LA PERSONA HUMANA Y SU DIGNIDAD

Ejemplos

Actitudes de la enfermera

Favorecimiento del desarrollo

Habilidades interpersonales

Paciente 1

Enfermedad:

Ingresa paciente masculino de 36 años de edad, herido por arma punzo cortante en la región de epigastrio

Paciente masculino que llega por su propio pie a urgencias, Glasgow 15 puntos, pálido, con herida en hipogastrio, paciente grave, tiene dolor en escala de EVA de 9, al momento de ingresar a sala de choque, le explico que tengo que cortarle su ropa,  le coloco los electrodos para monitorizarlo, el oximetro y el brazalete para tomarle su TA, le coloco la ligadura, mientras busco una vena de grueso calibre, le digo que le voy a tener que dar un piquete, para tomarle muestras de laboratorio, administrarle medicamentos y líquidos parenterales, también le digo que necesitamos que esté tranquilo, los médicos por su parte lo revisan y colocan en el sitio de la herida un drenaje tipo Saratoga, para drenar la sangre que pudiera encontrarse ahí, el cirujano se presenta con mi paciente y lo revisa.

Una vez que mi paciente esta canalizado, que paso el momento crítico y  ya con muestras de laboratorio y ya monitorizado, le digo me llamo Abril y voy a ser tu enfermera, le comento que  le indicaron una placa de abdomen y una de torax, le pregunto por sus familiares, y me dice que no alcanzo a avisarles, que iba para su casa cuando lo asaltaron y además de robarle sus cosas lo apuñalaron, le digo que no se preocupe que la trabajadora social se encargara de contactar a sus familiares, que ya mandamos sus muestras de laboratorio, y que todo el equipo médico estamos trabajando para su recuperación, cuando el departamento de cirugía nos dice que lo van a pasar a una lape, le explico que lo vamos a pasar a quirófano, de nuevo le hago hincapié que es necesario que tratara de mantenerse tranquilo, ya que ante las situaciones de estrés y ansiedad se pueden complicar las cosas,  que en cuanto lleguen sus familiares los mantendremos informados, así mismo le pregunte si tenía alguna duda, mi paciente asintió con la cabeza y lo pasamos a quirófano.

La confianza, es importante que nuestros pacientes confíen en nosotros, que sepan que están seguros, que buscamos su bienestar, brindarles seguridad y que nos vean seguros, que sabemos lo que hacemos y que estamos ahí para ayudarlos.

Paciente 2

Enfermedad:

Paciente femenino de 18 años con diagnóstico de  Acidosis metabólica descompensada

Paciente femenino de 18 años, llega referida de otro hospital, con una gasometría en la cual se interpretaba una acidosis metabólica descompensada, por lo que ingresa a sala de choque.

la paciente con antecedente de Diabetes Mellitus tipo 1, Glasgow 15 puntos, pálida, poco cooperadora y con mal apego al tratamiento.

Me presento con ella y con su familiar, les explico que en sala de choque no pueden estar los familiares, pero que les mantendremos informados y que ante cualquier situación les llamaremos, le explico que tengo que monitorizarla, tomarle muestras de laboratorio y colocarle una solución parenteral, así mismo le pregunto si es alérgica a algún medicamento, a lo cual ella me responde que no, le menciono los medicamento que le voy a poner y para qué sirven, pude darme cuenta que ella no acepta su enfermedad, le comente la importancia del autocuidado, que durante la estancia hospitalaria nosotros nos haremos cargo de su cuidado, pero que es importante que ella en casa se cuide, le di orientación higiénico dietética, aun así pude percatarme de su actitud negativa ante la situación, ella no alcanzaba a comprender la gravedad de lo que estaba pasando.

