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EL PAPEL DE LA ESCUELA EN EL DESARROLLO DEL ADOLESCENTE.


Enviado por   •  12 de Mayo de 2016  •  Informe  •  3.247 Palabras (13 Páginas)  •  326 Visitas

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EL PAPEL DE LA ESCUELA EN EL DESARROLLO DEL ADOLESCENTE

adolescentes, transición, distintos, comportamientos, potencialidades, carácter, escuela, contextos, educativas, implicación, vida adulta, determinante, etapa, alumnos, psicológica.

El desarrollo- psicológico de las personas, que afectan a los distintos ámbitos del comportamiento de las mismas y que marcan de manera decisiva su incorporación a la vida y al mundo de los adultos.Tampoco parece difícil que esté de acuerdo en que la escuela constituye uno de los escenarios en que los adolescentes de nuestra sociedad ocupan buena parte de su tiempo, sea directamente estando en ella-, sea indirectamente a través de la realización de tareas más o menos relacionadas con la actividad escolar. La escuela suele ocuparse de apoyar el desarrollo global de los adolescentes o, por el contrario, ello queda fuera de su responsabilidad y debe ser abordado desde otras instancias, las familias, la comunidad, etc. Toda probabilidad, la posición ante estas preguntas suscitara discrepancia, cuando no polémica, entre distintas opiniones y perspectivas. Asumiendo de entrada el carácter complejo de este tipo de preguntas, y la imposibilidad de responderlas de manera tajante y dogmática. El desarrollo psicológico de las personas en general y el desarrollo psicológico de los adolescentes en particular. La adolescencia puede caracterizarse, en su conjunto, como una etapa de transición hacia las formas de comportamiento personal y social propias de la vida adulta, en la cual aparece implicado el dominio de una amplia gama de nuevas potencialidades comportamentales de interpretación-de la realidad personal, física y social, así como de actuación sobre esa realidad.culturalmente mediada, tanto desde el punto de vista interpersonal como desde el punto de vista contextual, dicho en otros términos, las relaciones e interacciones entre el adolescente y las personas que le rodean, así como las características de los distintos contextos en que participa, influyen de manera fundamental en la actualización de las nuevas potencialidades de comportamiento que ofrece la etapa, y en la manera en que se concrete la transacción adolescente hacia la vida adulta. Desde esta perspectiva, la escuela como uno de los contextos en que los adolescentes participan de manera habitual, y por sus especiales características, puede jugar un papel relevante en esa actualización de capacidades y, en general, en el conjunto de la transición adolescente.

 

 

El análisis de los objetivos enerales que presiden la nueva etapa de la educación secundaria obligatoria confirma ese papel, al mostrar la diversidad e importancia de las capacidades implicadas en la transición adolescente cuyo desarrollo se vincula, en mayor o menor medida, al aprendizaje escolar, que no es otra que la afirmación de la importancia de dicha etapa como espacio educativo en que debe concretarse para los diversos alumnos el apoyo de la escuela a la transición adolescente en sus distintos ámbitos. Entendemos que la posibilidad de llevar a cabo efectivamente ese apoyo desde la institución escolar plantea retos importantes a la propia escuela, retos que demandan, a su vez, ciertos cambios y prioridades de acción en la practica habitual para poder afrontarse con éxito. Desde los inicios de la segunda década de vida, los niños experimentan un amplio conjunto de cambios corporales que los transforman, desde el punto de vista biológico. La transición adolescente es, por tanto, en este sentido, una transición global, que afecta al con&unto de la vida psicológica y social de quienes la atraviesan.determinados-momentos y ámbitos de comportamiento- que a menudo se *ace,consiente o inconscientemente, de esta etapa.)e forma similar, la consideración de la adolescencia como periodo de transición necesaria *acia formas más potentes y autónomas de comportamiento -de transición 6normativa6, por decirlo en los términos de algunos autores-, resit0a y resignifica el carácter supuestamente conflictivo, de 6tormenta y drama6, que muy a menudo se considera como el rasgo más definitorio o característico de los adolescentes.al adolescente es el *ec*o de estar tratando de elaborar su-proyecto de vida y su identidad como individuo adulto.l grado en el que ese proceso resulte más o memos conflictivo dependerá, muy probablemente, tanto de las condiciones y recursos personales con que cada adolescente afronta la transición como del apoyo que reciba para realiarla.Caracterizar la adolescencia como periodo evolutivo que estamos presentando la importancia del apoyo interpersonal y contextual en la actualiación de las nuevas potencialidades de comportamiento que se abren en la adolescencia y en la manera en que se concrete la

