Taare Zameen Par

Como dije en el post de “Taare Zameen Par”, ya soy un fanático indiscutido de las películas hindúes. Lagaan fue fabulosa, y esta no se quedó atrás. Es que realmente este cine rompe con todo tipo de paradigmas, está hecho con el alma, y no para llenar una sala de cine.

En esta película vemos como las palabras tienen poder para construir y también un increíble poder para destruir.

Nos hace pensar en nuestras palabras, incluso al azar, incluso cuando estamos distraídos; y en la responsabilidad que ellas llevan. En el personaje del profesor rudo podemos ver como evitar hacernos responsables de lo que hicimos, vistiéndonos con el traje de la falsa indignación.

En esta película podemos ver el motivo por el cual casi todas las personas que conozco tienen miedo a reconocer que no saben algo, a ocultar su ignorancia, incluso a mentir, lastimar, engañar, fingir, pero jamás reconocer que no saben hacer algo.

Podemos ver lo peor del sistema educativo, la separación por notas, calificaciones, grados. La diferenciación entre el que sabe y el que no sabe, donde el que sabe es solo aquel que recuerda datos y el que no sabe es el chiste de los demás, es una verguenza.

Motivo por el cual pocas personas de las que voy viendo en la vida se animan a hacer algo que desconocen, prefieren hacer solo lo que saben o no hacer nada, antes que hacer algo en lo cual no se consideran suficientemente buenos para ser aceptados. Entonces pasan la vida sin nuevas experiencias, haciendo siempre las mismas actividades, mismos juegos, mismo idioma, mismo trabajo, incluso misma manera de vestir, peinar, hablar, pensar y el paradigma se extiende a todo lo que se les pueda ocurrir.

En la escena del parto vemos CLARAMENTE la diferencia entre el conocimiento y el conocimiento aplicado. La inutilidad de un conocimiento si no es llevado a la práctica es tal, que incluso puede trabajar como bloqueo para un desempeño apropiado.

Lo importante del saber, no es memorizar, el reconocimiento, los aplausos, notas, títulos, trofeos, etc… eso es solo alimento para el ego, temporal, inservible, que nos llena de más vanidad y amargura al descubrir que siempre habrá alguien mejor. Nos hace competir todo el tiempo, descalificar a los demás y comportarnos como estúpidos. Lo importante del saber es aplicarlo para mejorar nuestra vida y la de los demás… de nada sirve ser luz, si no vas a iluminar el camino de nadie.

También vemos entre otros valores que se destacan la amistad. Pero no esa amistad de compartir risas y salidas; en la que cada cual calcula para que le sirve el otro en una escala de beneficios; sino la del servicio. Así como en la vida enriquecida por el mismo, la verdadera amistad es aquella llena de gestos de servicio y amor hacia la persona amada. Los verdaderos amigos están en todos los sentidos que pueden estar para su hermano de la vida.

Hay muchas frases interesantes, pero les

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