Educación Sexual Integral: herramienta para una adolescencia plena

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Educación Sexual Integral: herramienta para una adolescencia plena.

HIPOTESIS: “La concepción sobre la sexualidad en nuestros tiempos está atravesada por cuestionamientos de distinta índole y sesgada por prejuicios y mitos diversos, en este sentido la ESI, es una herramienta que se emplea como fuerte paliativo y al mismo tiempo formador y transformador de las concepciones imperantes”

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

En este trabajo me propongo abordar, interpelar, y problematizar la Educación Sexual Integral y como el Docente desde su rol éticamente formador debe garantizar junto con el Estado ese derecho del niño-adolescente de recibir ESI.

¿A qué llamamos ESI? La ESI es una obligación del Estado Nacional y de los Estados Provinciales tal como lo establece la Ley 26.150 (se aprobó en el año 2006) esto llevo a que se tornara en un proceso integral de cambios sociales y culturales reflejados en leyes, normas y compromisos internacionales que Argentina posee y promueve en el campo de los DDHH. Por lo tanto, la ESI es un derecho de los chicos y de las chicas de todas las escuelas del país, privadas o estatales, confesionales o laicas, de nivel inicial, primario, secundario. El Programa Nacional de Educación persigue como propósitos, estrategias y acciones prioritarias las siguientes:

• Incorporar la educación sexual integral dentro de las propuestas educativas orientadas a la formación armónica equilibrada y permanente de las personas.
• Asegurar la transmisión de conocimientos pertinentes, precisos y confiables y actualizados sobre los distintos aspectos involucrados en la educación sexual integral.
• Promover actitudes responsables ante la sexualidad.
• Prevenir los problemas relacionados con la salud general y la salud sexual y reproductiva en particular.
• Procurar igualdad de trato y oportunidades para mujeres y varones.
• También esta educación sexual integral en el espacio de enseñanza –aprendizaje promueve saberes y habilidades, que ayudan a los niños/as y a los/as adolescentes a la toma de decisiones de forma responsables en relación con el cuidado de sus cuerpos, las relaciones interpersonales, es decir le brinda las herramientas necesarias para su vida.

La ESI abarca aspectos éticos, bilógicos, afectivos, sociales, culturales, históricos, psicológicos, de derecho, es decir que se convierte en una parte constitutiva e inherente de las personas.

¿Por qué algunos padres se niegan a que sus hijos reciban esta Educación Sexual Integral? El hecho de esta negación se da a raíz de que este tema se estableció como ley, debido a esto un grupo de padres y docentes- en contra a la enseñanza de la ESI- a través de la red social Facebook formaron un grupo bajo el lema “A mis hijos los educo yo”, los mismos defienden la familia tradicional y la biología. Estos dos modelos el biologicista, a partir del cual se considera que las cuestiones de la sexualidad refieren exclusivamente a la anatomía y a la reproducción biológica (reduce a la sexualidad a genitalidad) y por otro lado el modelo moralizante el cual hace foco en cuestiones vinculares y éticas que fundamentan una posición religiosa de la constitución de una familia tradicional (Papá-Mamá-concepción-hijos) están obviando que la diversidad sexual existe. Más allá de todo están violentando los derechos y libertades.

Se puede entender este punto de vista de la familia del lado de que los padres de estos alumnos no han recibido esta educación sexual de modo integral. “El tema subyace en una sociedad donde la sexualidad dominante es la que se impone, desde muy temprana edad a los niños se los educa dentro del sistema patriarcal con la idea de que les pertenece el cuerpo de las mujeres, es decir que pueden tomarlos en cualquier momento, porque éste es el derecho natural que se les ha dado por ser hombres; y deben hacerlo porque eso es lo que los convierte en verdaderos hombres”. (De miguel; 2015:1). Esto lleva a que los niños /as comiencen a establecer expectativas divergentes que muchas veces con llevan a la discriminación y a la violencia, respecto a sí mismo y a otras personas en tanto mujeres u hombres.

Por ende, todo aprendizaje que se da en la escuela entonces se encuentra atravesada por las relaciones de género, atravesada por los rituales, valores y normas que definen nuestras practicas educativas. Por lo tanto, es imprescindible brindar herramientas que ayuden a interferir a los cambios que se han dado en la sociedad en este último tiempo, ya que las barreras de acceso a la educación sexual, a la información, a la salud sexual y reproductiva ubica a las personas, especialmente a las niñas y adolescentes frente a un mayor riesgo de sufrir violencia de género, incluida la violencia sexual.

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