EL FRAUDE
Enviado por thefonix • 3 de Octubre de 2013 • 3.224 Palabras (13 Páginas) • 282 Visitas
¿Las acciones fraudulentas es motivada por la carencia de los valores éticos y morales?
Enron Corporation
En los tiempos actuales, donde el libre mercado es la directriz en las actividades económicas el mundo financiero no se sustrae del mismo, conllevando a que las empresas apliquen instrumentos financieros y políticas de gestión a fin de maximizar sus utilidades, objetivo este que se hace más imperativo para aquellas que cotizan en los mercados bursátiles. En este contexto, es indudable que si bien el mercado puede autorregularse, de acuerdo a experiencias en economías liberales, se hace necesaria la participación del estado, a fin de garantizar que la información proporciona por las empresas muestre en forma objetiva su situación financiera. Así tenemos que dentro de la tendencia de desconcentrar las funciones del Estado, este deriva en terceros determinadas funciones, tales como la supervisión de la información financiera, ejercida por las sociedades de auditoría en nuestro país. Lo expuesto es el marco referencial en el cual se desarrollará en esta ocasión, los casos ENRON CORP y WORLDCOM, exponiendo en primer lugar la naturaleza de sus operaciones, las causas expuestas hasta la fecha producto de las investigaciones judiciales iniciadas, exponer casos de acuerdo a la normatividad aplicable en nuestro país y finalmente determinar las relevantes consecuencias en el campo de la Auditoria.
ENRON era una empresa energética que se encontraba entre las primeras siete compañías de Estados Unidos, fue creada en 1985 por la fusión de las compañías explotadoras de gas natural Houston Natural Gas e Internorth. En un periodo de 15 años se convirtió en un gigante mundial del mercado energético con más de 21 mil trabajadores en 40 países, alcanzando ingresos por US$ 100,000 millones en el 2000. Obtuvo reconocimientos, entre los cuales tenemos como la empresa más innovadora, según la revista Fortune, con la creación de mercados emergentes de gas en Alemania y Gran Bretaña, llegaba a diseñar políticas energéticas del gobierno de Estados Unidos.
En Octubre de 2001 los informes trimestrales de la compañía revelaron deudas por US$ 618 millones, fraude en la contabilidad y evasión tributaria. Un mes antes los gerentes de Enron habían vendido los títulos de la empresa en US$ 1,000 millones y obligaron a sus empleados a depositar sus fondos de pensiones en títulos de la compañía, sin posibilidades de venderlos.
De acuerdo a la información obtenida hasta la fecha, el problema se localizó en la forma como se incorporaron las cuentas de las sociedades filiales a los estados financieros de ENRON. La estrategia era desplazar deudas y pérdidas fuera de las cuentas de la matriz para así poder mantener una imagen de salud financiera, con los consiguientes beneficios para obtener préstamos y no desalentar a los inversionistas. Por ejemplo se interrelacionó a filiales de las cuales ENRON era dueña, en circunstancias que los resultados de éstas eran considerables que los resultados de éstas eran considerables pérdidas de tal forma que sus deudas no fueron considerables pérdidas de tal forma que sus deudas no fueron consolidadas; así mismo alguna transacciones en el interior del grupo tales como revender por cuatro millos y medio de dólares los títulos de una sub filial que se había comprado meses antes por veinticinco mil dólares y que se puso de manifiesto que no tenían ningún valor.
Adicionalmente se sabe que se omitieron el registro de resultados (pérdidas) de instrumentos o productos derivados. La aplicación de opciones de compra de acciones, degeneró en una práctica nociva pues las opciones de compra de acciones promueven un clima corrosivo que tienta a los ejecutivos y no solo a los de Enron a formular los informes de los resultados a la medida.
Las opciones de compra de acciones se multiplicaron a fines de los años 80 y en los 90. La teoría era simple. Si se convertía a los más altos ejecutivos y administrativos en propietarios de la empresa, estos actuaran defendiendo los interese de los accionistas. Los paquetes de remuneraciones de los ejecutivos se dirigieron cada vez más hacia las opciones de acciones. En el 2000, el típico funcionario ejecutivo jefe de una de las 350 compañías principales de país ganaba alrededor de 5,2 millones de dólares de acciones. Alrededor de la mitad de esas compañías también tenía programas de opción de compra de acciones para por lo menos, la mirada de sus empleados.
A medida que un mayor número de ejecutivos tuvo más intereses en las opciones, la tarea de mantener el alza en el precio de las acciones se separó de la de mejorar el negocio y la rentabilidad. Este es el fenómeno que parece haberse producido en Enron.
Para influir sobre el precio de las acciones, los ejecutivos pueden emitir proyecciones de beneficios optimistas. Pueden retrasar ciertos gastos, como por ejemplo de investigaciones y de desarrollo (lo que temporalmente ayuda a los beneficios). Pueden emitir opciones de recompra (lo que eleva los beneficios por acción, porque menos acciones quedan pendientes). Y por supuesto, puedan explotar las reglas contables.
Un aspecto a considerar como influyente es el relacionado a la falta de independencia de la sociedad auditora Andersen, por cuanto la misma a su vez brindaba servicios de consultoría, asesoría, outsorcing (Enron había mercerizado el servicio de auditoría interna) lo cual fue determinante para que la sociedad auditora no informara de la “ingeniería contable” (término acuñado por las grandes transnacionales) que estaba aplicando ENRON y no fueran expuestos en los estados financieros dictaminados.
A la luz de los hechos, se puede concluir que la tercerización del servicio de auditoría interna va en contra de los mejores intereses de cualquier organización. Andersen, actuando cono auditor externo para Enron, tercerizó la función de auditoría interna brindando una abultada facturación de servicios de consultoría. Sus honorarios se midieron en decenas de millones de dólares, lo que de alguna forma nos llevaría a afirmar que una sociedad de auditoría que está involucrada financieramente a semejante nivel con único cliente, ha perdido su independencia.
Por lo general los auditores internos llegan a obtener un profundo conocimiento técnico de los negocios de la empresa adquirido a través de años de interacción diaria con la gerencia y el personal. Los auditores mercerizados a menudo no alcanzan el mismo nivel de conocimiento del negocio y de la gente que realiza las transacciones en forma diaria.
Los Auditores Internos son empleados de la compañía y reportan, según la estructura interna de cada empresa.
...