El ser humano y la politica

EL SER HUMANO Y LA POLITICA

El hombre es un ser social por naturaleza, que necesita estar relacionado. En todas partes donde se encuentran grupos humanos se dan interacciones y actividades colectivas, productivas o sociales, que implican de alguna manera actividades relacionadas con la organización del uso de la producción o distribución de los recursos: eso es la política.

En la actualidad el ser humano es considerado un sujeto político activo, puesto que a partir de su proceso de socialización, ajusta su esquema evaluativo-ideológico según a su realidad, es decir, el contexto determinado en el que habita.

Un sujeto político no implica necesariamente la idea negativa de la búsqueda del poder para satisfacer sus propias necesidades dejando de lado al pueblo, el ser humano es político al crear leyes que ayudan en la convivencia humana y al beneficio de la sociedad.

Hoy en día es muy común hablar de la política y en muchos casos escuchar expresiones peyorativas que la califican como una actividad pervertida que ha causado diferencias sociales, guerras y violencia, vinculándola además a todos los males que vive el país. Pero cuando se revisa la historia, puede verse que la política ha estado presente desde el inicio de los tiempos.  Para los antiguos sabios griegos la política era la ciencia reina entre las ciencias, debido a que su objetivo es la felicidad de los distintos pueblos

Aristóteles afirmaba que “el hombre es un animal político”. Lo calificaba como un animal dotado de inteligencia, de libertad y, de voluntad, capaz de actuar, asociarse y negociar en sociedad para llegar al bien común, concepto hoy en día catalogado como la ideal política.

Se debe considerar que la política no es un ámbito separado de la vida y la actividad pública (no existen sociedades apolíticas). Todas las actividades del binomio cooperación-conflicto dentro y entre las sociedades, se encuentran conectadas por la política, medio que permite que la especie humana interactúe y se relacione.

Sin embargo la política en el país ha generado ciertos cambios, polémicas, revoluciones, que han llevado a la generación actual a una definición errada y despectiva, debido a que la asocian a la corrupción predominante. Sobran ejemplos de quienes ostentan hoy el poder político y han provocado esta incredulidad en el ciudadano ante su inconsistencia en su verbo, al cambiar de partido fácilmente respondiendo a sus propios intereses, y pueden verse como opositores y viceversa al cambiar su bandera de lucha.  

Por esto es muy común escuchar a personas decir: “No me importa la política, vivo de mi trabajo”, “No me importa quién gane las elecciones, porque todos son lo mismo”, “Todos los políticos son ladrones”, cuando en realidad la política fue concebida para la satisfacción de las necesidades sociales y el mantenimiento del bienestar de la población mediante la distribución equitativa del poder para el sustento de la estabilidad de los ciudadanos.

Por otro lado hay quienes consideran a la política como un espacio, un lugar de debate, de diálogo, de consenso, que se ha ampliado, se ha enriquecido y por lo tanto se ha vuelto complejo. Su abordaje se ha extendido y hoy se ve que las decisiones políticas se discuten hasta en las reuniones familiares, los niños conocen quienes son los candidatos a las alcaldías, gobernaciones y presidencia.

...