“El sistema político y económico: relación Estado-Mercado”

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“El sistema político y económico: relación Estado-Mercado”

UEA: Estado y Sistema Político Mexicano IV

Profesor: Miguel Rodrigo González Ibarra

Alumna: Hannia Annette Z. Ramírez Meza

Grupo: HJ01

“El sistema político y económico: relación Estado-Mercado”

• Introducción

En este breve ensayo se explica la relación que existe entre el Estado y el Mercado –incluyendo a la sociedad- desde un enfoque sistémico resaltando las diferentes formas de interacción entre sí, de tal manera que permita comprender el funcionamiento del sistema político en su conjunto. El análisis del Estado como un sistema nos permite estudiar sus distintas funciones y estructuras en relación con otros sistemas como el económico que, aunque son sistemas autónomos, se relacionan e influyen entre sí.

1. Sistema político: Estado

Desde la perspectiva sistémica, el Estado no sólo es una forma de organización y estructura política –tal como lo desarrolla la teoría contractualista-, es también una gran institución política que: 1) fija reglas y normas para lograr un orden legal; 2) tiene capacidad estratégica para elaborar planes de acción y políticas públicas dirigidas a los diversos sectores de la población; 3) se relaciona con asuntos económicos.

En este último punto, dependiendo el nivel de intervención del Estado en la economía se distinguen dos tipos principales: estado mínimo o simplista y el estado extendido o ampliado. En el primero, el estado se limita únicamente a cuestiones meramente de políticos-sociales como seguridad, bienestar social, aplicación y cumplimiento de la ley ya que no sale de su esfera política y evita su intervención en la economía dejando en manos de ésta las riendas del mercado, aunque claro esto no quiere decir que el mercado viole las leyes establecidas por el Estado por el contrario, debe acatarlas. En el segundo, el estado promueve el desarrollo económico como indicador del bienestar social puesto que va más allá de su esfera política, se involucra en asuntos económicos y se relaciona con actores de dicha esfera aunque no interviene de manera directa sí establece las condiciones para que la economía funcione adecuadamente –por medio de la política económica.

Por lo tanto, el Estado es una institución importante e influyente para regular las relaciones económicas, incluso cuando hay conflicto entre actores políticos y económicos, pues crea espacios de negociación y deliberación entre los diferentes grupos de interés pero sin invadir la autonomía de cada esfera.

Cabe aclarar que esta máxima institución no debe dejar de lado su obligación principal con la sociedad que es brindar las condiciones necesarias para su bienestar mediante la aplicación de sus propias iniciativas políticas y económicas; el estado funge como instrumento para recoger las demandas y necesidades que presenta la sociedad para la conformación de la agenda pública.

Entonces, el Estado como institución es multifacética y multifuncional ya que además de ser una organización política conformada de diversas instituciones y actores -políticos, económicos y sociales-, tiene diferentes funciones tanto políticas, económicas, gubernamentales, jurídicas, públicas, etc. que interactúan “en una red o entramado de relaciones entre las partes del sistema, que justamente sintetizan la polivalencia estatal”^[1].

1. Sistema económico: Mercado

El sistema económico es también visto como una institución que crea sus propias reglas y restricciones para mantener un comportamiento económico sano, además de regular el intercambio mercantil entre los actores implicados.

En este intercambio mercantil se relacionan generalmente las empresas que mercantilizan productos, bienes y/o servicios (productores) y los trabajadores que venden su fuerza de trabajo a cambio de un salario y que, al mismo tiempo compran lo que producen las empresas (consumidores). Este proceso, en términos económicos se le denomina flujo circular de la economía representado en el esquema 1:[pic 2][pic 3]

Este esquema es cerrado, es decir, no hay intervención del Estado puesto que se rige por las reglas del mercado, entendido éste como “una organización institucional compleja y no simplemente un lugar donde tienen lugar las transacciones y las mercancías se intercambian”^[2] sino que vista como una institución -al igual que el Estado- crea, fija y determina las leyes en las cuales debe operar en la economía para que justamente se dé el proceso de comercialización e intercambio mercantil. No hay que olvidar que el intercambio no sólo es por productos o cosas materiales, también se da subjetivamente como la fuerza de trabajo que conlleva a la relación con el sistema social (trabajadores).

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