DISCURSO DE LA LIBERTAD

Discurso

¿Estás a favor o en contra?

La gran pregunta que se nos hace cada vez que debatimos o platicamos sobre algún tema polémico. Tenemos que argumentar con datos científicos, religiosos, astrofísicos o de cualquier otro tipo para afirmar que lo que decimos es lo verdadero y lo correcto.

Pero, ¿Por qué no estar simplemente a favor de la libertad?, ¿Por qué darle mil vueltas a algo que llega a ser tan simple?

Personalmente cada vez que me preguntan si estoy a favor o en contra de temas como la transexualidad o el matrimonio igualitario, antes de dar datos sobre Dios y que es lo que él quiere para nosotros, que si está bien o si está mal, yo simplemente digo que estoy a favor de que cada quien haga de su vida lo que quiera mientras no afecte a los demás, ósea que sepa usar su libertad con inteligencia y es eso de lo que les quiero hablar el día de hoy.

Es natural que como seres humanos tengamos una postura para muchos temas existentes y probablemente dicha postura es muy rígida y difícilmente se cambie. Pero ese no es el problema, el problema es que cuando una persona desacuerda con la ideología de otra, en vez de darse la vuelta e irse, que sería lo lógico, se queda a faltar al respeto y  tratar de cambiar a la otra persona cuando esta, solo está viviendo su vida libremente sin afectar a terceras personas.

El mundo hoy en día está pasando por cambios increíbles en cuanto a apertura y libertad entre sus habitantes. Cada vez se abre más la mente y se aceptan cosas que en el pasado hubieran sido imposibles.  A pesar de ello es completamente normal que sigan existiendo personas las cuales aún mantengan otro tipo de maneras de pensar y tampoco sería conveniente obligarlas a unirse a las ideologías contemporáneas cuando simplemente no van con ellas. Lo que si se debe hacer es invitarlos a respetar y si no se quieren unir a la lucha por una causa, está bien, pero que tampoco estén ahí solo para estorbar.

Hablando del respeto, me gustaría tocar la doble moral que existe alrededor de este verbo. Muchas personas exigen respeto a sus posturas cuando estas ya ni siquiera son posturas de verdad sino expresiones de odio. Dando un ejemplo de un tema muy actual en nuestro país, no es lo mismo desacordar con ciertos aspectos del feminismo y cuestionarlo que ser machista misógino y hacer comentarios repulsivos hacia el movimiento y hacia quienes forman parte de él.

Es muy curioso e interesante analizar como a lo largo de las generaciones las maneras de pensar han ido cambiando. Tal vez nuestros abuelos eran o siguen siendo súper cerrados y no estarían dispuestos ni a respetar algo que fuera diferente o ajeno al entorno en el que se criaron. La mayoría de nuestros papás crecieron bajo la modernización y aunque ya se abría un poco la mente, esto solo pasaba en las grandes ciudades ya que en el resto de los lugares, la mentalidad se seguía manteniendo bajo candado. En lo personal no justifico del todo pero si comprendo el porqué de su manera de actuar y tampoco mantengo una postura de culpabilidad hacia ellos ya que solo replicaban lo que sus mayores les decían que estaba bien y en esos tiempos cuestionar las cosas era casi imposible y se tenía que seguir el molde preestablecido.

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