Botulismo

BOTULISMO

¿Qué es?

El botulismo es una enfermedad infrecuente pero muy seria, que es causada por una bacteria llamada clostridium botulinum, que se encuentra en zonas contaminadas tales como suelos y aguas no tratadas.

La vía de intoxicación más común es la alimentaria, por alimentos mal enlatados o mal conservados. Las bacterias también pueden entrar al organismo a través de heridas abiertas.

Entre 1793 y 1827, hubo 234 casos sobre esta enfermedad, y se agregaron hasta el año 1853, 400 casos con 150 fallecidos.

Efectos del botulismo

Los efectos se producen a través de la liberación de una sustancia llamada acetilcolina en las terminaciones nerviosas, que inmoviliza los músculos y puede llevar a la muerte por paro respiratorio.

Si es tratada a tiempo, el índice de mortalidad es de un 20 %, cuando no se puede aplicar el tratamiento se eleva a un 60 %.

¿Cómo se transmite?

-A través de las comidas

-Por heridas infectadas

-Por la ingesta de las esporas de la bacteria (o sea el elemento reproductor de las mismas) que crecen en el intestino.

Los alimentos que suelen contaminarse con mayor frecuencia son las verduras enlatadas caseras como espárragos, arvejas, remolacha y choclo, y menos frecuentemente ajo y tomate. También puede ser transmitido por la carne de cerdo, el pescado crudo o ahumado y la miel.

El botulismo también ocurre si la bacteria penetra a través de heridas abiertas.

En el caso de los niños la causa más común la constituye la ingestión de miel.

Los síntomas de la enfermedad

Pueden aparecer alrededor de 6 horas de contraída la infección, o pueden tardar en hasta 6 días.

El período de incubación abarca de 18 a 36 horas, si los síntomas comienzan antes, la intoxicación suele ser más grave y con mayor riesgo de muerte para el paciente.

Los síntomas más frecuentes son: La persona afectada se mantiene despierta y sin fiebre, boca seca, visión doble, dificultad en la visión cercana, dificultad para tragar y para pronunciar palabras; náuseas, vómitos, retortijones y diarrea; debilidad o parálisis en las extremidades, estreñimiento, pupilas que no reaccionan a la luz y párpados caídos e inestabilidad al andar. La detección de la neurotoxina en el suero o las heces confirma la enfermedad.

También se estudian las comidas sospechosas para detectar el origen de la neurotóxina.

¿Cómo puede prevenirse?

Para prevenir la enfermedad es recomendable hervir los alimentos previamente descriptos durante al menos 10 minutos antes de consumirlos para eliminar la bacteria.

La miel también puede contenerla y es por esto que no se recomienda a niños menores de un año.

Se realizan exámenes de contenido gástrico y materia fecal. El hallazgo de toxina en sangre es poco frecuente

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