Derechos Humanos

I. NOTA INTRODUCTORIA.

1. MÉXICO, HOY.

Según el censo de población 2010. El Instituto Nacional de Estadística y Geografía. De acuerdo con el resultado el 44.2% la población mexicana era pobre multidimensional, es decir, el 47.2% millones de personas que tenían carencias en el marco de los siguientes rubros: educación, salud, seguridad social, calidad de la vivienda, servicios básicos en la vivienda y alimentación.

El Programa de las Naciones Unidas para el desarrollo (PNUD) señala un dato uniforme en todas las entidades federativas y municipios de México, “El desarrollo promedio de las mujeres no es igual al de los hombres”.

La pobreza es un factor de violación de los derechos humanos: quienes viven en condiciones de pobreza son más vulnerables y susceptibles a las violaciones de sus derechos humanos, la pobreza es también consecuencia de la violación de los derechos humanos; en efecto la negativa, la limitación o el menoscabo de derechos como el trabajo, el salario adecuado, la salud la educación o la vivienda implican que quienes experimentan estas restricciones se veas condenados a la pobreza.

Lo anterior revela que a pesar de los grandes avances en la protección de los derechos humanos, éstos son negados a un conjunto de personas que, en términos de Pogge “Son los pobres globales a nivel mundial el PNUD ha manifestado:

“Que el ingreso económico total de los 500 individuos más ricos del mundo, resultan superior al ingreso de 416 millones más pobres. Los 2,500 millones de personas que viven con menos de 2 dólares al día (representan el 40% de la población del orbe) obtiene solo el 5% del ingreso mundial; mientras que el 10% más rico, consigue el 54%. Y en este planeta interconectado en que vivimos, se evidencia que un futuro fundado en la pobreza masiva en medio de la abundancia es económicamente ineficaz, políticamente insostenible y moralmente indefendible”.

México padece un problema educativo complejo, las estadísticas no son alentadoras: quedan fuera de la escuela aproximadamente 1,400,000 niños; 6 millones de adultos son analfabetos, la mayoría de las mujeres indígenas no saben leer y escribir; y millares de discapacitados se encuentran excluidos de la educación escolar.

El 90% de la población de 6 a 14 años acude a la escuela, todavía existe una brecha entre entidades: en el Distrito Federal 96.4% de los niños asisten a la escuela, mientras en Chiapas sólo el 90.8%. El 6.9% de las personas de 15 años y más, no saben leer ni escribir.

Solo el 64% de la población (72 millones de personas) es derechohabiente de servicios de salud. En este rubro también existe la diferencia entre entidades federativas.

El desempleo incrementa o reproduce los altos niveles de desigualdad y pobreza prevaleciente en nuestro país, la desocupación en el 2010 fue del 55.5% de la Población económicamente activa.

Según el Consejo para prevenir la Discriminación los jóvenes sufren una severa afectación de su derecho en el trabajo y de sus derechos humanos laborales. “El poder económico suele concentrarse en manos de personas adultas, por lo que muchos bienes escasos son distribuidos por ellos, bajo criterios que excluyen a los jóvenes, la juventud se asocia con la inexperiencia, cuestión que se traduce en falta de oferta de empleo para menores de 30 años”.

Dos de cada diez jóvenes no estudian ni trabajan, dentro de este grupo de población, las mujeres enfrentan al menos, una doble discriminación: ser mujer y joven (hechos a los que puede agregarse: ser pobre, discapacitada, analfabeta, etc.) según encuestas el 24% de las mujeres entre 15 y 29 años no estudian ni trabajan.

Según la Organización Internacional del Trabajo: Trabajo “decente”, significa contar con trabajo productivo, que genere un ingreso digno, seguridad en el lugar de labor, protección social para la familia, mejores perspectivas de desarrollo personal e integración a la sociedad, libertad de opinión, organización y participación en las decisiones que afectan la vida, e igualdad de oportunidad y trato para las mujeres y los hombres.

México tiene muchos retos por cumplir, relacionados con la igualdad entre mujeres y hombres, el Instituto de las Mujeres han señalado que:

a) Las mujeres reciben salarios inferiores al de los hombres, en un mismo puesto de trabajo, para el que ambos tienen la misma calificación y el mismo horario.

b) Siete de cada diez funcionarios públicos son hombre y solo tres son mujeres;

c) Con el fin de responder a las exigencias domésticas, las mujeres interrumpen su actividad en las instituciones con mayor frecuencia que los hombres;

d) Nueve de cada diez personas dedicadas al trabajo del hogar son mujeres, el 90% de las empleadas del hogar no tienen acceso a servicios de salud y casi 80% carece de prestaciones laborales.

Reciente estudio de la UNAM, muestra que el acceso a la Justicia supone cierto nivel educativo y socioeconómico, quienes carecen de él, quedan excluidos. Haciéndose notar una vez más la desigualdad ya que el 73% de quienes acuden a los tribunales son hombres y el 27% mujeres. Además de que este campo está reservado a las personas con mayores ingresos, de lo cual se concluye que en México la Justicia no es pareja para todas las personas.

En este orden, el 98.5% de los delitos que se cometen en el país queda impune, aquí opera la corrupción y la insuficiencia prevalecientes. –Según Amnistía Internacional- México se ha convertido en un País peligroso para la defensa de los derechos humanos.

Reconocer que una reforma Constitucional no implica un cambio en la realidad, sin embargo la situación descrita pone de manifiesto la urgencia de llevar adelante reformas normativas que ofrezcan mayor protección a quienes se hallan sujetos a la jurisdicción del Estado Mexicano, a condición de que las normas sean efectivamente aplicadas, en forma sistemática, rigurosa y comprobable.

2. PANORAMA DEL PROCESO DE REFORMA CONSTITUCIONAL EN MATERIA DE DERECHOS HUMANOS.

El 23 de abril del 2009 La Cámara de Diputados aprobó el dictamen con el Proyecto de Decreto que modifica la denominación del Capítulo 1 del Título Primero y reforma diversos artículos de la Constitución Política. Fue aprobado por 287 votos en pro y 1 en contra, sin abstenciones, en adelante (DD-IV-2009. La Cámara de Diputados turno la Minuta a la Cámara de Senadores.

El 8 de abril del 2010 la Cámara de Senadores se pronunció sobre esa Minuta, fue presentado el dictamen respectivo (DS-IV-2010) el cual fue aprobado en lo general por unanimidad de 97 votos, en virtud de que el Senado introdujo cambios en la Minuta recibida, el Proyecto regreso a la Cámara de Diputados.

El

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