Democracia Participativa

DEMOCRACIA PARTICIPATIVA

En este ensayo pretende inspeccionar sobre la política como actividad humana, la cual debe ser enfatizada para su mejor compresión desde diferentes perspectivas entre las que destacan a la democracia (como forma de participación del ciudadano, como forma de gobierno, como definición y como ideología política). La democracia se presta a la dispersión, es decir, al hecho de que las personas hablan del termino democracia, cuando en realidad desconocen su significado (esto es porque a lo largo del tiempo ha ido cambiando su significado), lo cual se debe entre otras cosas a que la democracia es hoy en sentido amplio el nombre de una civilización, o mejor dicho, del producto político final hasta la actualidad de la civilización occidental. La democracia participativa se refiere a un conjunto de ideales que traen un estilo de vida determinado, conduciendo a un sistema político que va evolucionando a lo largo de nuestra civilización en las más diversas formas y sentidos pero siempre orientados hacia la participación indirecta de la ciudadanía en su totalidad a través de delegados y autoridades elegidas por el pueblo en sufragio universal “toda persona tiene derecho a voto” y hacia el bien común de la sociedad. Debido a la gran diversidad de pensamientos y corrientes ideológicas a través de la historia la democracia se traduce en distintos modelos, algunos con mayor participación ciudadana que otros, que tratan de cambiar la forma de ejercer el poder por parte de las autoridades elegidas de por distintos medios de participación. Democracia participativa es una expresión amplia, que se suele referir a formas de democracia en las que los ciudadanos tienen una mayor participación en la toma de decisiones políticas que las que les otorga tradicionalmente la democracia representativa.

Es una de las democracias más usadas en el mundo. La forma en que usamos la palabra democracia es la que produce mayor confusión, a menos que esta palabra sea claramente definida y su definición aceptada, el pueblo vivirá una inextricable confusión. Puede definirse con mayor precisión como un modelo político que facilita a los ciudadanos su capacidad de asociarse y organizarse de tal modo que puedan ejercer una influencia directa en las decisiones públicas. Se manifiesta usualmente por medio de referendos por los que los representantes consultan a la ciudadanía o por medio de iniciativas de consulta que los ciudadanos presentan a los representantes. La democracia participativa y estas otras formas no deben considerarse como excluyentes entre sí. Más bien, cada una de ellas apunta en una determinada dirección sobre cómo hacer avanzar la democracia representativa tradicional hacia sistemas con mayor grado de participación. En la práctica, un sistema concreto de democracia participativa puede basarse en ideas y métodos provenientes de distintas variantes. La política se entiende como la actividad humana que tiene como objetivo gobernar o dirigir la acción del estado en beneficio de la sociedad, es también un proceso orientado ideológicamente hacia la forma de decisiones para la consecución de los objetivos de un grupo. Una de las razones fundamentales para promover la democracia participativa consiste en que tal sistema ofrece al ciudadano una capacidad de participar en decisiones orientadas a desarrollar una economía socialmente justa y humanista. Esto promueve un ambiente de cooperación porque se aprecian directamente las consecuencias de tales decisiones para todos y cada uno de los miembros de la sociedad.

La democracia participativa autentica hace énfasis muy especial en dar voz a los individuos y a las comunidades, cuyas opciones, anhelos y aspiraciones rara vez hallan atención en los mecanismos tradicionales de la democracia representativa. Todos los métodos de democracia incluyen una forma de entender la sociedad y la libertad del hombre. Desde el punto de vista mecanicista la democracia parece como un gran mercado donde el

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