El defenderse por ser discriminada, no es un crimen

El defenderse por ser discriminada, no es un crimen.

Las mujeres en la sociedad sufren de cualquier tipo de abuso constantemente, y aunque, se esté en otra época y generación debido al tiempo que ha transcurrido; todavía se observa pensamientos arraigados que, ante la violencia de género, las mujeres tienen autoridad para poder defenderse; por lo que, se analizará los diferentes aspectos y tabúes que afectan por completo a la sociedad mujeres.

El hecho de ser mujer no implica que no haya difamación o violencia entre ellas mismas. Ramírez (2021) afirma: “La violencia que ejerza una mujer contra otra mujer sea consecuencia de estereotipos de género.” Por otra parte, si se basan en las redes sociales, muchas veces las primeras personas en comentar, ya sea, para criticar o simplemente ofender son chicas o mujeres ya adultas, entonces se debería generar desde el mismo genero hacer el cambio y apoyarse. No obstante, el hecho de que haya marchas y grupos aportando lo que piensan sobre cómo se debería tratar a una mujer y cuáles son los cambios fundamentales que debería tener en consideración, por lo que, esto logra tener como resultado un cambio en la sociedad.

Con respecto a romper tabúes, las mujeres son las que pueden empezar hacer el cambio y poder aceptarse así mismo. En primer lugar, se puede considerar que el tabú de la menstruación, con el paso del tiempo se ha convertido como una forma de retraimiento y sigue siendo un eufemismo, porque como Rei (2020) consolida: “El problema no es menstruar, el problema es quién menstrúa en esta sociedad y los cuerpos que lo hacen son los que no dominan, ni ordenan el mundo.” Estar con el período es símbolo de vergüenza y que debe ser oculto; el mismo hecho de ponerle otro nombre, se puede reforzar esas ideas, incluso se puede saber que el mancharse de sangre, ya es señal de discriminación. Por ejemplo, en el mundo existen diferentes culturas y cada sociedad ha construido su propia ideología de lo qué es menstruar y su función, causa que las mujeres en ocasiones tengan pena de estar con el mes.  

En segundo lugar, se conoce por siglos que la mujer es caracterizada por tener “un buen cuerpo y/o el cuerpo perfecto”. Los cuerpos femeninos con estereotipos afectan en la vida de algunas mujeres al no sentirse identificadas, lo cual genera que algunas de ellas decidan realizarse procedimientos quirúrgicos, para poder modificar alguna parte de sus cuerpos (Gómez, 2020). En la sociedad, se conoce a las modelos por que se generaliza la idea del 90, 60, 90 del cuerpo, incluyendo el peso y las características físicas que han afectado psicológicamente a las mujeres, en especial a las adolescentes que están creciendo, debido a que ya están normalizadas y son tachadas hacia la dignidad de ellas.  

En conclusión, el cambio se genera desde la mujer misma, no tiene que intervenir ni un gobierno, ni la sociedad; deberían ser todas las mujeres quienes tengan voz y voto, más que nada, poder cambiar a una sociedad que en la actualidad sigue siendo discriminante y machista. Por otro lado, el que seamos mujeres, no significa que entre nosotras mismas debamos faltarnos al respeto, tampoco avergonzarnos de que tenemos la menstruación, de igual forma se debe considerar que tenemos mucho valor por ser mujeres y empezar a amarnos por quiénes y cómo somos. Todas tenemos, los mismos derechos y nadie puede hacernos sentir menos, eres tú misma quien puede lograr cosas maravillosas, solo cree y confía de tus capacidades, porque el que aspira por grandes cosas, logra sus objetivos.  

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