TRES ENSAYOS PARA UNA TEORÍA SEXUAL S. FREUD Resumen

Freud, Sigmund. “Tres ensayos para una teoría sexual” Cap. II Sexualidad infantil

Amnesia infantil. Oculta los primeros años de la infancia hasta los 7 u 8 años, por un proceso de represión

EL PERIODO DE LATENCIA SEXUAL DE LA INFANCIA Y SUS INTERRUPCIONES: Los niños traen impulsos sexuales en germen que van siendo reprimidos a lo largo de la vida por avances regulares del desarrollo sexual, o por particularidades individuales. Vida sexual observable hacia los 3 o 4 años.

Inhibiciones sexuales. Durante este periodo de latencia se constituyen los poderes anímicos que luego se oponen al instinto sexual y lo canalizan. Esta evolución que se presenta en este periodo parece ser condicionada orgánicamente y fijada por la herencia, por lo que la 4educación sólo tiene el deber de seguir la huellas marcadas por el aspecto orgánico.

Formación reactiva y sublimación. Sublimación proporciona elementos para las funciones culturales, consiste en desviar de la utilización sexual proveniente de los impulsos sexuales infantiles a costa de los cuales se constituyes los diques represivos

Autoerotismo: como actividad más notoria podemos mencionar el chupeteo que lleva a recordar la etapa de lactancia, el niño comienza a buscar placer en su propio cuerpo para hacerse independiente del mundo exterior, en los niños en los que esto se conserva mucho tiempo concluye en besos perversos, la bebida o fumar en exceso. Caracteres esenciales de la manifestación sexual infantil: se origina apoyada en alguna de las funciones fisiológicas de más importancia vital, no conoce ningún objeto sexual, es autoerótica, y su fin sexual se halla bajo el dominio de una zona erógena.

El fin sexual de la sexualidad infantil

Caracteres de las zonas erógenas: Las zonas erógenas son parte de epidermis o de las mucosas en las cuales ciertos estímulos hacen surgir una x sensación de placer de una determinada cualidad; ésta influye más en la producción de placer que el carácter de la parte del cuerpo correspondiente.

Fin sexual infantil. Consiste en hacer surgir la satisfacción por el estímulo apropiado de una zona erógena elegida de una u otra manera. La necesidad del retorno de la satisfacción se revela en dos formas: por una peculiar sensación de tensión y por un estímulo o prurito. El fin sexual está constituido, entonces, por el acto se sustituir el estímulo proyectado en la zona erógena por aquella otra excitación exterior que hace cesar la sensación de prurito, haciendo surgir la de satisfacción.

LAS MANIFESTACIONES SEXUALES MASTURBATORIAS

Actividad de la zona anal. En los niños la excitación en la zona intestinal es común, reteniendo esfínteres y provocando intensas contracciones musculares. El excremento es considerado parte de su cuerpo y se considera un primer regalo como un niño concebido por el acto de comer.

Actividad de las zonas genitales. Tres fases de la masturbación: una en la lactancia, otra en el florecimiento de la vida sexual 4 años aprox. Y la de la masturbación de la pubertad

Segunda fase de masturbación 4 años: a esta edad se despierta nuevamente el instinto sexual de la zona genital se conserva hasta nueva represión y si no es así continúa, el niño puede hacerse polimórficamente perverso, ser inducido a toda clase de extralimitaciones sexuales. La vida sexual infantil entraña tendencias hacia un objeto exterior

El instinto de saber: Floreciente dentro del periodo de los 3 a los 5 años, también llamado instinto de investigación, aprehensión sublimada, movida por placer de contemplación; es atraído por los problemas sexuales en edad temprana y con insospechada intensidad (enigma de la procedencia de los niños; en cuanto a la diferenciación de los sexos, el niño asume que todos poseen un órgano como el suyo).

Complejo de castración y envidia por la posesión del pene. Las formaciones sustitutivas de este pene, que el niño supone perdido en la mujer, juegan en la morfología

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