Asesinos En Serie

Los asesinos en serie se han convertido en uno de los grupos más estudiados en la historia de la psicología y la criminología. Sin embargo, la mayoría de las personas los juzgamos y los etiquetamos de simples “enfermos mentales”, los cuales pueden ser curados a través de la psicoterapia… ¿Pero que tan cierto será esto?

Este trabajo radica en el planteamiento de lo siguiente ¿deben los asesinos en serie ir a la cárcel y cumplir una condena? tratare de abarcar el máximo sobre el tema, explicando sus características. Entendamos primeramente lo que es crimen y un homicidio.

Comenzaremos desarrollando que es el crimen. El crimen es un episodio que tiene un principio, un desarrollo y un fin. La intercriminis es desde que se empieza hasta antes de realizar el acto y se convierte en tentativa, hay 3 niveles de interpretación en la criminología:

• Crimen: episodio, real, desarrollo y final

• Criminal : el autor del drama antisocial

• Criminalidad: conjunto de conductas antisociales

Los tipos de conductas existentes que concibe la criminalística son:

• CONDUCTA SOCIAL: cumple con ella adecuadamente a la convivencia y no arremete en forma alguna la colectividad y cumple con el bien común

• CONDUCTA ASOCIAL: Carece de contenido social no tiene relación con ninguna clasificación con el bien común

• CONDUCTA PARASOCIAL: se da en el contexto pero es diferente a las conductas seguidas por conglomerado social, no realiza el bien común pero tampoco lo agrede. Antisocial va vs. El bien social o común atenta vs. La estructura básica de la sociedad destruye sus valores fundamentales, lesiona la convivencia.

En cuanto a homicidio se refiere, es el resultado de una acción u omisión mediante el cual se priva de la vida a otra persona ya sea dolosa o culposamente. El término tiene sus raíces etimológicas en el latín homicidĭum, y éste a su vez del griego ὁμός, ή, όν [homόs], similar o semejante, y latino caedere, que significa matar, o sea, matar a un semejante. Es una conducta antijurídica y por regla general culpable (excepto en casos de inimputabilidad, donde no se es culpable pero sí responsable penalmente), que consiste en atentar contra el bien jurídico de la vida de una persona física.

Entendiendo esto, entraremos mas en tema diferenciando al “multiasesino” o el “asesino múltiple” de los “asesinos en serie”. El primero es aquel que comete el asesinato de más de una víctima en un solo evento, como fue el caso resiente de James Holmes ; mientras que el segundo se refiere a todo individuo que comete tres o más asesinatos en un lapso mayor a 30 días —incluido un periodo de enfriamiento entre uno y otro—, y cuya única motivación consta de la gratificación psicológica y/o sexual que este acto le proporciona.

Continuaremos hablando de la historia de esta última expresión. La expresión en inglés, serial killer —asesino en serie— fue usada por primera vez en 1970 por el agente del FBI Robert Ressler. Desde los años 30, el director de la policía alemana Ernst Gennat ya había acuñado el término Serienmörder en un artículo sobre Peter Kürten —llamado “el Vampiro de Düsseldorf” —, pero no fue si no hasta los años 70 cuando éste se popularizó debido a la publicidad generada por los casos Ted Bundy y David Berkowitz —mejor conocido como «el Hijo de Sam».

Desde hace siglos, se ha intentado establecer un patrón o perfil de los asesinos seriales. En el siglo XIX, el doctor Richard von Krafft-Ebing —mejor conocido por su libro Psychopathia Sexualis, de 1886— condujo una de las primeras investigaciones documentadas sobre numerosos homicidios violentos, sexuales y en serie, y quienes los cometían.

Los serials killers se originan por un proceso complejo que involucra factores biológicos, sociales y del entorno; Pueden mencionarse algunas constantes:

• Tienen motivaciones de carácter individuales.

• No se limitan a un grupo demográfico específico: sexo, edad, grupo racial o religión.

• Tienen una predisposición biológica —una anomalía fisiológica del cerebro, por ejemplo—, moldeada por su carácter psicológico, y que se hace presente durante una fase crítica de su desarrollo social.

• Cuando sus crímenes involucran sexo, significa que en algún punto de su desarrollo psicológico “erotizaron” la violencia, la cual queda inexplicablemente asociada a la gratificación sexual en su psique .

• Pueden tener motivos diversos para cometer sus crímenes, y éstos pueden cambiar durante la serie de asesinatos: ira, ya sea contra cierto subgrupo de la población o contra la sociedad en general; estatus o compensación en alguna organización criminal; beneficio económico a consecuencia, como en el caso de las viudas negras ; ideología, ya sea propia o de algún grupo, religión o culto; poder/emoción, es decir que el asesino se siente poderoso o excitado por sus crímenes; gratificación sexual, ya sea necesidades o deseos, y psicosis, en la que se sufre de una enfermedad mental severa —alucinaciones y delirios, por ejemplo—. Salvo en este último caso, los serial killers siempre cometen sus crímenes porque desean hacerlo.

• En general tienen comportamiento depredador, valoran poco la vida humana, y a menudo padecen de alguna psicopatía, ya sea interpersonal (una falsa apariencia encantadora, manipulación, mentiras compulsivas y una exageración de la propia valía, afectiva (ausencia de culpa y remordimiento, incapacidad de empatizar y de asumir responsabilidad de sus actos), de comportamiento (búsqueda patológica de estimulación, impulsividad, irresponsabilidad, parasitismo psicológico), o antisocial ( problemas de conducta infantil, delincuencia juvenil, hasta criminalidad) Sin embargo, las psicopatías no explican completamente las motivaciones de los asesinos seriales.

• Eligen a sus víctimas según tres criterios: disponibilidad —qué tan fácil es aproximarse a ella—, vulnerabilidad —qué tan susceptible es de ser atacada— y atractivo para el asesino, según sus preferencias.

Los homicidas seriales en su proceso de "caza" de víctimas según Joel Norris se pueden diferenciar varias fases entre las que se encuentran las siguientes:

• Áurea: fase de aislamiento social e inclusión hacia el mundo de fantasías de muerte y destrucción. En sus fantasías ellos crean otra realidad, una en la cual tienen el control total y no se sienten amenazados, sino dominantes. La fantasía por si sola puede satisfacerlos momentáneamente, pero también puede ser insuficiente e impulsarlos imperiosamente a matar.

• Pesca: fase para elegir y frecuentar sitios adecuados para encontrar a su víctima

• Seducción:

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