Falocracia en la sociedad

Falocracia en la sociedad:

¿Sabían que una sociedad machista es también una sociedad falocrática, en la que la sexualidad masculina es la que domina?

Son los hombres quienes establecieron distintas instituciones que les garantizaban la permanencia como la variedad en sus parejas sexuales, esto según la filósofa española Ana de Miguel.

Ana de Miguel dice “el dominio sexual del hombre sobre la mujer es la falocracia. Ejemplo hay muchos cotidianos, como en conversaciones, anuncios y chistes”.

La mujer al paso de los años va cambiando debido a que en las primeras épocas o mejor dicho las primeras mujeres eran desvalorizadas y despreciadas, ellas solo servían para ser madres debido a que su función era procrear y ser dueña de casa. Luego la mujer fue exaltada, alababan sus méritos y el arte del buen vivir. Se consideraba como la luz que engrandece al hombre, pero lo malo era que debían obedecer al hombre, no tener su economía propia y no poder tener una opinión en la política. Y por último aparece la mujer identitaria, digna e independiente, sin dejar de ser hermosa. La mujer encontró la condición igualitaria, demostrar sus valores y capacidades. Hoy en día la mujer puede elegir lo que desea ser, tiene el poder de inventarse a sí misma.

¿Cómo será el machismo en el ámbito religioso?

En esta oportunidad nos vamos a referir solamente a tres religiones, la judeocristiana, la islámica y la hinduista, esto debido a que son las más importantes e influyentes del mundo.

Judeocristiana:  En esta religión podemos encontrar diferentes expresiones que son consideradas machistas. Por ejemplo, en la Biblia en la parte del Antiguo Testamento ya se puede apreciar como muestran a la mujer de una forma negativa, debido al pecado que Eva realizo al comerse el fruto prohibido, ella en un sentido representa la tentación y el mal. La mujer a lo largo de la Biblia aparece en segundo plano, y solo cobra importancia en un sentido negativo, no como lo hace el hombre que sale como protagonista y mayormente como el bueno. En el nuevo testamento se puede apreciar como todavía se manifiesta el machismo, como ejemplo en la siguiente cita, Timoteo 2:11-12 “La mujer aprende en silencio, con toda sujeción. Porque no permito a la mujer enseñar, ni ejercer dominio sobre el hombre, sino estar en silencio”. La iglesia católica siempre ha considerado el cuerpo femenino como pecaminoso; y solo si ella renuncia a él es reconocida como criatura del Señor y no como instrumento del mal. En el cristianismo solo como siervo de Dios o del hombre, la mujer puede ser aspirante a la santificación.

Islámica: Esta religión suele ser asociada a ser machista, debido a sus leyes y hábitos del pueblo islámico. En diferentes libros como “El Corán” y el “Al Muwatta” que muestran como tiene el hombre que comportarse con una mujer en diferentes aspectos de la vida. En algunos libros (ej. Islam, cultura, religión y política) muestran que la mujer es libre de decidir y el hombre no debe ofenderse por aquello. Pero en la mayoría de los textos hablan sobre los deberes y los derechos de los hombres sobre el sexo femenino. Por ejemplo, “los hombres se pueden casar con varias mujeres, pero no las mujeres con varios hombres”.

Hinduista: Las mujeres de la India sufren diferentes injusticias sociales. Las mujeres indias están en el tope máximo de las estadísticas mundiales sobre prostitución, (“El segundo lugar es para la India, donde hay alrededor de 3 millones de prostitutas. Las cifras están elaboradas a partir de diversas fuentes, como programas públicos de salud, iniciativas de las fuerzas de la ley, programas de la justicia penal y los medios”), asesinatos, abandono y el abuso a las jóvenes, pero también al número de mujeres vendidas, de mujeres víctimas del SIDA y las que viven bajo al umbral de la pobreza. A las mujeres desde muy pequeñas las van comprometiendo para que luego ser casadas con alguien a quien no aman, pero lo tienen que hacer por la conveniencia del padre, debido a que las venden por una cierta cantidad de dinero. Muchas veces son niñas las que se tienen que comprometer con hombre mayores sin su consentimiento. La mujer en el hinduismo cada vez se ve rígidamente estructurada y subordinada al marido. Su principal objetivo es producir hijos para que cada vez vaya construyendo la riqueza de la familia patriarcal. En el periodo clásico del hinduismo, la brecha educativa entre mujeres y hombres se va ampliando. Algunas normas son que la mujer tiene que comer después de su marido y no tiene derecho a la herencia. El principal objetivo de la mujer hindú es centrase en su marido, que va a ser su Dios.

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