“Acto, consecuencia”

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Nombre del alumno: Pamela Alejandra Fierros Orozco

Profesor: Dr. Raúl Méndez Cifuentes

Grupo: 1

Semestre: Primer Semestre

Materia: Desarrollo Humano y Social

Fecha: 05-Agosto-2019

“Acto, consecuencia”

Planteamiento del problema

Los seres humanos, tenemos todos una característica en común, algo que nos une más que la religión, la política y el amor. El egoísmo.

Pensamos que nosotros somos el centro del universo y que nuestras acciones no tienen repercusiones en los demás seres vivos. Un claro ejemplo de esta situación, fue el muy conocido Führer, Adolfo Hitler. El perseguía un ideal. Alemania como potencia máxima con el linaje más puro que pudiera conocerse. A consecuencia de esto, Hitler, a su correcta o no manera, buscó luchar por sus sueños y sus ideales, sin pensar en las consecuencias que esto traería, no solo para los judíos, no solo a los alemanes puros; sino causando estragos a nivel mundial, afectando así la calidad de millones de seres vivos, y no solo de los que vivían en esos momentos, si no, de las futuras generaciones que seguirían con las secuelas de las consecuencias que esto causaría.

Otro ejemplo claro de esto, son los jefes de la planta nuclear de Chernóbil. Ellos se encontraban realmente cansados y molestos, y es válido, pues todos en algún momento hemos querido tirar la toalla, pero, algunos se ponen a pensar, ¿Si en este momento, me rindo, ¿Qué será de mí? ¿Qué será de mis hijos? ¿Qué será de todos aquellos que dependen de mí?

Desgraciadamente, el jefe de la planta nuclear, solo pensaba en una cosa en ese momento. Terminar la prueba de seguridad lo más pronto posible, claramente, sin medir las consecuencias de sus acciones, para así poder ir a la comodidad de sus aposentos a tomar un merecido descanso.

Sin embargo, ¿A caso, se habría puesto a pensar en la amanera en que su decisión traería consecuencias en los factores bio-ambientales, y en la manera en que esto afectaría el desarrollo, no solo social, sino biológico, sociocultural y psicológico, de los habitantes de este lugar?

Así como estos actos, que han tenido sus consecuencias, se podrían nombrar muchos. Acciones que han afectado, e incluso frenado el desarrollo de una sociedad, y por lo tanto su calidad de vida.

Pero así como estos grandes actos, tienen sus grandes consecuencias, nuestras “pequeñas” acciones, de igual manera, tienen consecuencias, y no solo para nosotros mismos, si no, inconscientemente, para otras personas. El simple hecho de tirar la basura fuera de su lugar, usar un popote sin que sea necesario; perjudican la salud de muchos seres vivos.

Así que la pregunta es: ¿Cómo podemos hacer consciencia de nuestros actos para que las consecuencias que estas tengan, no afecten el desarrollo humano y social de los seres a nuestro alrededor, ni su calidad de vida?

Justificación social y personal.

A lo largo de los años, hemos sido víctimas de las consecuencias de las decisiones que han tomado otras personas y que nosotros somos los que cargan con estas secuelas. Somos una sociedad que ha tenido que adaptarse a las situaciones resultantes de actos ajenos. No solo como sociedad, en que las decisiones de nuestros mandatarios políticos hicieron algo por lo que ahora estamos pagando sus actos. El simple hecho de que nuestros padres decidieran o no usar protección para que fuéramos o no concebidos.

Hubo una mujer, joven y fuerte, que en un día del padre, fue abandonada por el padre de su única hija. Este irresponsable hombre, la dejó con deudas, tarjetas sin pagar, sin nada que comer. Lo único que dejó el día que se fue, fueron 800 pesos para toda la quincena.

Esta mujer tuvo que esforzarse al máximo para sacar adelante a su hija y para luchar contra el probable diagnóstico de un probable cáncer de mama.

A pesar de los obstáculos, siempre firme y con valor, esta mujer salió adelante y logró estar mucho mejor de lo que estaban antes de que el malvado e irresponsable hombre se fuera. Sin embargo, siempre se duce qye hay un periodo de paz antes de la tormenta. Desgraciadamente, la tormenta llegó literalmente, a la vida de la mujer y de la niña.

Un día de fuerte lluvia, la niña se estaba bañando, preparándose para ir al otro día a la escuela, cuando de pronto, de un momento a otro, el agua cesó y la niña, que no tenía otro recurso ni opción, llamó a su madre, la cual en ese momento estaba trabajando.

La mujer, preocupada por la frágil de su hija, subió las escaleras en plena tormenta. Todo iba bien hasta que un escalón destartalado hizo su aparición y la mujer cayó de una altura de más de cinco metros de sentón.

La mujer no sabía que sucedía, no sabía qué hacer con el inmenso dolor que esto le causaba, sin embargo, no encontraba solución. Hasta que un día, una amiga de la mujer, le recomendó a un “buen” cirujano ortopedista. La mujer se puso en manos del cirujano.

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