Desigualdad De La Mujer En La Organizacion

FACULTAD DE CIENCIAS ADMINISTRATIVAS

INGENIERIA EMPRESARIAL

ADMINISTRACION DE EMPRESAS II

Nombre: Kathy Cabrera

Fecha: 2010-06-24

Profesor: Ing. Efraín Naranjo Borja, MBA

LA DESIGUALDAD DE LA MUJER EN LA ORGANIZACION

RESUMEN:

En este documento vamos a analizar el rol de la mujer en la organización, frente a qué estereotipos se encuentra y como es afectada por las medidas de desigualdad que sufre por parte de sus jefes, compañeros de trabajo ya que lastimosamente nuestro país tiene una cultura machista que no le permite ver el sacrificio que hace la mujer por salir adelante en este mundo de hombres en el cual no se tiene las mismas oportunidades, en donde además incluso muchas veces realizan una mayor cantidad de trabajo sin que sean remuneradas adecuadamente u obtengan el reconocimiento por parte de sus superiores, además vemos que la mujer a parte de realizar una buena labor en la organización cuida de su familia, de su casa, muchas veces las señoras terminan la jornada en la empresa pero van a la casa a realizar el labor doméstico, estos pequeños detalles son los que se deben analizar antes de inferiorizar a la mujer o subordinarla ya que todos somos iguales y tenemos los mismos derechos.

Podemos ver que en la organización siempre se ha dado un trato desigual a la mujer, de inferioridad ya que en muchos de los casos se ha dado una explotación laboral, se le hace trabajar más que a cualquier hombre y gana menos por el sistema jerárquico de integración social de la organización, por eso vemos que las mujeres con mucha dificultad logran alcanzar puestos altos como el de dirección, o logran ascender por más que realizan un buen trabajo ya que sufren esta discriminación, ya que se tiene la idea errada de que la mujer no es apta para realizar el trabajo o que va a ser menos productiva que el hombre, es decir se crea estereotipos donde piensan que la mujer es menos capacitada para lograr realizar un trabajo de excelencia, eficaz y eficiente, cuando como personas debemos estar consientes que la condición física no mide el rendimiento laboral, por que las mujeres podemos realizar el mismo trabajo que los hombres.

PALABRAS CLAVES:

Desigualdad, mujer, trabajo, organización

INTRODUCCION:

Desde los tiempos remotos podemos ver que la sociedad ha discriminado a la mujer negándole los mismos derechos que tenían los hombres como por ejemplo la educación, solo los hombres tenían derecho a estudiar ya que las mujeres iban a pasar toda la vida encerradas en la casa realizando la labor doméstica y criando a sus hijos, esta desigualdad viene ya que estamos en una sociedad machista que no acepta que una mujer puede llegar más lejos que los hombres claro que con sacrificio y esfuerzo.

Se da una condición de desigualdad en la empresa ya que por nuestra sociedad machista no se puede ver que hay en la mujer que no dependa de la relación con el hombre, por lo general pensamos que las mujeres no son capaces de mantenerse solas, o de alcanzar las metas y objetivos planteados sin ayuda de un hombre, por eso se nos considera seres inferiores, incapaces de realizar el mismo trabajo de los hombres, y la mujer sufre diversas maneras de discriminación por parte de varias personas dentro de la organización no solo de los jefes, que es una situación muy deplorable.

La desigualdad, se da por una integración subordinada, con un sistema jerárquico de integración social, y su presencia es indispensable (Santos, 2005, Pág. 195) por esta jerarquización se subordina a los grupos considerados los más débiles o los más ineficientes es ahí donde se incorpora el grupo social femenino ya que por varias ideas machistas se considera menos productivas a las mujeres, por lo que hasta el día de hoy vemos como la remuneración hacia las mujeres es menor que la de los hombres, lo más increíble es que esta desigualdad laboral que sufre la mujer parte de la igualdad de contratos, ya que no se realizan 2 contratos diferentes sino es el mismo contrato que la empresa otorga al trabajador en general.

La gestión controlada de la exclusión incluye diferentes formas de sustitución de la segregación por reintegración o reinserción social a través de programas como el de la extensión de la ciudadanía en el caso de las mujeres con acceso al mercado de trabajo (Santos, 2005, Pág. 206) , pero se dejo ingresar a las mujeres en los campos laborales bajo la condición de subordinación.

Tal vez sigamos viendo estas injusticias sociales porque se aplica una teoría clásica de la administración y en esta solo importa la eficacia y eficiencia de los trabajadores, que se logra poniendo a la persona correcta en el puesto correcto (Murillo, 2007, Pág. 4), es decir tiene en mente solo la racionalidad instrumental solo les interesa tener más utilidades, viendo a todos los empleados como máquinas desechables que se pueden reemplazar, sin dar prioridad a los sentimientos, a la seguridad, ni al bienestar de los empleados, menos de la mujer ya que es considerada menos productiva.

Además se puede ver que la mayoría de las empresas buscan la mayor eficiencia por parte de los empleados ya que mientras más comprometidos estén con la organización se va a poder reducir la incertidumbre limitada por el conocimiento humano, pero incluso aquí las mujeres sufrimos discriminación ya que los jefes o los dueños de la empresa quitan credibilidad de poder dirigir bien las áreas de la empresa o elaborar grandes planes o estrategias alegando que no tiene la misma preparación o que muchas veces los obstáculos son las responsabilidades que tiene la mujer en el hogar y en la familia.

La mujer tiene la misma capacidad de adaptarse, lograr sus metas, permitir el mantenimiento de valores y patrones de interacción, somos igual de capaces y eficientes, nuestra condición no afecta en nada al buen trabajo que se puede realizar, lo importante aquí son las ganas de superación diarias ya que además de demostrarnos a nosotros que sí podemos realizar de la mejor manera, con eficacia y eficiencia un trabajo se tiene que demostrar a las personas machistas de nuestro país.

Pero dejando a un lado la cultura machista que tenemos en nuestro país se puede tratar de construir una sociedad más justa donde primen la igualdad, la libertad y la solidaridad en todos los aspectos sociales y políticos, ese es el sueño de muchas personas consientes tratar de construir una sociedad donde no haya desigualdad, peor aún exclusión, ni el individualismo, sino tratar de construir algo mediante trabajo en equipo, donde se vea más las necesidades sociales y se deje de dar la prioridad a aumentar los beneficios o alcanzar los intereses individuales, tratar de

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