Trabajo Práctico I: “Normas, libertad y autonomía en las instituciones educativas”

Santa Fe - 2019[pic 1]

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CONSIGNA 1

“La masa aparece como un conjunto amorfo, desfigurado, anónimo y como el telón de fondo ideal…” (Dussel, I y Caruso M.; 1999; pág. 91)

Éstas son las características de las sociedades Europea en los comienzos de la Revolución Industrial, la Revolución Francesa, la Ilustración y el sistema capitalista, cuando se realiza la migración masiva de los campesinos a la ciudad. En éste contexto, surge la educación como una herramienta propicia para el disciplinamiento (orden-control) de la nueva población urbana, siendo la escuela el organismo elegido para ello.

La institución escuela se construyó a partir de un contrato fundacional labrado entre ésta y la sociedad, dicho acuerdo tuvo el mandato social específico de educar a los sujetos (cuerpos y mentes). El contenido del mismo requería a la escuela transmitir valores y creencias que legitimaran el orden económico social establecido, siendo el Estado quien garantizaba el cumplimiento del mandato. Esto fue necesario para que el sujeto configurado se integre a una sociedad preestablecida.

A sí mismo, la escuela fue atravesada por un contrato paradójico entre ésta y el Estado, ya que busco igualdad para todos los ciudadanos modernos y a la vez diferenció según las capacidades y/o habilidades de cada clase social para perpetuar el orden. Sobre estas bases se asienta la escuela para convertirse en un aparato escolar masivo, metodología que resultó interesante para el Estado a fin de controlar y dirigir la urbe. Paralelamente surgió lo que Foucault ha llamado bio-poder, cuyo objetivo era adueñarse de la vida de la población con un control muy sutil de lo biológico. En este contexto se desarrollan una serie de nuevos aparatos para administrar la vida de la gente (la medicina, las estadísticas de nacimiento y mortalidad, programas sociales, etc).

En la modernidad clásica la regulación no borra las disciplinas, sino que se preocupa por otra cosa: el crecimiento. Lo importante para los científicos de esa época era analizar las sociedades como producto de regularidades y normas, encontrar las leyes que las gobernaban y explicar por qué a veces las cosas desviaban del camino prefijado: el crecimiento. La regulación se convierte en algo normativo: prescribe cual es la conducta “natural” y esperable, genera y produce lo anormal, la trasgresión, la desviación. La instauración de la norma excluye a quienes no la cumple y no es casual que sea en esta época donde surge la clasificación de los alumnos según sus capacidades y se confinara a los “anormales” en instituciones especiales.

CONSIGNA 2

Si enlazáramos el artículo “Normas, Libertad y Autonomía” con la lectura del texto de Lucia Garay podríamos decir que la disciplina actualmente presenta un dilema, está en puja entre dos posturas, lo INSTITUIDO y lo INSTITUYENTE.

Es decir, la disciplina INSTITUIDA es una herencia que recibieron las instituciones (familia, matrimonio, escuela), la cual utilizaba una método riguroso, impositivo y violento, propio del capital cultural e histórico que tenemos, que perjudico la libertad de acción y expresión a nivel social pero que en el ámbito escolar generó espacios de constreñimiento y a la vez de libertad y autonomía, ya que creo espacios con límites y normas que circunscribían las acciones pero a la vez habilitaba la pregunta, la enseñanza y el aprendizaje escolar.

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