ENSAYO SOBRE EL TREN MAYA

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FUNDAMENTOS DE POLÍTICA ECONÓMICA.

TRABAJO FINAL.

ENSAYO SOBRE EL TREN MAYA.

PROFESORA:SUSANA GARCÍA JIMÉNEZ.

ALUMNA. FLORES MARTINEZ

MATRICULA: 2183017194

TRIMESTRE: 19-I

Todos si no es que la gran mayoría del pueblo mexicano, fuimos testigos de lo que aconteció el 16 de diciembre del año pasado, que nunca se había visto situación igual. El presidente electo Andrés Manuel López Obrador, en medio de una ceremonia, donde acompañado por representantes indígenas , funcionarios, gobernadores y empresarios, pidió “permiso de la madre tierra” para comenzar lo que había anunciado su proyecto mas ambicioso, el llamado Tren Maya.

Mi propósito en el presente ensayo, es hablar sobre algunos desafíos que afrontara este megaproyecto, así como de los posibles beneficios, a partir de la información actualmente disponible.

Primero, hablare un poco sobre el antecedente de este proyecto, después sobre la propuesta del gobierno con respecto a este proyecto, expondré algunas de las preocupaciones y diversas opiniones, tanto de los habitantes como de los expertos en cada tema.

El servicio Ferroviario Transístmico, el tren del siglo XIX, que conectaría los puertos de Salina Cruz, en el Istmo de Tehuantepec y el de Coatzacoalcos, en Veracruz y que fue inaugurado por el entonces presidente de la República, Porfirio Díaz. Pudo llevar a cabo su cometido en enero de 1907, ya que en ese momento se dio la oportunidad de trasportar por vías férreas (321km), las mercancías provenientes del océano Atlántico y que continuara su camino por el océano Pacífico.

el gobierno mexicano decidió elaborar el proyecto, con la condición de permitir su injerencia; para poder llevar a cabo este proyecto, pasaron casi 50 años, en los que EE.UU insistieron en echar a andar el proyecto de un corredor transoceánico, en la zona. Siendo la mejor opción, aun sobre un canal en Nicaragua o en Panamá, por la cercanía del territorio norteamericano y la corta distancia entre los puertos.

La obra se hizo posible con la inversión de la compañía inglesa Pearson and Son, así ambos puertos permitieron la llegada de barcos de gran calado e inicio lo que se esperaba fuera una época dorada. Pero no fue así, la decadencia del proyecto comenzó tras la inauguración del Canal de Panamá en 1914, controlado totalmente por el gobierno estadounidense, así que todos los buques con destino a puertos norteamericanos eran enviados al canal panameño.

El propósito del nuevo gobierno es retomar, reactivar y renovar el proyecto ferroviario, convirtiéndolo en un nuevo servicio de transporte, que interconecta las principales ciudades y zonas turísticas de la península de Yucatán, con miras a convertir la zona en un corredor interoceánico. Todo esto bajo un modelo neoliberal, que es contradictorio a lo que ha pregonado el presidente Andrés Manuel López Obrador en la 4T.

La propuesta de este proyecto dice estar basada en un modelo sostenible, que impulsa el crecimiento económico de la región, sin afectar el ambiente; que por el contrario, procurara medidas de mitigación, compensación y protección al entorno (creación de corredores ecológicos en el margen de la reserva de la biosfera de Calakmul), para reducir los estragos que produce la invasión humana y de las actividades de la precariedad económica (tala ilegal o trafico de especies), promete además adecuar las estaciones a las necesidades y características de cada zona, que promoverá y resguardara  las culturas indígenas, manteniendo siempre la identidad de la región.

Este megaproyecto turístico, de comunicación y trasporte, conectara los estados de Chiapas, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo, se implementara el uso de una locomotora de biodiesel, hibrida, acorde a la norma ambiental de California, tendrá 15 estaciones y viajara a 160 kilómetros por hora; contara con  una extensión de mil 525 kilómetros (426 km serán del tramo de selva, 446 km del tramo caribe y 653 km del tramo golfo), de los cuales 554 ya existen (utilizara los derechos de estas), y su construcción esta prevista para que termine en 2022. Se construirá bajo un esquema de inversión mixta, donde aproximadamente el 10 por ciento quedara a cargo del gobierno y el 90 por ciento de las empresas privadas que resulten adjudicadas de esos contratos.

En un principio, según datos de Fonatur, arrancará con 6 mil millones de pesos públicos, ya contemplados en el presupuesto, aunque es de suponerse necesitará fondos privados, se calcula que la inversión final (Plan Maestro y los estudios de costo-beneficio) rondara los 200 mil millones de pesos. Podemos ver que cada día hay mas interés para participar en el financiamiento del Tren Maya, pues bancos como Santander, Bancomer y bancas de inversión como Goldman Sachs ya están buscando como participar. Los interesados han ofrecido al gobierno contratos de servicios por 30 años, con un pago de contraprestación del 10 porciento de la inversión total, además de intereses y costos de mantenimiento.

A este respecto, al parecer el gobierno chino esta interesado en invertir en este proyecto ferroviario, pues China ha desarrollado tecnología para trenes de alta velocidad, además de tener experiencia en la construcción y un  punto muy importante es que cuenta con los recursos económicos, por otro lado lodo, algunas empresas italianas (aproximadamente cuentan con 1600 empresas instaladas en México) y la compañía alemana TÜV Rheinland Rail México, también manifestaron su interés sobre este proyecto, esta ultima interesada en participar en la certificación de los procesos de seguridad en la construcción del Tren Maya. De igual forma, las empresas FCC, Acciona, Sacyr y Aldesa (constructoras españolas), que participarían en la construcción  de el Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México, buscan ser parte de la megaobra.

Hasta aquí he presentado lo que pretende este proyecto. México actualmente ocupa el sexto lugar en el ranking mundial de turismo, en resumen, este tren aprovechara el potencial turístico de esta zona, pues las zonas arqueológicas de la región maya, son algunos de los destinos mas importantes, que reciben al año 6.8 millones de turistas. Para generar una derrama económica en los estados involucrados, el recorrido (15 estaciones a lo largo de un paraíso), pretende alargar la estancia en la visita de la región, lo cual quiere decir que habrá un mayor gasto turístico y captación de ingresos en las comunidades, así como un crecimiento en la infraestructura de estas comunidades.

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