El Contrato Social

El Contrato Social.

Libro Primero.

Rousseau inicia poniendo los puntos a los cuales quiere llegar indicando como primera situación que en el orden civil puede existir alguna regla de administración legítima y segura, tomando a los hombres y a las leyes en su estado natural y dando muestra de su estado como ciudadano, no como príncipe o legislador, ya que si él fuera quien tuviera el poder en el Estado, no perdería su tiempo en decir lo que hay que hacer sino simplemente lo haría.

Mientras que un pueblo esté obligado a obedecer y lo haga, está bien y si éste se ve bajo el yugo y lo doblega, es mejor porque si recupera la libertad que le quitaron, tiene razón al recuperarla o no la tenían al quitársela, porque el orden social se tiene considerado como derecho divino, el cual no viene de la naturaleza, porque está basado en convenciones y el punto de Rousseau es llegar a esas convenciones.

Para Rousseau la más antigua de la sociedad y la única natural ha sido la familia. Los hijos sólo permanecer cerca del padre por la necesidad de conservarse y cuando esto deja de suceder, el vínculo natural se disuelve. Si la familia continúa unida ya no es natural, sino voluntario y la familia sólo se mantiene unida por convención.

La primera ley del hombre es velar por su propia conservación, tan pronto éstas necesidades se ven satisfechas se convierte en su propio amo. Es por eso que Rousseau toma a la familia como el primer modelo de las sociedades políticas. El jefe es el padre y el pueblo los hijos.

El más fuerte nunca es lo bastante fuerte para mantenerse como el amo si no convierte la obediencia en deber y la fuerza en derecho. Incluso cuando un padre enajena a sus hijos, estos nacen siendo hombres libres y su libertad les pertenece así que nadie tiene derecho a disponer de esa libertad más que los propios hijos.

Respecto al derecho de conquista, no tiene más fundamentos que la ley aplicada del más fuerte. Rousseau nos dice que si la guerra no da al vencedor el derecho de exterminar a los pueblos vencidos, este derecho que no tiene no puede fundar el de esclavizarlos, porque sólo se tiene derecho de matar al enemigo cuando no se puede hacerle esclavo, o sea que el derecho de hacerle esclavo no viene, por lo tanto, de derecho de matarle es un cambio que se hace para comprar el precio de su libertad de su vida sobre la que no se tiene ningún derecho.

En la deliberación pública se obliga a todos los súbditos respecto al soberano por causa de los dos aspectos distintos bajo los cuales se considera a cada uno, es por eso que no se puede obligar al soberano para consigo mismo, por consiguiente va contra la naturaleza del cuerpo político que el soberano instituya una ley que no puede romper.

El paso que se da del estado de naturaleza al estado civil hace en el hombre un cambio notable, ya que sustituye en su conducta el instinto por la justicia y con esto

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