“ESTA GUERRA NO ES DE ELLOS”

“ESTA GUERRA NO ES DE ELLOS”

Es imposible no conmoverse y tener una sensación de tristeza al visualizar los rostros de personas dolidas y afectadas por una guerra de más de 50 años, y aún más conmovedor es ver los rostros de niños, pequeños que con su corta edad se asume que no han vivido muchas cosas, pero en realidad  han tenido grandes experiencias y han tenido que afrontar situaciones en las que no tienen mucho o nada que ver pero que les han afectado sobre manera, los niños, la población ajena al conflicto.

Con su corta edad es difícil creer que han tenido que afrontar homicidas, masacres, violaciones y todo tipo de consecuencias que deja una guerra en la cual ellos tuvieron que ser partícipes pero sin culpa alguna o sin que tuvieran alguna otra opción, generando traumas y marcas imborrables en ellos y sus familias.

Realmente es desgarrador el hecho de imaginarse la cantidad de huellas que ha dejado el conflicto después de 50 años, genera una sensación de decepción y cansancio debido a todas las situaciones que ha creado, es duro el hecho de pensar en niños que contra su voluntad se ven integrados a los grupos armados y los reclutan sin tener en cuenta que metas o sueños estos puedan tener, les quitan la oportunidad de estudiar o vivir su niñez con plena libertad, una infancia que solo vivirán una vez en la vida

La felicidad de compartir en familia en muchas situaciones no pudo ser una felicidad completa, muchos niños tuvieron que crecer sin el afecto y la compañía de uno de sus padres o en otros casos sin ninguno de los dos debido a la guerra.

No comparto la idea de que el conflicto haya perdido su objetividad y haya llegado al punto de generar violaciones, ataques a las escuelas y los reclutamientos a menores, esto solo tuvo como resultado acabar con muchos sueños y metas de personas que solo estaban empezando a vivir y que a la fuerza tuvieron que abandonar sus tierras, crecer con una mentalidad un poco mas madura y ser separados de su familia sin tener otra opción

Por ultimo me queda un sin sabor y una sensación de impotencia al saber que ya no se puede hacer nada y que en el momento no hubo mucho que hacer. Considero que las secuelas que ha dejado el conflicto quedaran marcadas en los niños toda la vida y que no es justo que muchos de ellos hayan tenido que vivir en carne propia la guerra viendo matar gente, quedar huérfanos, sin estudio y no poder llevar una vida tranquila, una vida que ellos no escogieron.

“Las heridas no quedan solo en los cuerpos, también en los lugares y en el corazón”

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“LA GUERRA SIN LIMITES” – BOJAYA

2002

JESÚS ABAD COLORADO

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“ASÍ VIVI LA GUERRA EN COLOMBIA”

2016

JESUS ABAD COLORADO

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“ASI VIVI LA GUERRA EN COLOMBIA” MEDELLÍN

2003

JESÚS ABAD COLORADO

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“ASI VIVI LA GUERRA EN COLOMBIA” – SAN CARLOS

1998

JESUS ABAD COLORADO

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