El matrimonio debe contener ciertos elementos para su existencia y para su validez

El matrimonio debe contener ciertos elementos para su existencia y para su validez,  los elementos para su existencia  son todos aquellos sin los cuales el contrato no puede existir y son: el consentimiento de las partes, el objeto o fines específicos y la solemnidad. Los elementos de validez no son necesarios para la existencia del acto pero si para la validez del mismo y son: la capacidad para poder celebrarlo, ausencia de vicios de la voluntad, licitud en el objeto o fines específicos y la formalidad.

A continuación detallaré cada uno de los elementos para que el matrimonio exista y sea válido, justificándolos con el Código Civil del Estado Coahuila:

Consentimiento: es la manifestación de los contrayentes ante el juez o autoridad para realizar el matrimonio.

Objeto: Es la creación de los derechos y obligaciones entre los cónyuges. Los estatutos los encontramos en nuestro Código Civil del Estado Coahuila en el Libro segundo del Derecho de Familia, Título primero, Capítulo II, De los efectos del matrimonio con relación a las personas de los cónyuges y a sus hijos que contiene en resumen:

Art. 267 Los cónyuges están obligados a contribuir cada uno por su parte a los fines del matrimonio, a respetarse, a guardarse fidelidad y a socorrerse mutuamente.

Art. 268. Toda persona tiene derecho a decidir de manera libre, responsable e informada sobre el número y el espaciamiento de sus hijos.

Art. 269. Son nulos los pactos que los esposos hicieren contra las leyes o los naturales fines del matrimonio.

Art. 270. Los cónyuges residirán juntos en el domicilio conyugal.

Art. 271. Los cónyuges contribuirán económicamente al sostenimiento del hogar, a su alimentación y la de sus hijos, así como a la educación de éstos en los términos que la ley establece.

Art. 272. Los cónyuges y los hijos menores o incapacitados, tendrán derecho preferente sobre los ingresos y bienes de quien tenga a su cargo el sostenimiento económico de la familia.

Art. 273. El marido y la mujer tendrán en el hogar autoridad y consideraciones iguales.

Art. 274. Los cónyuges podrán desempeñar cualquier actividad excepto las que dañen la moral de la familia o la estructura de ésta.

Art 275. El marido y la mujer mayores de edad, tienen capacidad para administrar, contratar o disponer de sus bienes propios.

Art. 276. El marido y la mujer, menores de edad, tendrán la administración de sus bienes, pero necesitarán autorización judicial para enajenarlos, gravarlos o hipotecarlos y un tutor para sus negocios judiciales.

Art. 277. Los cónyuges no requieren autorización judicial para contratar entre ellos.

Art. 278. El contrato de compraventa no podrá celebrarse entre los cónyuges cuando el matrimonio esté sujeto al régimen de sociedad conyugal.

Art. 279. El marido y la mujer, durante el matrimonio, podrán ejercitar los derechos y acciones que tengan el uno contra el otro.

Art. 280. Cualquier disensión que surja entre los esposos con motivo del ejercicio de los derechos a que se refieren los artículos 273 y 274, o en cualquiera otra situación similar, será dirimida por el Juez de lo Familiar.

Como lo podemos constar los derechos y obligaciones de los cónyuges se resumen en: respeto, fidelidad, ayuda mutua, posibilidad de procrear hijos, equidad, sostenimiento del hogar y vivir en el domicilio conyugal.

Solemnidad: Rafael Rojina Villegas nos señala que las solemnidades que deben seguirse en el matrimonio  son: “que se otorgue el acta matrimonial, que conste en la misma la voluntad de los contrayentes, que se determinen los nombres y apellidos de los mismos” (Rojina, 1998), todo esto justificado en el Artículo 201 que dice en resumen lo siguiente:

...