ECONOMÍA GLOBAL Y GEOPOLÍTICA EL FUTURO DE LAS GRANDES CIUDADES

ECONOMÍA GLOBAL Y GEOPOLÍTICA

ECONOMÍA GLOBAL Y GEOPOLÍTICA

EL FUTURO DE LAS GRANDES CIUDADES

ÍNDICE

1 - INTRODUCCIÓN        3

2- EL TRABAJO EN LAS GRANDES CIUDADES         3

3- LOS RECURSOS NATURALES EN LAS GRANDES CIUDADES         5

4- INTEGRACIÓN DE LAS NUEVAS TECNOLOGÍAS         6

5- EJEMPLOS DE GRANDES CIUDADES MODERNAS         7

6- CONCLUSIONES        8

6- FUENTES        10

1. INTRODUCCIÓN

El COVID-19 ha marcado un punto de inflexión en la concepción de las grandes ciudades. Observamos que la mayoría de expertos coinciden en que la pandemia ha acelerado algunos cambios esperados más a largo plazo. Arquitectos como Carlo Ratti están convencidos que tendencias recientes como la micromovilidad (patinetes, bicis eléctricas) se intensificarán en los próximos años^[1]. Asimismo los procesos de transformación urbana hacia ciudades más verdes, inclusivas circulares e inteligentes se están acelerando en los últimos meses^[2].

Ahora bien, la pandemia no sólo ha intensificado algunas transformaciones previstas en las grandes urbes, sino que también ha traído cambios inesperados, el crecimiento del teletrabajo en detrimento de las grandes oficinas.

También existen voces contrarias a las actuales proyecciones provocadas por el COVID-19. El propio Carlo Ratti argumenta que el fenómeno de las compras online impulsadas por los confinamientos (ya hemos visto empresas como Inditex anunciando cierre de tiendas físicas por esa tendencia) no afectará en demasía a las grandes ciudades y cree que la gente aún se desplazará para ir a comprar.

Por lo tanto, estamos viviendo algunos cambios de manera más rápida en parte por las consecuencias de la pandemia. Sin embargo existen algunos aspectos del futuro de las grandes ciudades que todavía están en el aire. En este entregable analizaremos las principales cuestiones en torno al presente y al futuro más cercano de las grandes urbes.

1. EL TRABAJO EN LAS GRANDES CIUDADES

 La pandemia ha modificado en un período de tiempo muy reducido el concepto de “trabajo de oficina” que teníamos en occidente desde los años 80. Ahora el teletrabajo ha venido para quedarse y aunque sus consecuencias para la geografía humana de las grandes urbes son todavía desconocidas podemos dislumbrar posibles tendencias.

A nivel nacional siguiendo un análisis de septiembre de 2020 realizado por Caixa Bank Research se observa que el 39% de los trabajadores que residen en grandes ciudades podrían teletrabajar, frente al 30% de las zonas urbanas intermedias y el 23% de las zonas rurales ^[3]. Si tenemos en cuenta además que según los datos aportados por el INE, la cifra de ocupados en España que realizan teletrabajo ha aumentado de un 5,2% en 2006 a un 8,3% en 2019^[4] nos encontramos con una situación en la que sería razonable pensar que poco a poco la economía de aglomeración de las grandes ciudades se vaya reduciendo.

Esta tendencia del teletrabajo ha aumentado como nunca con el inicio de la pandemia y sobre todo con las medidas de confinamiento de los estados. En la Tabla 1 observamos el crecimiento de establecimientos en España que utilizan el teletrabajo que desde el inicio del estado de alarma.

[pic 1]

Tabla 1. Porcentaje de establecimientos que utilizan el teletrabajo. Sectores de actividad. Fuente: www.ine.es 

Un factor clave en formación las economías de aglomeración de las grandes ciudades son también los viajes nacionales e internacionales. Siguiendo el mismo estudio de Caixa Bank Research (basado en los datos de geolocalización del INE), se confirma en el momento del estudio que se han reducido las entradas a las principales ciudades españolas. Las diez ciudades con más habitantes del país han recibido 40.000  visitantes menos, con Madrid (100.000 visitantes) y Barcelona (70.000 visitantes) a la cabeza. Aunque el estudio no se centra exclusivamente a entradas de trabajadores, sí que nos ayuda a dislumbrar lo que suponen estos desplazamientos en las grandes ciudades.

Llegamos a dos conclusiones teniendo en cuenta estos datos:

• Es muy posible que este continuo reducido número de personas que vaya a trabajar a grandes núcleos laborales acabe impactando de forma negativa en el entorno de negocios que existe alrededor (pequeño comercio, restauración, etc…).
• La cercancía al puesto de trabajo ya no será tan importante a la hora de escoger dónde vivir.

En definitiva, en la historia reciente han tenido lugar diversas pandemias en las grandes urbes, pero nunca ninguna de ellas ha conseguido  modificar el concepto el modelo de economía de aglomeración de las mismas. Con el COVID-19 y gracias sobre todo a la tecnología actual podríamos estar viviendo por primera vez en la historia un cambio de modelo de trabajo en las grandes urbes, donde la dispersión de la mano de obra cualificada (trabajadores dedicados especialmente a actividades dinámicas) sea la próxima tendencia aumentando así la deslocalización laboral con respecto al centro de trabajo.

1. LOS RECURSOS NATURALES EN LAS GRANDES CIUDADES

Aunque estemos asistiendo a una desviación de las economías de aglomeración de las grandes ciudades derivada de las posibilidades que ofrece el teletrabajo por las nuevas tecnologías, la mayoría de expertos coincide en que el futuro demográfico del planeta reside en el diseño de las  megaurbes que seguirán acogiendo  millones de personas ^[5]. Las consecuencias del COVID-19 ha puesto de manifiesto que el mantenimiento de la biodiversidad y los servicios ambientales de nuestras grandes ciudades es imperativo para proteger la salud de los seres humanos. En este apartado nos centraremos concretamente en el futuro tratamiento del agua y de las energías renovables.

...