Mi Escuela Contra La Discriminación

CURSO:

EL DERECHO A LA NO DISCRIMINACIÓN EN MÉXICO

PARTICIPANTE:

WINFRID CAHUICH GOMEZ

ASESOR:

GLADIS CASTILLO MÉNDEZ

Mi escuela

contra la

discriminación

Marco teórico

Discriminar significa tratar injustamente a otras personas o a un grupo de personas porque son diferentes. Por ejemplo, tratarlas mal, como si valieran menos, sólo porque piensan distinto, porque se visten de otra manera, practican distintas religiones, tienen otro color de piel o vienen de otros pueblos, de otras ciudades o países. Tratar mal no es sólo verlas con desprecio, sino el negarles el derecho de ser lo que son, o impedir que tengan las mismas oportunidades y servicios que todos.

Discriminar no es estar en desacuerdo con lo que otra persona hace, dice o piensa. Eso es normal porque todas las personas somos diferentes y no podemos estar de acuerdo en todo. En lo que si somos iguales todas las personas es en que tenemos la misma dignidad y, por lo tanto, debemos de tener las mismas oportunidades y derechos, sin importar si somos hombres o mujeres, altos o bajos, gordos o flacos, de una ciudad o de un pueblo, de una familia grandísima o de una pequeñita. Discriminar es no respetar la forma de ser y de pensar de cada persona y obstaculizar sus derechos. Todas las personas valeos lo mismo y tenemos derecho a ser los que somos.

Hay personas a las que se les da trato injusto; se les humilla, se abusa de ellas. Las personas con discapacidad, los adultos mayores, las mujeres embarazadas, las personas con alguna enfermedad, los indígenas, los pobres, con frecuencia son discriminadas. Esto es debido a que algunas personas, sin ninguna razón, las creen inferiores y, a veces por ignorancia, porque en realidad no las conocen, no saben nada de ellas; a veces las discriminan porque las quieren dominar.

Las personas discriminadas se sienten lastimadas en su dignidad, y la dignidad es que cada quien se sienta orgulloso de lo que es.

La constitución política dice que ninguna persona debe ser discriminada. La discriminación produce desigualdad e injusticia: unos privilegiados y otros no, unos gozan de sus derechos y otros no. La discriminación condena a muchas personas y grupos a vivir en la pobreza porque encubre injusticias que es necesario reparar.

La vida social se sustenta en principios de equidad y de justicia y debemos esforzarnos por dar un trato justo y respetuoso a todas las personas: esto quiere decir, reconocer y rechazar la discriminación, la falta de equidad y la intolerancia.

Una manera de solucionar problemas de discriminación, rechazo e intolerancia es recordar que todas las mujeres y todos los hombres de México tenemos derechos ante la ley. Recordemos que nuestra Constitución Política, en los

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