Rituales De Entierro Del Islam
Enviado por misterio2590 • 16 de Marzo de 2012 • 3.842 Palabras (16 Páginas) • 841 Visitas
INTRODUCCION
La finalidad de esta representación es mostrar las Reglas del Funeral en el Islam, El Islam no está reducido a un simple concepto ritual o moral, sino que supone un completo sistema social, una constitución legislativa y una normativa de vida.
El llanto por la muerte de un ser querido es una manifestación sincera e innata de nuestros sentimientos, por lo tanto es imposible contenerlo totalmente, pero si es posible aliviarlo y moderarlo. Por otra parte, el Islam, dada su condición de Doctrina basada en la justicia y la equidad, condiciona la salvación a la obra y actitud personal de cada ser viviente que es, en definitiva, la suma del bien y del mal, realizada a lo largo de su vida mundana. Ser musulmán no es un salvoconducto hacia el paraíso.
PREPARATIVOS PARA EL ENTIERRO
Obtenido el certificado de defunción y el permiso de inhumación, se procederá a preparar al fallecido según el ritual islámico, que consiste en:
• Bañar al fallecido (Gusul)
• Amortajarlo (Takfín)
• La ceremonia religiosa: Oración fúnebre y honras.
• Sepultarlo.
LEGADOS
La única posibilidad de tener un saldo a nuestro favor en el momento de la muerte es, según el Profeta Muhammad.
- Dejar una obra piadosa en funcionamiento, a título individual o comunitario, por ejemplo: un asilo de ancianos, una escuela, una mezquita (masyid), etc.
- Legar una obra científico-educativa, por ejemplo: un invento al servicio del bien común, una obra en pro de la ciencia y del progreso humano, etc.
- Un hijo virtuoso, que no dejará de implorar el perdón divino para sus padres, y al mismo tiempo, el hacerse cargo de sus deudas económicas.
Estos son los únicos legados que pueden seguir beneficiando al fallecido en la otra vida.
Además, deberá existir un hecho documental de trascendencia que el musulmán debe realizar, su “Testamento”. Este documento debe comprender dos hechos importantes, las deudas en favor y en contra, así como la división de su herencia, garantizando la
equidad entre sus herederos, de acuerdo a los preceptos islámicos establecidos.
EL TESTAMENTO (Uasíia)
LEGISLACIÓN
La legislación islámica nos indica que, en ausencia de un registro de última voluntad o de un escribano o notario, podremos redactar nuestro testamento de puño y letra, y atestiguar delante de quienes merecen nuestra confianza el contenido del mismo.
La división de los bienes que dejamos, la designación e identificación de herederos,
la liquidación de deudas y la concesión de donaciones y usufructos, son temas que atañen tanto al muerto como a los vivos y, por lo tanto, pueden ser motivo de discrepancias entre sus herederos.
Mencionaremos los puntos más significativos del testamento en la Jurisprudencia Islámica:
• Padres y cónyuges son herederos forzosos, contrariamente a lo establecido en algunos códigos civiles, es decir son herederos legítimos: esposa/o, padre, madre e hijos ó nietos en ausencia de sus padres.
• La distinción de uno o más herederos es nula en el Islam, o sea, no hay privilegios para algunos en la herencia, aún siendo mencionado y confirmada en el testamento.
• Saldar las deudas del fallecido tiene prioridad antes de la división de los bienes. Primero saldar sus deudas, luego dividir la herencia.
Relató el Imám Ahmad, Dios se complazca de él, que el Profeta Muhammad (PyB) dijo: El alma del creyente fallecido, permanecerá encadenada, hasta que sus deudas económicas sean saldadas.
Pagar las deudas del fallecido, descontándola de su herencia o bien cargándola a cuenta de sus hijos, tiene prioridad y supremacía en el Islam.
La división de libre disposición (dedicar parte de la herencia a donaciones, a personas ajenas y/o a instituciones benéficas o culturales) es posible, siempre y cuando no supere un tercio de la herencia.
El derecho de usufructo no tiene validez después de la muerte del testador. Ninguna persona puede disfrutar de un derecho en detrimento de los intereses de los demás herederos.
En ausencia de los padres del fallecido, los abuelos del mismo heredan la cuota de sus hijos, y en ausencia de un hijo heredarán los nietos (hijos del desaparecido) la cuota de su padre (la que no excederá de 1/3 de la herencia).
La mujer heredará 1/8 de la herencia y, en caso de no existir otros herederos ascenderá
la misma a 1/4.
La misión fundamental de los amigos y allegados es advertir a los familiares de la importancia del testamento en caso de existir éste y de la importancia de dividir la herencia cuanto antes, para evitar cualquier discrepancia entre los beneficiarios.
Aclararles que repartir la herencia de acuerdo a los preceptos islámicos es en beneficio de todos, conservando la unidad de la familia.
La esposa del fallecido deberá aguardar inexorablemente un período de espera (‘Idda), antes de volver a casarse, con el fin de asegurarse no estar embarazada.
El período de espera antes de contraer matrimonio, fue establecido en el Generoso Corán 2/24 y, es de cuatro meses y diez días, a contar desde la muerte de su esposo.
EL AGONIZANTE
Es preferible que el agonizante esté rodeado de sus parientes más cercanos y queridos, con el fin de escuchar sus últimos deseos y recomendaciones, tranquilizándolo y animándolo.
La enseñanza islámica en ningún caso acepta gestos por parte de los asistentes, que motive el desánimo del moribundo. Cualquier acto, o simplemente una frase, deberá ser lo más disimulado posible, puesto que nadie conoce si este enfermo morirá o, por el contrario, se recuperará de acuerdo a los designios, infundidos en él por el Todopoderoso.
El cambio de postura del agonizante, o sea orientarlo hacia la Qibla (Meca), o recitar versículos del Generoso Corán ante él, no tienen apoyo en la Jurisprudencia Islámica (Sharía), aunque no es reprochable hacerlo.
Mencionar la Profesión de Fe (Shahada) en voz baja, es un hecho permitido ante el moribundo.
EL MOMENTO DE LA MUERTE (Óbito)
En el momento inmediatamente posterior al óbito (o sea el último suspiro, que es cuando el alma abandona al cuerpo), después de pasados los primeros minutos de dolor por parte de los presentes, alguien de sus allegados deberá subir la mandíbula del fallecido, luego pasar la mano de arriba hacia abajo sobre sus ojos para cerrar sus párpados, y cubrir el cadáver con una prenda o trozo de tela.
Informar de su muerte.
Anunciarla lo más rápido posible de acuerdo a las formas y circunstancias
...