“Interculturalidad y Transculturalidad"

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ALUMNO:  

M en PTI Cesar Alonso León Cisneros

PROFESOR:

Mtro. Luis Fernando Grajales Penagos

MATERIA:  

“Interculturalidad y Transculturalidad"

DOCTORADO EN DESARROLLO HUMANO

ENSAYO

“NON NOVA, SED SECUS NOVA…”

INTRODUCCIÓN

“Non nova, sed secus nova…”

Nada nuevo solo de manera diferente…

A manera de introducción me es interesante empezar por entender que la vida en su proceso de desarrollo no es otra cosa que este principio “non nova, sed secus nova…” es decir presentar la vida como nada nuevo sino solamente de manera diferente, es mirar la vida no como algo nuevo sino con unos ojos más críticos y menos criticones en relación a la manera en que vivimos en la actualidad.

Somos seres que nos encontramos en relación sin embargo nuestras relaciones se han basado en procesos de relaciones de poder donde quien es dueño del conocimiento es dueño de la verdad que consideramos absoluta y por ende entonces creemos que solo nosotros somos capaces de enseñar y somos los que debemos guiar, aquí entonces nos perdemos la oportunidad de enriquecernos con los conocimientos milenarios que se obtienen a través de la observación de la cultura.

México de acuerdo a lo observado en la realidad, somos un pueblo pluricultural o multicultural, con una riqueza inimaginable tan llena de experiencias y cosmovisiones que nos permitirían llenar grandes anaqueles de libros vaciando solo una tercera parte de los saberes ancestrales que tenemos y que nos hacen hasta este momento un pueblo lleno de tradiciones y recursos culturales para explicar la realidad con otros ojos.

“México es una sociedad que reconoce su composición multicultural, lo cual está expresado en su Constitución. Esto significa que existen en su seno, múltiples identidades en su población construidas desde el ámbito y la influencia de la cultura que generan diferentes miradas acerca de la realidad, el mundo, la vida, el cuerpo, la salud, la enfermedad y la muerte. Estas expresiones culturales tienen relación con las transformaciones históricas, el avance científico, las ideas dominantes en las diferentes épocas de nuestro pasado asi, como las percepciones religiosas, los procesos productivos y tecnológicos y las costumbres particulares de miles y miles de personas que conviven en contextos compartidos y en una cada vez mayor interdependencia.” ^[1]

        Tomando en cuenta lo anterior, debemos observar que nuestro desarrollo sociocultural debería estar basado en las relaciones de coconstrucción más que en aquellas que representan poder y supremacía de unos sobre los otros.

        Entendiendo, que solamente somos una pequeña parte de un universo, que somos un “microcosmos dentro un macrocosmos”^[2] y las cosas que hacemos repercuten tanto de adentro hacia fuera como de afuera hacia adentro, que si queremos estar bien en nosotros también debemos aprender a estar bien en relación con los otros, en eso se basa el desarrollo humano.

DESARROLLO

MODELO HEGEMÓNICO

El hombre “moderno” (y pongo entre comillas moderno, porque no logro entender que tan moderno se puede ser cuando se sigue mirando a los demás con desdén y olvidándose del la historia y el pasado, donde no se reconoce que somos el resultado de un conjunto de historias que se entrelazan y nos dan significado) occidental, se considera a sí mismo el culmen de la historia y como yo le llamo el ombligo del mundo y deja de lado la visión no occidental de la vida que ha prevalecido a lo largo del tiempo.

Este hombre, ha entendido que los conceptos y orígenes todos vienen siempre del proceso grecolatino, sin embargo no es la única manera de percibir la realidad y de ahí parto para entender el modelo actual de lo que vemos como cultura-intercultura-transcultura-multicultura, mediante un hombre que tiene una lógica antropocéntrica occidentalizada en base a tres facetas entreveradas^[3]:

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Esquema 1 facetas entreveradas, autoría propia

En esta faceta egocéntrica el hombre observa la realidad solamente desde la visión griega de concepción del hombre como un ser bio-psico-social, donde percibe todo aquello que esta viviendo desde planos que han sido atravesados desde la religión, la magia y por último la cientificidad a veces sin sentido.

En este modelo para concebir la realidad, esta inmerso también los conceptos de salud- enfermedad- relaciones –educación- etc, en un binomio que se basa exclusivamente en este proceso que salud es la carencia de enfermedad y enfermedad es la pérdida de la salud, menudo enredo que tenemos ya que para comprender el uno es necesario haber entendido el otro pero sin este ninguno de los dos tendría sentido; por esta razón es que como cuesta trabajo entender conceptos separados entonces hemos entendido que la relación se basa en el proceso hegemónico donde solamente se ve que uno (yo el médico, el educador, el mediador) sé y dejo de lado lo que el otro en si mismo puede conocer de él.

En este modelo que yo he llamado modelo vertical se cumplen las siguientes premisas^[4]:

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Figura 2 Modelo Vertical de visualización de la realidad, autoría propia.

Al observarle, entonces entenderemos que este modelo deja de lado la experiencia cultural que se tiene en relación a los procesos que se viven en un entorno cultural específico ya sean de salud y enfermedad, educación e ignorancia, respeto y aceptación,  procesos separados que no forzosamente tendrán que ver el uno con el otro sino que ambos podrían verse separados, porque la manera de percibir educación con respecto a ignorancia, siempre esta cesgada por aquel que se supone, sabe y conoce, pero dejamos de lado los saberes y conocimientos que no están escritos en un libro, sino que solamente han seguido pasando de generación en generación, o hablaríamos de conceptos estructurados que no forzosamente tienen que ver con realidades específicas, ideas, palabras, reacciones ante hechos o sucesos que son únicos en diversos lugares del mismo país.

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