El Bullying En Preescolar

MARCO TEORICO

La palabra bullying proviene del anglicismo “bully”, que se traduce como “tirano”. El término se circunscribe también al acoso violento entre estudiantes. y se considera más preciso referirse al fenómeno como “violencia escolar”.

ALGUNOS TIPOS DE INTIMIDACIÓN:

• Intimidación física. Se presentan cuando, aparte de las burlas son constantes actos como pelear, morder, dar puños y empujones, lanzar objetos, asustar con animales al compañero, puede ser grave, pues el niño puede salir más herido.

• Intimidación verbal. Este tipo de acoso hiere los sentimientos porque ridiculiza a la víctima, a quien le es muy difícil defenderse de esta acción a mi punto de vista esta se queda grabada en la mente de los pequeños.

• Intimidación por género. Los niños puede excluir, maltratar, molestar o amenazar a sus compañeros según su género, aunque debo comentar que los niños preescolares según su madurez y educación conviven con sus compañeros de diferente género a ellos.

El origen de la violencia escolar

El origen de este fenómeno se centra en los pasados eventos traumáticos del agresor, “sobre todo por el ambiente agresivo que viven en su hogar”.

Hace unos días pude observar un video en el taller para padres, “Lo que debemos hacer en casa”.

El video iniciaba con una niña de 5 años molestando a su hermana de 3 años, después entraba la madre y maltrataba a la niña de 5 años, posteriormente entraba el marido, gritándole a la esposa, exigiéndole la comida, enseguida sonaba el teléfono, el jefe al teléfono faltándole el respeto al empleado (padre) y al final la niña pequeña le lleva un dulce a su papá, poniendo el ejemplo de amor y paciencia.

La familia es la encargada de sentar las bases para la formación de la identidad, pertenencia, apoyo, afecto y formación de la autoestima. Es la escuela de los primeros aprendizajes de su vida y el espacio donde se forma nuestra personalidad, se moldean nuestras emociones y obtenemos el bienestar que necesitamos para crecer.

Al interior de la familia se desarrollan los repertorios cognoscitivos, afectivos y comportamentales necesarios para el aprendizaje social y escolar.

Sin embargo hoy en día las dinámicas familiares han cambiado pues ambos padres trabajan, trayendo desventajas, como la falta de tiempo, el exceso de trabajo, el estrés, la culpabilidad, la fatiga, y la sensación de incompetencia y fracaso. Y por ello existe confusión de roles, delegación de responsabilidades, practicas inefectivas. La intimidación escolar “bullying” encuentra un terreno fértil para desarrollarse y es aquí cuando los pequeños llegan a la escuela a desquitarse por lo que ellos viven en sus casas.

Dentro del contexto del bullying o acoso escolar, esta inquietud cobra mayor relevancia y se refleja en el temor de que el niño sea víctima de maltrato o agresión por parte de sus compañeros, que lo excluyan de los grupos. Lo humillen, lo vuelvan blanco de burlas y persecuciones o debiliten sus actos sociales, Igualmente, aterra y preocupa a las madres que su hijo sea autor de intimidación y agreda a otros causándoles daño o sufrimiento. Les angustia la posibilidad de no percibir oportunamente una situación de acoso, que el niño sufra en silencio y que esto tenga consecuencias en su autoestima o competencia social, que llegue a afectar su rendimiento escolar y la motivación para asistir a la escuela, es importante darle al bullying la dimensión que tiene dentro de una perspectiva realista para conocer, por un lado, el impacto que puede generar en el desarrollo saludable de los niños, pero al mismo tiempo identificar cuando constituye un caso de intimidación que amerita una intervención oportuna, decidida y efectiva.

Estadísticas recientes muestran un aumento considerable de violencia entre niños, las agresiones reiteradas entre compañeros son cada día más frecuentes en los salones de clases. Muchos de ellos reportan haber sido víctimas de bullying que van de ataques físicos hasta agresiones psicológicas, si no se detiene a tiempo, las consecuencias pueden generar un impacto importante en todas las instancias implicadas en este fenómeno: la persona agredida, el agresor y aquellos que presencian el acto de intimidación y lo refuerzan riéndose o apoyando a quien está acosando, felicitándolo por su hazaña o también guardando silencio porque tienen miedo de que la emprendan contra de ellos o porque simplemente piensan que no es problema suyo.

¿Los Bullying de 4 años?

Sí, es posible. Según los expertos, los niños antes de los tres años no tienen la habilidad cognitiva de sentir empatía. Por lo tanto, cuando hacen que otro niño sufra, es porque no se

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