Resumen El Viejo Y El Mar

Santiago es un anciano que se ha dedicado a la pesca desde muy joven, perdió a su esposa y en sus últimas pescas no ha tenido mucha suerte. Manolo, un niño que acompañaba a Santiago en su labor, le prohibieron continuar acompañándolo después de cuarenta días de mala racha.

En el pueblo todos conocían a Santiago como “El Viejo” y a pesar de que llevaba 83 días de mala suerte con la pesca, a otras embarcaciones les iba bien. En su día 84, Santiago decide que debe salir a pescar con más ánimos, Manolo lo quiso acompañar, pero ni sus padres ni Santiago se lo permitieron.

Santiago zarpa al mar. Durante la espera hablaba solo, aunque ya estaba acostumbrado. Mientras esperaba a que picara algo, siente un jalón fuerte. Se percata de que no es un pez común. Decide que no soltaría al pez por más fuerza que hiciera y por más lejos que lo llevara de la costa.

Al caer la noche, el viejo se empieza a asustar y comienza a rezar el Padre Nuestro y el Ave María, a pesar de que el no era muy religioso.

Santiago no llevó alimentos a su embarcación y se tenía que alimentar con el pescado rancio que usaba como carnada. En unos instantes, un ave se posa en el barco y Santiago nota que está cansada de volar, le dice que se puede quedar en el barco pero tiene que sobrevivir por su cuenta. El pez tiró tan fuerte de la cuerda que el ave salió volando. Por fin se observaba este enorme animal, era un pez espada. Santiago asombrado comenzó a forcejar para poder capturarlo hasta que lo logra, sin embargo era tan enorme que no cabía en el barco.

El pez fue enganchado al borde del barco, Santiago navegó hasta llegar a la costa, el viaje duró tres días. Durante el recorrido el enorme pez fue comido por tiburones y solo quedaron espinas. Santiago, al llegar a la costa, se sintió decepcionado y triste debido a que el enorme pez solo había quedado en espinas.

Al día siguiente las personas estaban asombradas por las espinas del pez y por las enormes dimensiones que se podían ver en él. Manolo se sintió feliz de que Santiago estuviese bien y le dijo que lo acompañaría en sus embarcaciones de pescas y que no le importaba que sus padres no estuvieran de acuerdo ya que de ahora en adelante era un adulto.

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