Le pregunte sobre su vida, si aún seguía estudiando, a lo que me contesto que no, que ella trabajaba en una tienda de autoservicio, ella comenzó a abrirse un poco conmigo, aproveche para decirle lo importante que era que le echara ganas, que el hecho de tener Diabetes Mellitus no era impedimento para hacer su vida y cumplir sus metas, que es importante llevar una alimentación lo más sana que se pudiera, el hacer algo de actividad física, aparte de ser beneficioso para su salud física, también le ayudaría a despejar su mente, tuve que ser clara sobre lo que podría pasar si no se cuida, si no lleva su tratamiento adecuadamente,   de alguna forma sentí que mis palabras no iban a parar en saco roto, creo que necesitaba que alguien ajeno a su entorno familiar le dijera las cosas como son o como pueden llegar a ser.

Empatía, como enfermeros el ser empático es fundamental, es ponernos en los zapatos del otro, conocer sus emociones, para esto es fundamental saber escuchar, ser orientadores, hablar con honestidad, comprender por qué actúa de tal o cual modo, en el caso de esta paciente considero que es difícil aceptar una enfermedad crónica a esa edad, es importante que nosotros como enfermeros brindemos apoyo emocional. Solo ellos saben lo que están pasando, lo que pasa por su mente, y nosotros al prestar atención a las señales no verbales, podemos orientarlos.

Paciente 3:

Enfermedad

Paciente femenino de 35 años de edad, con diagnóstico de VIH y Neumonia Bacteriana comunitaria.

Paciente femenino de 35 años de edad, portadora del virus de inmunodeficiencia humana con Neumonía bacteriana comunitaria, Glasgow 15 puntos, mucosas orales semi hidratadas, con una traqueostomía, paciente que ha ingresado en varias ocasiones, paciente cooperadora, grave, se pasa a un aislado, para ir con mi paciente utilizo técnica de aislado, que incluye bata, cubre bocas, guantes y google, pude ver su cara de tristeza cuando me vio, antes de que ella pudiera decir algo, me presente con ella, le explique por qué mi atuendo, le dije que era principalmente para protección de ella, que yo estaba en contacto con muchos pacientes y que no me gustaría que se le pasara alguna bacteria a ella por mi culpa, pude ver como su expresión regresaba a la normalidad, le explique que tomaría sus signos vitales, le pregunte si era alérgica a algún medicamento, a lo cual me respondió que no, por lo que le explique qué medicamentos le iba a poner y para qué sirven, también le di orientación higiénico dietética, también le dije que estábamos esperando que se desocupara un aislado en el piso de medicina interna, para subirla a piso, donde estaría más cómoda.

Me puse a platicar un ratito con ella, me dijo que su esposo la había contagiado, pero que el murió en un accidente en la carretera, y que el epidemiólogo le dijo que ella ya estaba infectada desde hace muchos años atrás, un aproximado de 7 años, también me comento que tiene tres hijos y que tiene miedo de hacerles la prueba, ahí con ella estaba un familiar, su mamá, misma que se acababa de enterar de la enfermedad, mi paciente me dijo que ella no quería que se enteraran, que de hecho se habían enterado la última vez que había ingresado al hospital y que para su sorpresa su familia no la ha dejado sola.

Le explique la importancia de hacerles la prueba a sus hijos y que ella debe apegarse al tratamiento en casa, que disfrutara cada momento, cada cosa, que disfrutara a su familia ya que a veces no nos damos cuenta cuan frágil es la vida, me di cuenta que cuando mi paciente vio que realmente contaba con su familia, que no tenía por qué temer que nadie la juzgaba, fue cuando comenzó a aceptar su enfermedad, aún le falta aceptarla del todo, pero ahí va,  aun no me dijo cuándo llevara a sus hijos, pero estoy segura que lo hará y sabe que puede contar tanto conmigo como con mis compañeros.

Como mencione en el cuadro anterior, la empatía es fundamental, sobre todo en las enfermedades que sabemos que su desenlace puede ser fatal, no sabemos al cuanto tiempo, pero eso no importa, mostrarnos comprensivos, respetuosos, hacerlos sentir seguros, ganarnos su confianza, yo creo que esa es la clave para lograr un mejor resultado en la atención de nuestros pacientes.