INTELECTUAL

Las creaciones intelectuales, producto de la capacidad creativa del ser humano, se encargan de proporcionarnos cada vez más una mejor calidad de vida. En la sociedad del conocimiento los desarrollos tecnológicos, médicos, etc representan un motor indispensable para la distribución del bienestar a toda la comunidad.

La biotecnología, la genética aplicada y la investigación orientada a mejorar las condiciones de vida en el planeta redundan en un claro beneficio que impacta en los más de 7.000 millones de personas que habitan la tierra, acortando brechas sociales en una tendencia hacia el equilibrio y la equidad en el desarrollo.

La investigación orientada a alcanzar dichos resultados encuentra hoy diferentes canales, sea en la industria de los alimentos, de los medicamentos, de la agrobiotecnología, en el sector energético, tecnológico y hasta del entretenimiento.

En este contexto, alcanza con repasar los índices del Banco Mundial, la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual o del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo para constatar que existe una clara correlación entre los países que ofrecen una protección a la propiedad intelectual y las sociedades que gozan de una mejor calidad de vida.

El círculo virtuoso en este sentido es más que evidente: si existe un marco que promueve y promociona la investigación y el desarrollo, y luego reconoce y respeta los derechos intelectuales asociados a los productos innovadores, el incentivo a invertir en nuevos desarrollos intelectuales para beneficio de la sociedad es palpable.

Eso deriva en el acceso a una mejor salud, mayor cantidad de alimentos, mejores oportunidades de formación y educación, empleos de mayor calidad y hasta cuentas nacionales más fuertes.

En una economía global, probado está que los avances en una nación repercuten en otras. En ese sentido, el acceso a desarrollos biotecnológicos que otorgan a los cultivos mayor rendimiento, tolerancia a insectos, herbicidas, sequías, etc.; medicamentos “inteligentes”, y hasta desarrollos informáticos que permiten la comunicación permanente generan Una relación positiva entre la innovación, y el respeto y reconocimiento a la propiedad intelectual en pos de un desarrollo económico y social mas sustentable y sostenible. En ese sentido, los conocimientos técnicos son los que están permitiendo enfrentar tres de los más grandes desafíos mundiales: el cambio climático, la salud pública y la seguridad alimentaria.

En este escenario se enmarca la celebración por el Día Mundial de la Propiedad Intelectual, festejo que honra y destaca el enorme esfuerzo de algunos para que todos nosotros vivamos mejor.

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