La evangelización y la fundación de nuevas ciudades

LEER LA INFORMACIÓN Y  REALIZAR LAS  ACTIVIDADES EN HOJAS BLANCAS

La evangelización y la fundación de nuevas ciudades

Es difícil de entender el periodo de Nueva España sin considerar el papel que jugó la Iglesia católica durante él. Como recordarás, la conquista de los pueblos mesoamericanos también fue espiritual a través de la evangelización, que estableció las bases de nuevas prácticas religiosas. La Iglesia ejerció una gran influencia sobre la sociedad, a veces en tensión con el poder político. También adquirió un gran poder económico a partir de la riqueza que logró acumular proveniente de las dotaciones de tierras, donaciones, herencias, limosnas, diezmos y obvenciones parroquiales. Como los reyes españoles se habían convertido en los defensores de la fe católica en Europa ante los embates de la Reforma protestante, el papado les con­ cedió el derecho de intervenir directamente en la organización y manejo de la Iglesia en el imperio español por medio del Real Patronato Eclesiástico, mediante el cual el Estado español, además de nombrar a arzobispos y obispos, vigilaba la administración del diezmo y el aprovechamiento de ciertos impuestos eclesiásticos; autorizaba la construcción de iglesias, monasterios y hospitales; otorgaba permisos para que los clérigos y monjes salieran de España a las Indias; fijaba los límites de las diócesis y autorizaba la ejecución de las bulas pontificias dentro del reinado.

Dentro de la estructura organizativa de la Iglesia novohispana se puede  distinguir el clero regular y el clero secular. El primero estaba constituido por religiosos que vivían en comunidad, sujetos a reglas de pobreza, humildad y caridad. Ellos efectuaron el proceso de evangelización. Entre las numerosas órdenes religiosas que llegaron a estos territorios sobresalen los franciscanos, los dominicos, los agustinos y los jesuitas. Cada orden obedecía sus propias reglas, que es el conjunto de principios por los que se rige la vida de los religiosos que la componen y que marca la especialización en determinada actividad, y a los votos que son promesas de sacrificio o de renuncia al adoptar los hábitos de una orden específica. Los votos más comunes del clero regular son los de pobreza, castidad y obediencia. Para los franciscanos el voto más importante es el de la pobreza; para los jesuitas es la obediencia y se especializaron ro el ministerio de la enseñanza. Por su parte, los dominicos se dedicaron más a la predicación y a la defensa de la religión en contra de la herejía.

También hubo largas discusiones entre los conquistadores, las autoridades y los ministros eclesiásticos españoles en torno a si se debían considerar seres humanos a indígenas. Los discursos en relación con la calidad humana o inhumana de los indígenas tenían diversos sentidos; algunos decían que debían ser considerados como niños, para otros no cabía duda de que eran seres sin capacidad de razonamiento. Al final se impuso el criterio de que los indígenas eran seres humanos, dueños de un a y que, por tanto, debían ser evangelizados.

Para la Corona española, los misioneros fueron un elemento crucial para la justificación de la conquista y según el gobierno español, por brutal que sea, la dominación volvía aceptable si se tenía como fin último la conversión  de los naturales paga­ razón por la cual se defendió el carácter humano no irracional de los indígenas. En 1524 arribaron a Veracruz los primeros misioneros franciscanos y se establecieron en el centro del país. Le siguieron los dominicos, los agustinos y los jesuitas.  El teatro ritual católico en lengua indígena, la música, la escritura y la traducción de textos litúrgicos a lenguas indígenas fueron algunos de los recursos mediante los cuales misioneros consiguieron la paulatina conversión religiosa de una buena cantidad indígenas mesoamericanos y aridoamericanos;  también  desarrollaron labores de educación en diversos oficios entre los evangelizados y en ocasiones lograron transformar el ambiente de explotación en que vivían bajo los encomenderos. La evangelización no estuvo exenta de violencia y, a veces, algunos misioneros y los encomenderos condicionaban la conversión a la conservación de la vida del convertido. De la labor de los misioneros se desarrolló con el apoyo de los encomenderos y dieron de una parte del tributo indígena para su sostenimiento.

Las misiones se extendieron en casi todo el territorio novohispano y en algunos lugares, sobre todo de Aridoamérica, representaban la única señal de presencia hispana entre los indígenas. La ausencia de autoridad civil y la urgencia de cristianizar a los nuevos súbditos de la Corona espa­ ñola encaminó a los misioneros a asumir esa tarea, pues ellos vivieron de una manera más cercana y permanente dentro de las comunidades indígenas. Los frailes hicieron de sus residencias o conventos, además de centros de catequesis, centros educativos, hospitalarios y de encuentros comunitarios. Algunas órdenes religiosas también enseñaban artes y oficios como sastrería, carpintería, pintura, lectura y escritura. Así se produjo una nueva conformación urbana -las nuevas ciudades- ordenada alrededor de una gran iglesia y convento, casas de cabildo y justicia, caja comunal, escuela, hospital y traza de calles, en la cual los frailes representaban  la autoridad política de la región donde se asentaban.

También hubo frailes que preservaron las lenguas indígenas y escribieron códices mientras que otros quemaron y destruyeron todo lo relacionado con la religión y las culturas prehispánicas. La Iglesia ejerció una gran influencia sobre la sociedad, a veces en tensión con el poder político. Una de las órdenes mendicantes que más respetó a la población indígena fueron los franciscanos, primera en llegar a Nueva España y de las más importantes, cuya misión era adoctrinar, convertir, colonizar y enseñar a los indios. Su presencia aún se ve reflejada en la arquitectura, la educación y las letras.

Contesta las siguientes preguntas:

1.- ¿De dónde provenía la riqueza que la Iglesia logró acumular?

 2.- Explica que consecuencias trajo que los Reyes españoles (o los reyes católicos) hayan sido defensores de la fe católica.

3.- ¿Quiénes formaban parte del clero regular?

4.- ¿Cuáles fueron las  órdenes religiosas que llegaron a Nueva España?

5.- Menciona cuales eran las reglas de cada orden religiosa.

6.- ¿Cuál era la idea que tenían los conquistadores, las autoridades y los eclesiásticos españoles con respecto a los indígenas?

...