Este es precisamente el punto más importante, en mi opinión, que plantea el artículo: el conflicto y la salud. Hay por supuesto, diferentes escalas, desde la neurosis que puede llegar a ocasionar un conflicto intrapersonal hasta la pérdida de la vida si se trata de un conflicto intersocial, interracial o internacional, como ya hemos indicado en el caso de Israel y Palestina.

Así pues, queda demostrado hasta qué punto es importante e imprescindible educar a los individuos desde la infancia en el reconocimiento mutuo de los otros para poder resolver los conflictos que se puedan llegar a plantear a cualquier nivel a lo largo de sus vidas.

En este sentido, los puntos críticos para facilitar el reconocimiento mutuo que se pueden transmitir a través de una buena educación, y que yo destacaría son:

- el desarrollo de la inteligencia emocional

- el autocontrol

- la escucha activa

- la empatía

- la racionalidad y la objetividad

- la capacidad de negociación

- potenciar en los individuos la voluntad de resolución de los conflictos a través de la idea de que es la única forma de recuperar el bienestar

Todos estos aspectos son la clave en el proceso de resolución de un conflicto. Se podría decir que algunos de ellos forman parte de la plataforma que lleva al del reconocimiento del otro, como son la inteligencia emocional, la escucha activa y la empatía, mientras que el resto se podrían clasificar como herramientas que permiten llegar a culminar el proceso con éxito a través de propuestas concretas, es decir, una vez establecidas las bases de la escucha activa y la empatía para poder entender al contrario a través de una comunicación efectiva, serían necesarios otros elementos como la objetividad y la negociación para encontrar vías de salida concretas que resultaran aceptables o incluso ventajosas para ambas partes. Asimismo, otras características indicadas como la voluntad de resolución o el autocontrol deben estar

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