Persepcion y toma de decisiones

Introducción:

A continuación realizaremos un resumen del capítulo 5 de nuestro libro de texto “La percepción y la toma de decisiones individual”.

Primero que nada, tenemos que definir el concepto “percepción” esto con la finalidad de darnos un marco de referencia sobre lo que veremos.

La percepción es un proceso, por el cual las personas organizan e interpretan las impresiones de sus sentidos, con objeto de asignar significado a su entorno. Es decir, es la manera de interpretar o ver  alguna situación, objeto, etc. De acuerdo a lo que la persona cree, para así darle un significado personal, por lo tal, implica que en algunas ocasiones lo que nosotros percibimos sea erróneo, o diferente a la realidad objetiva.

Por esta razón, el concepto antes mencionado, es importante en el comportamiento organizacional, y por consiguiente, es un factor clave para la toma de decisiones que tiene un individuo, ya que comúnmente, la toma de decisiones se realiza en base a la percepción del individuo que está enfrentando cierta circunstancia.

La percepción es el proceso por el cual los individuos organizan e interpretan las impresiones de sus sentidos con objeto de asignar significado a su entorno, sin embargo, lo que uno percibe llega a ser muy diferente de la realidad objetiva. Es importante en el comportamiento organizacional, ya que el comportamiento de las personas se basa en su percepción.

Factores que influyen en la percepción son el receptor, objeto percibido y el contexto (situación en la que tiene un lugar la percepción). El receptor influye cuando alguien observa un objeto y trata de interpretar lo que ve, por lo que su percepción está influenciada por las características personales del receptor.  Las características del objeto que se observa afectan lo que se percibe. Y, también es importante el contexto en el que se observan los objetos o eventos, ya que en el momento en que se miran influye en la atención, así como la ubicación, iluminación, color o cualquier tipo de factor situacional. La percepción de las personas, es decir, las percepciones que los individuos se forman unos de los otros (hacer juicios acerca de los demás).

La teoría de la atribución se propuso para desarrollar explicaciones acerca de la forma diferente en la que juzgamos a las personas, en función del significado que atribuyamos a un comportamiento dado. Esta teoría sugiere que al observar el comportamiento de un individuo tratamos de determinar si lo ocasiona algo interno o externo. Definiendo los comportamientos causados internamente como aquellos que se cree están abajo el control del individuo, mientras que el ocasionado externamente es lo que imaginamos sobre la situación que obligo a la persona comportarse de cierto modo. Lo cual depende de 3 factores: lo distintivo, el consenso y la consistencia. Lo distintivo se refiere a si un individuo tiene comportamiento diferentes en situaciones distintas. El comportamiento muestra consenso, si todo aquel que enfrenta una situación similar responde de la misma manera. Y por último la consistencia, un observador busca consistencia en las acciones de una persona, entre más consistente es el comportamiento, más inclinado está el observador a atribuirlo a causas internas.

Un error de atribución fundamental, surge cuando subestimamos la influencia de los factores externos y sobreestimamos la de los internos o personales. También existe la tendencia en la cual los individuos y organizaciones para contribuir sus factores internos tales como la aptitud o el esfuerzo, culpan de las fallas a factores externos, tales como la mala suerte, o los compañeros improductivos. Lo cual conocemos como el sesgo de autoservicio. Algunas de las simplificaciones utilizadas con frecuencia en el momento de juzgar a otros son la percepción selectiva, la cual se da ya que no es posible que observemos todo lo que ocurre alrededor de nosotros, sin embargo nos permite hacer una “lectura rápida” de otros, pero con el riesgo de elaborar un panorama equivocado. Debido a que vemos lo que queremos ver. Otra se denomina como  “Efectos de halo”, que entran en operación cuando se traza una impresión general de un individuo con base en una sola característica, como la inteligencia, sociabilidad o apariencia. Los efectos de contraste, a diferencia de las simplificaciones ya antes mencionadas, nos distorsionan las percepciones, lo que ocasiona que nuestra reacción hacia una persona se vea influida por aquellas con la que nos hayamos encontrado recientemente. Y por último la simplificación de “estereotipar”, la cual se da cuando juzgamos a alguien basándonos en nuestra percepción del grupo al que pertenece. Perfilar es la forma de construir estereotipos con los que se describe a un grupo de individuos.

...