Sintecis La Moda Alimenticia

Síntesis la moda alimenticia

“El bocado light”

En cada bocado hay una carga de ciencia y de tecnología; de nutrimentos; de cultura e historia y de globalización.

Debemos preguntarnos de donde viene la comida que ingerimos, como si es natural o procesada; a veces el procesamiento es indispensable para mejorar la calidad nutricional de un alimento, en muchos casos el procesamiento es garantía de seguridad alimentaria, por lo tanto seleccionar alimentos frescos no está mal ya que de ninguna manera es sinónimo de “no natural”.

Debemos saber de dónde viene nuestros platillos que ingerimos, hay probabilidades que el bocado que llevaremos a nuestra boca tenga orígenes prehispánicos, sea producto de la conquista, de la fusión de culturas o de la globalización así mismo saber que debemos consumir adecuado para nuestra salud.

Cuando se hace la digestión del bocado una vez en nuestro interior lo que le pasa al alimento es visto por otro conjunto de disciplinas que estudian el cuerpo humano, su funcionamiento, sus necesidades de sustancias químicas, la forma en la que éstas son asimiladas, y el impacto de lo que comemos en lo que somos.

Tanto ha sido la insistencia por el concepto de la comida que se ha desencadenado una mayor preocupación que es la obesidad; de acuerdo a un estudio del Food Marketing Institute en los E.U. se vive una grasofobia y dicen consumir alimentos light; en general la gente no está bien informada ya que la comida light engorda más que la normal, se han creado alimentos como sustitutos que a la vez pueden producir menos calorías y pareciendo ser el mismo alimento; en un futuro aparecerán en los mercados nuevas grasas obtenidas de las semillas de oleaginosas tradicionales, en las que se habrá empleado ingeniería genética.

De acuerdo a la manera de alimentarnos existe un riesgo que es adquirir un esquema de alimentación ajeno a nuestra cultura, esquema que por lo general tiende a sustituir, y no, como ha sido hasta ahora a complementar, adaptar y mejorar nuestra alimentación.

Por lo tanto es mejor preferir el bocado ideal: un poco de esto, algo más de aquello, déjame probar de lo tuyo, pásame lo frijolitos..., recordando que todo en exceso es malo.

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