POLICÍA COMUNAL COMO MODELO PARA EL CONTROL DE LA CRIMINALIDAD

POLICÍA COMUNAL COMO MODELO PARA EL CONTROL DE LA CRIMINALIDAD.

Autor: Yuleidy Garcías

RESUMEN

El complejo fenómeno de la criminalidad ha sido abordado desde diversas perspectivas filosóficas, influenciadas principalmente por el modelo de gobierno predominante. De ahí la importancia de entender los nuevos modelos de seguridad ciudadana que tratan de prevenir el crimen. Es por ello que la presente investigación tuvo como objetivo analizar la actuación del servicio de la policía comunal en el casco central de la parroquia Tacarigua. Se fundamentó en la Teoría de la Acción Social de Durkheim. La metodología empleada fue bajo el Paradigma positivista, enfoque de la investigación fue cuantitativo, el método de Investigación se ubicó en un estudio transversal, cuya población estuvo conformada por dos mil cincuenta (2.050) habitantes, por la cual la muestra fue no probabilístico intencional quedando conformada por setenta (70) habitantes de la comunidad objeto estudio, en cuanto a la técnica, se usó la encuesta y como instrumento de recolección de datos el cuestionario con opciones de respuestas dicotómicas, la validez fue dada a través del juicio de expertos, la confiabilidad se midió por medio de la fórmula Kuder Richardson 20 (KR20), la cual arrojó un resultado de 0,95 y el análisis de datos fue cuantitativo; realizándose el estudio estadístico propio de los estudios de esta naturaleza, en el cual se levantaron tablas y gráficos, llegando a la conclusión de que existen marcadas debilidades en la actuación de la policía comunal para controlar los problemas de criminalidad en la comunidad.

Descriptores Clave: Criminalidad; Policía Comunal; Prevención.

INTRODUCCIÓN

El conflicto delictual es un tema de constante preocupación a nivel mundial, pues no hay sociedad que escape a episodios de violencias y de quebrantos a la ley. Específicamente, en Venezuela en los últimos 15 años se ha incrementado notoriamente los índices de delincuencia (Briceño, 2012), de tal manera que es uno de los principales problemas que más preocupa a los habitantes y que ha obligado al estado a transformar los mecanismos de defensa y prevención delictiva con un despliegue de nuevos agentes denominados: policía comunal.

Dicha policía comunal se constituye como un principio vertebral, que aborda, desde un proceso de reconstrucción del tejido social, la comunidad como un mecanismo estructural para la reducción de la criminalidad y violencia. Se habla de estructural porque la delimitación legal, operacional y estratégica del sistema de seguridad ciudadana, otorga mayor atención al desarrollo de una nueva asociación entre la autoridad policial y la población, sostenido en principios de comunicación, proximidad e integración, más que al propio impacto de la estadística delictiva.

Émile Durkheim (1989) identificó a la sociedad como un fenómeno social, externo a los individuos, con el crimen como parte normal de una sociedad saludable. La desviación no era más que un "establecimiento de límites", empujando para determinar los límites actuales de moralidad y aceptabilidad.

Teniendo en cuenta lo anterior, surge esta idea de investigación para analizar desde una perspectiva positivista, específicamente desde la actuación de la policía comunal en un lugar determinado y así poder evaluar la efectividad o no efectiva de la misma, es decir, si causa impacto significativo en los miembros comunales en pro del bienestar común. Además permitirá reconocer las fortalezas y debilidades con proyección a mejorar tanto la puesta en práctica profesional como la integración ciudadana y de esta manera poder aplacar la amenaza que representa la criminalidad para el bienestar personal, familiar y vecinal.

Es importante destacar que esta investigación está investigación de campo, es eminentemente descriptiva desde un enfoque cuantitativo, con el fin de aportar datos objetivos tomados directamente del contexto en tiempo real en la comunidad del Casco Central de la Parroquia Tacarigua, municipio Carlos Arvelo, estado Carabobo.

PROBLEMA Y SU CONTEXTO

La criminalidad.

Según el Observatorio Venezolano de Violencia (OVV), en el año 2019, el país presentó unos de los momentos  de mayor índice delictivo de toda la historia, como consecuencia de múltiples factores como: la migración (separación de familias), el incremento de la crisis económica, el deterioro del estado de derecho y el aumento de la desigualdad social, puesto que, inevitablemente, los cambios en las sociedades influyen directamente en la criminalidad, ya que esta procura adecuarse a las oportunidades que le ofrece el mejoramiento o empeoramiento de las condiciones de vida.

En concordancia con esto, la criminalidad se concibe como “un hecho que surge de la misma sociedad cuyas causas deben encontrarse en las interrelaciones establecidas por las estructuras que la conforman” (Figueredo, 2017: p. 44). Dicho en otras palabras, los hechos delictivos trascienden la esencia misma de las normas y reglas que rigen los grupos organizados de individuos y se anidan-muchas veces- como parte del sistema y se justifica como algo “normal” y, aunque es un problemática real, las comunidades, especialmente las de bajo estrato, tienden a adoptarla y hasta aprenden a convivir con ella.

Por su parte, para Durkheim (1989) quien identificó a la sociedad como un fenómeno social, externo a los individuos, señala que  el crimen es una parte normal de una sociedad saludable, cuya  desviación de la ley no era más que un "establecimiento de límites", y que para restablecer ese orden de moralidad se debe imponer un castigo.

Pero, ¿realmente se puede asumir el acto ilícito como algo normal? ¿Podemos vivir en una sociedad subyugada por el miedo?  Ciertamente lo “recurrente” se tiende a asumir como un hábito, pero es menester señalar que la seguridad es un derecho fundamental que jamás puede ser vulnerado. Por tal motivo, las personas estamos en plena potestad de exigir un organismo competente que sea capaz de reguardar la vida, y la integridad individual y colectiva, y es por ello que la Policía cumple en la sociedad democrática una labor insustituible, y la misma constituye una institución fundamental para la vigencia del estado de Derecho, pero al parecer las medidas tomadas en el pasado no fueron suficientes pues el error suscitaba en la verticalidad hegemónica que privilegiaba a los entes policiales sobre la comunidad civil.

No obstante,  las nuevas políticas de seguridad emanadas por el Gobierno Bolivariano de Venezuela, presenta como objetivo trascendental  respetar los valores, la identidad y la cultura propia de cada comunidad, garantizando el buen vivir de los y las ciudadanas. Y es allí, donde se concreta la idea de Policía Comunal, cuyo propósito principal es diseñar las estrategias necesarias para desarrollar nuevas formas de relaciones entre el Cuerpo de Policía Nacional Bolivariana y las comunidades del país, con la finalidad  de orientar procesos para la resolución de conflictos y lograr un efecto preventivo en las situaciones que se presenten en las comunidades, y de esta manera respaldar  la paz, la convivencia y el derecho a tener una vida libre de violencia.

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