Trabajo de Lengua y Literatura.
Enviado por RedStar05 • 5 de Abril de 2018 • Apuntes • 2.346 Palabras (10 Páginas) • 88 Visitas
Colegio Pureza de Maria.
Villa Venezuela.
Trabajo de
Lengua y Literatura.
- Nombre: Paola Marcela Gomez Martinez
- Número: #13
- Grado: 11mo C
- Profesor: Roberto Oviedo
- Fecha: 12·09·17
Te observo.
La noche caía en la tranquila y helada ciudad de Forks. Las hojas de los árboles eran azotadas por el fuerte viento que daba señal de que se aproximaba una tormenta. Sin embargo, nada de esto causaba alguna reacción en sus habitantes, todos ellos parecían estar bajo el dominio del parque de diversiones que habían inaugurado hace pocos días; los niños corrían hacía los juegos, otros estaban sentados comiendo algodón de azúcar, manzanas acarameladas o palomitas de maíz al lado de sus padres.
Una chica observaba cada movimiento desde la ventana del segundo piso. Vivía frente de la feria y soltó un pequeño suspiro al ver de lejos que sus amigos estaban entrando a disfrutar un poco del fin de semana. Era una chica castaña, de al menos un metro y sesenta y ocho centímetros de estatura con piel clara, ojos color grises muy bellos y un cabello con rizos muy bien definidos. Ella se encontraba sola, con un libro en la mano preparándose para el importante examen que tenía el lunes a primera hora, sus padres se encontraban celebrando su aniversario así que no volverían temprano.
La fuerte música de la feria no le permitía concentrarse del todo bien, se sumergía en sus pensamientos imaginándose que estarían haciendo sus amigos sin ella. ¿La estarán pasando bien? , ¿La extrañan?, ¿Qué pasaría si se escapa de casa para ir con ellos?.
El teléfono de la planta baja sonó haciéndola sobresaltarse. Hablando de los reyes de Roma.
Bajó lo más rápido que pudo para contestar antes de que la llamada se perdiese y luego del cuarto timbre respondió esperando que fueran sus amigos.
—¿Hola? -dijo la castaña con un ligero tono de entusiasmo.
No hubo respuesta al otro lado de la línea. Pero sabía que había alguien, podía escuchar su respiración, una fuerte respiración.
—¿Quién habla? -volvió a decir esperando que esta vez hubiera una respuesta. No la hubo, ni siquiera un saludo. Solo pudo escuchar el sonido de la otra línea cortarse causándole mucha confusión y frunció el ceño al preguntarse quién habría sido.
Un estruendo detrás de ella la hizo sobresaltarse. La ventana del comedor se había abierto por el fuerte viento causando un ruido muy estrepitoso y las cortinas de color beige se movían de arriba a abajo. La castaña caminó lentamente… muy lentamente hacia la ventana, con mucha inseguridad… un paso a la vez y cerró la ventana con cuidado asegurando que no se volviera abrir. Todo esto le estaba pareciendo muy inquietante y raro a la vez, jamás había recibido llamadas de ese tipo y esa ventana jamás se había abierto porque no funcionaba bien.
El teléfono volvió a sonar. Comenzaba a dudar si contestar o no, no quería seguir atormentándose con preguntas muy escalofriantes ya que es un poco histérica y exagerada le hacía daño pensar en ese tipo de cosas y ya su cabeza estaba hecha un lío. No contestó y se dejó caer en el sofá soltando un suspiro tratando de calmar a su corazón que comenzaba a acelerarse. Tenía que enfocarse en su estudio para el lunes sino estaba segura que reprobaría, otro día iría con sus amigos a divertirse y a festejar los resultados satisfactorios de todos. Solo tenía que relajarse y ya, solo fue un pequeño susto.
Su celular empezó a sonar y a vibrar en su bolsillo, se sintió aliviada al ver que era su amiga Alexandra quien la llamaba y no dudó ni un minuto en contestar.
—Hola Alex -saludó la castaña recuperando una parte de su entusiasmo.
—Hola Emma, me da gusto escucharte, ¿Sigues estudiando para el examen?.
—Si, solo me quedan dos temas más creo -respondió Emma.
—Eso espero, oye me hubiera gustado que estuvieras con nosotros -afirmó Alexandra.
—A mi también me hubiera gustado, pero sabes lo importante que es para mi esto.
—Si, lo sé muy bien quería llamarte antes pero me distraje… -entonces eso significa que ella ha sido la que estaba llamando hace poco.
—Alex, ¿Tu has estado llamándome? -le interrogó la castaña subiendo el tono de voz.
—No, no lo he hecho. Esta es la primera vez que te llamo.
La castaña sintió como su corazón daba un vuelco al escuchar esas palabras. ¿Entonces quien le querría gastar un broma? no era divertido, se estaba volviendo muy escalofriante. De repente, la línea empezó a entrecortarse y apenas se podía escuchar las palabras de Alex al otro lado y luego solo se logró escuchar un “BIP” que indicaba que la llamada se había cortado. La tormenta debe de estar interfiriendo en la señal de los celulares porque la fuerza del viento a aumentado considerablemente causando un poco frío.
El teléfono que estaba en la sala comenzó a sonar de nuevo. Ese sonido ya le estaba causando dolor de cabeza, ya era mucha la insistencia en llamarla y no creía que fueran sus padres porque los dos le dijeron que apagarían sus celulares para cenar más tranquilos. Después del cuarto timbre decidir contestar para escuchar de quien se trataba.
—¿Hola? -dijo insegura.
—Hola… Emma -dijo la voz al otro lado de la línea. Era la voz de hombre, demasiado grave y tenebrosa. Al escucharla un escalofrío le recorrió el cuerpo causando que su piel se erizara por completo, el miedo se apoderó de ella al imaginarse que su nombre saliera de los labios de él.
—¿Quién eres?… ¿Qué es lo que quieres? -Preguntó la castaña con un nudo en la garganta.
—Shh, no te alteres. Déjame decirte que la clase de cálculo no es tan complicada. -insinuó el hombre con un tono de malicia.
Emma no podía dar crédito a lo que escuchó. Puso sus ojos como platos y su corazón estaba a punto de salirse del pecho, su manos sudaban y temblaban por el miedo provocado hace poco.
—¿Có-cómo sabes que estoy estudiando cálculo? -no podía verlo pero estaba segura de que estaba sonriendo.
...