Sociologia

Sistemas tan diferentes como los de la Francia moderna y de la China clásica deben sus orientaciones comunes al hecho de que ambos hacen de una demanda de selección social, la ocasión de expresar completamente la tendencia propiamente profesoral a maximizar el valor social de la cualidades humanas y las cualificaciones profesionales que producen, controlan y consagran. Puesto que el Estado le proporcionaba los medios para hacer prevalecer abiertamente jerarquías específicas, el sistema mandarinal constituye un caso privilegiado ya que incluso la función de legitimación escolar de los privilegios hereditarios de cultura ha revestido en este caso una forma jurídica: este sistema que pretendía hacer depender el derecho de los oficios exclusivamente del merito personal, demostrado por el examen, reservaba explícitamente a los hijos de los funcionarios de elevada posición un derecho privilegiado de candidatura.

La evolución de la Escuela depende no solamente de la fuerza de los condicionamientos externos, sino también de la coherencia de sus estructuras, es decir, tanto de la fuerza de la resistencia que pueda oponer el suceso como de su poder de seleccionar y de reinterpretar el bazar y las influencias de acuerdo con una lógica cuyos principios generales están dados desde el momento en que la función de inculcación de una cultura heredada del pasado es asumida por una Institución especializada servida por un cuerpo de especialistas. Así la historia de un sistema relativamente autónomo, se presenta como la historia de las sistematizaciones que el sistema hace sufrir a los condicionamientos y a las innovaciones de confluencia, de acuerdo con las normas que le definen como sistema.

Examen y eliminación sin examen

Las desigualdades entre las clases son incomparablemente más fuertes, en todos los países, cuando se les mide por las “probabilidades de paso” (calculadas a partir de la proporción de niños que, en cada clase social, acceden aun nivel dado de enseñanza, con resultado anterior equivalente) que cuando se les mide por las “probabilidades de éxito.”

Los alumnos procedentes de las clases populares tienen más posibilidades de “eliminarse” de la enseñanza secundaria renunciando a entrar en ella que de eliminarse cuando ya han entrado y, a fortiori (con mayor razón) que de ser eliminados por la sanción expresa de un fracaso en el examen.

Selección técnica y selección social

La alta administración francesa no ha podido reconocer y consagra quizá nunca tan totalmente como hoy las disposiciones mas generales y asimismo mas difusas y nunca ha subordinado tan completamente a los especialistas de lo general salidos de las grandes escuelas mas prestigiosas.

Esta evolución empezó a finales del siglo pasado, con la creación de los concursos de reclutamiento (de las grandes administraciones) que, invocando las exigencias de la cultura

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