 

transición adolescente *acia la vida adulta.$ontrariamente, de nuevo, a lo que en ocasiones postula un cierto sentido com0n, y también a lo que en ocasiones *an postulado determinadas teorías o modelos psicológicos, los procesos de cambio en la adolescencia no presentan un carácter siempre idéntico ni se manifiestan siempre en los mismos comportamientos, sino que muestran notables diferencias entre unos adolescentes y otros -sin que ello quiera decir, obviamente, que no existan puntos de contacto y elementos comunes entre ellos, derivados del carácter mismo de la tarea evolutiva que supone la adolescencia tal y como la *emos caracteriado-.el grado en que esas formas y esos contextos apoyen la resolución de las tareas evolutivas que la transición adolescente plantea. %sí, y por poner un e&emplo, la revisión de la propia identidad típica de la adolescencia no se realiará de la misma manera desde una auto imagen previa relativamente a&ustada y positiva, asociada a una raonable seguridad y confiana en las propias posibilidades, que desde una auto imagen negativa, con un fuerte sentimiento de indefinición ante las nuevas demandas del entorno y una muy ba&a expectativa de competencia ante los problemas y situaciones cotidianas.)el mismo modo, y por poner otro e&emplo, la redefinición de las relaciones emocionales con los padres y del propio lugar en la estructura familiar tampoco se *ará igual cuando las experiencias anteriores *an permitido aprender a actuar con relativa independencia, autonomía e iniciativa, que cuando ese aprendia&e no se *a llevado a cabo más que en un mínimo grado.)e a*í el carácter de construcción, y de construcción personal, que tiene, desde nuestro punto de vista, la transición adolescente.$onstrucción, porque las nuevas tareas evolutivas que el adolescente debe afrontar se abordan desde una *istoria previa y un con&unto de recursos ya existentes que delimitan comóse experimentan esas nuevas tareas, como tratan de resolverse, comó se reacciona al me&or o peor resultado de esos intentos de solución y comó, en definitiva, se sale del reto planteado por esas tareas.4 construcción personal, porque esa *istoria previa y esos recursos no son nunca idénticos entre unos adolescentes y otros, y porque el proceso de transformación de las capacidades previas así realiado va a presentar un carácter 0nico en cada caso, que es importante no perder de vista si no se quiere caer en una aproximación típica y meramente externa a la forma en cada adolescente va llevando a cabo su particular transición.)os de los e&emplos me&or establecidos por la investigación de la importancia de la mediación social en la transición adolescente los encontramos en ámbitos tan distintos como el desarrollo de las capacidades intelectuales asociadas al pensamiento formal, por un lado, y en las capacidades de carácter social y afectivo-emocional implicadas en la redefinición de lasrelaciones entre el adolescente y su n0cleo familiar de origen, por otro.$omo ya *emos insinuado en las 0ltimas frases del apartado anterior, la consideración de la adolescencia como construcción socialmente mediada que *emos propuesto, lleva apare&ada la -idea de que las prácticas educativas -en que participan los adolescentes, dentro y fuera de la escuela, &uegan un papel esencial en el desarrollo de estos, e inciden de manera decisiva en la actualiación de las potencialidades que se abren a lo largo de la transición adolescente."bviamente, la escuela puede aprovec*ar y potenciar en mayor o menor medida su acción educadora en estos diferentes ámbitos, pero incluso cuando no la asume conscientemente como propia o no *ace explicita su actuación al respecto esta incidiendo en todos ellos.

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