Cambios En La Estructura Familiar

De acuerdo a José Antonio Marina la relación sexual y la procreación son aspectos de la realidad biológica de la familia como institución cultural.

Por un lado el aspecto biológico unifica sus manifestaciones históricas entiendo yo que a lo largo de la historia la relación sexual y la procreación son hechos que han estado alineados a la familia por otro lado la cultura ha diversificado estos y otros aspectos.

Con la entrada de la mujer al mundo laboral ésta adquirió independencia y otra identidad pues paso de ser cuidadora a proveedora, produciéndose un fenómeno anormal el incremento de divorcios, lo cual fomento que la institución familiar quedara expuesta y frágil lo que desemboco en la desaparición del modelo tradicional

El nuevo modelo familiar adoptado provoca un sentimiento de independencia pero trae consigo dificultades, pues anteriormente los integrantes de la familia llevaban una vida mas sosegada pues el hecho de regirse bajo costumbres y patrones de vida convencionales permitía visualizar horizontes de vida en familia.

Contrario a esto con el modelo adoptado la pareja de la actualidad no tiene un rumbo fijo y tiene que estar tomando decisiones constantemente sobre la relación que han de entablar, la mujer por ejemplo con los cambios de roles y su nueva identidad ha transformado la mentalidad en algunas y han pasado de la forma natural de concebir hijos a la de ser madre mediante técnicas asistidas sin requerir tener una pareja.

El hombre por otro lado dice Zygmunt Bauman citado por Marina “Creo que a los hombres en este momento, no les preocupa tanto la necesidad de pertenecer a una comunidad, como el tener que elegir y decidir permanentemente”.

Los cambios de mentalidad provocan en la pareja que al iniciar una relación lo hagan bajo parámetros de autoprotección pues ambos sujetos regidos por una ética individualista en que ninguno quiere hacer más por el otro, mantienen una actitud de reserva vislumbran desde el principio dificultades, obstáculos y posible separación la cual ante la perspectiva tan pobre de ambos la desintegración acaba dándose.

Al respecto Elizabeth Beck citada por Marina expresa “Si los cónyuges tienen dudas sobre la durabilidad de su unión, ese escepticismo se traducirá en la disminución de las “inversiones” específicamente matrimoniales” aumentando con ello el riesgo de separación.

Marina expresa que quien inicia una relación bajo el estigma de que ésta no va a ser duradera inconscientemente se consigue que así suceda dado que las parejas viven en una constante zozobra en un régimen del “por si acaso” constantemente a la defensiva.

Dice además que la familia ha sido superada por la pareja y la pareja por la individualidad que quiere realizarse en la pareja sin dejar su individualidad.

Cada uno apuesta por altas expectativas en la relación con el otro pero poco hacen para que se ejecuten, la relación mas bien se rige por fortalecer su propia independencia, su autonomía, su ego que raya en narcicismo de lo cual lo único que vislumbran es el fracaso inminente y algo parecido a un rompecabezas del cual no se tiene el modelo que ha de constituirse.

Marina propone que un modelo de familia tiene que ser de dos modelos:

Un modelo de pareja, la procreación convierte a una pareja en una familia, antes del nacimiento las parejas son contratos entre adultos que ellos deben arreglar,

Un modelo

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