LEY FEDERAL ELECTORAL

LA EXPROPIACION AGRARIA

INTRODUCCIÓN

Las expropiaciones son una medida fundamental para el desarrollo y expansión de las ciudades vecinas a los ejidos donde el gobierno federal, estatal y municipal, fungen una gran labor de construcción de estas ampliaciones territoriales sociales, que bien beneficia a la sociedad y al gobierno pero altera enormemente la vida productiva en el campo mexicano, acabando con más de 100 años de lucha revolucionaria, donde el campesino y productor del suelo mexicano, se ve en un gran estado de indefensión ante esta figura jurídica llamada expropiación.

El origen de la expropiación tiene su pieza fundamental en el artículo 27 constitucional donde refiere que las expropiaciones solo podrán hacerse por causa de utilidad pública y mediante indemnización.

Dado a la naturaleza jurídica y supremacía constitucional la nación tendrá en todo tiempo el derecho de imponer a la propiedad privada las modalidades que dicte el interés público, así como el de regular, en beneficio social, el aprovechamiento de los elementos naturales susceptibles de apropiación.

Perjudica aun cuando los bienes agrarios tienen por objeto llenar las necesidades inaplazables de los campesinos y aun cuando se les hayan entregado mediante expropiación, son a su vez expropiables ante la urgencia de satisfacer necesidades colectivas de mayor importancia.

Sin poder hacer nada para impedir la expropiación, aunque existe una figura llamada amparo en materia agraria, pero solo beneficiara para que se pague una justa indemnización conforme a derecho.

MARCO REFERENCIAL

1.- Derecho agrario.- El derecho agrario es la ciencia jurídica que regula la explotación de la tierra rustica, la que, conjuntamente con la urbana, contemplan el hábitat del ser humano.

2.- Indemnización.- Compensación que recibe una persona por un daño o perjuicio que ha recibido ella misma o sus propiedades.

3.- Ejido.- Terreno comunal a las afueras de un pueblo donde se reúne el ganado y se establecen las eras.

4.- Expropiación.- Desposesión legal de una cosa a su propietario por motivos de utilidad pública, generalmente a cambio de una compensación.

ANTECEDENTES

A partir del triunfo de la revolución mexicana de 1910, con la decisiva participación de la masa campesina inconformé ante el acaparamiento de la riqueza territorial y la injusticia que entonces prevalecía en el campo mexicano. Baste apuntar, en este sentido, que poco antes del estallido del movimiento armado, el 96 por ciento de las cabezas de familia rurales, no tenían tierra, mientras que solamente el uno por ciento de la población controlaba el 97 por ciento del territorio mexicano y solo 834 hacendados poseían la mitad de la tierra, a eso habría que agregar que la agricultura en México era paupérrima, basaba la explotación de una parte mínima de la tierra, utilizando, medios antiguos por ello y con técnicas arcaicas u además propiciaban jornadas excesivas de trabajo. Así las principales proclamas revolucionarias incluirían demandas como la restitución de tierras a sus legítimos poseedores, la dotación de tierra y aguas a los núcleos de población agrarios. El fraccionamiento de los latifundios, la protección y ayuda al sector campesino y la creación de instrumentos de justicia agraria independientes del poder judicial.

Estos planteamientos se encuentran en documentos como el plan de san Luis Potosí, el plan de Ayala, el plan de Orozquita de 25 de marzo de 1912, la ley Carrancista del 6 de enero de 1915, y la ley general agraria del Villismo del 24 de mayo de 1915.

A partir de estos principios, en el artículo 27 de la constitución de 1917 se dieron los grandes lineamientos de la reforma agraria en México

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