Planteamiento del problema violencia intrafamiliar

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

En Sinaloa el 61.5 por ciento de las mujeres mayores de 15 años han sido víctimas de violencia, reveló el Instituto Nacional de Estadística y Geografía. De acuerdo a esas estadísticas, la violencia más frecuente en el estado en contra de las mujeres es la de la pareja, con el 40.1 por ciento. Asimismo de cada 100 féminas de 15 años y más, 33 han sido objeto de violencia en los espacios comunitarios o sociales a lo largo de su vida. Machismo. Las frases: "Quien bien te quiere, te hará llorar", "si no te pega, no te quiere" son expresiones que siguen pronunciándose en pleno siglo 21.

La Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares, establece que el porcentaje de violencia intrafamiliar varía en cada entidad federativa. Destacan Jalisco, el Estado de México y el Distrito Federal, con alrededor del 78 por ciento, Sinaloa se ubica en el número 20 a nivel nacional. Las mujeres, incluso son víctimas de violencia sexual por parte de sus propias parejas, un grupo que representa el 9 por ciento a nivel nacional. En el país, el porcentaje de mujeres que señaló haber tenido un incidente violento en su ámbito laboral, ascendió a 29.9 por ciento; Sinaloa registró en este rubro el 24.7, superando a Chiapas que tiene el 24.1 por ciento, Yucatán con el 23.8 y Baja California Sur con el 19.7 por ciento.

Antecedentes. El 25 de noviembre se instituyó como el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, tras el brutal asesinato, en 1961, de las hermanas Patria, Minerva y María Teresa Mirabal, activistas políticas de la República Dominicana, quienes se opusieron al régimen del dictador Rafael Leónidas Trujillo. Se considera violencia contra la mujer a cualquier acción o conducta, basada en su género, que cause muerte, daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico a la mujer tanto en el ámbito público como en el privado según la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia.

La violencia invisible. El Instituto Sinaloense de las Mujeres establece que los tipos de violencia definidos en la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia se establecen como violencia sicológica que se refiere a cualquier acto u omisión que dañe la estabilidad sicológica. En este caso puede consistir en negligencia, abandono, descuido reiterado, celotipia, insultos, humillaciones, devaluación, marginación, indiferencia, desamor e inclusive la infidelidad. Además de comparaciones destructivas, rechazo, restricción a la autodeterminación y amenazas, las cuales conllevan a la víctima a la depresión, al aislamiento, a la devaluación de su autoestima e incluso al suicidio. La violencia patrimonial, es cualquier acto u omisión que afecta la supervivencia de la víctima y se manifiesta en la transformación, sustracción, destrucción, retención o distracción de objetos.

 Así como documentos personales, bienes y valores, derechos patrimoniales o recursos económicos destinados a satisfacer sus necesidades y puede abarcar los daños a los bienes comunes o propios de la víctima. Limitante. La violencia económica es otro tipo de agresión que sufre la mujer actualmente. Ésta consiste en que el agresor afecta la supervivencia económica de la víctima y se manifiesta a través de limitaciones encaminadas a controlar el ingreso de sus percepciones económicas, así como la percepción de un salario menor por igual trabajo, dentro de un mismo centro laboral. La violencia sexual se define como el acto que degrada o daña el cuerpo y/o la sexualidad de la víctima y que por tanto atenta contra su libertad, dignidad e integridad física. Es una expresión de abuso de poder que implica la supremacía masculina sobre la mujer, al denigrarla y concebirla como objeto.

Ahome. Tan sólo en Ahome, la realidad se supera con los discursos, por lo que se está lejos de festejarse. Los golpes, los gritos, las agresiones físicas y verbales en contra de las féminas al interior de los hogares existe a plena luz del día, y en muchos casos se cubren bajo el manto de la noche.

Petra Montes Villegas, titular de la Agencia del Ministerio Público del Fuero Común, especializada en Delitos Sexuales y Violencia Intrafamiliar, explica que las estadísticas son altas, en cuanto denuncias, lo que significa que hay cultura de las mujeres para denunciar a sus agresores.

Estadísticas. "Llevamos un total de 240 averiguaciones que engloban tanto delitos sexuales como violencia intrafamiliar, esas son las que están registradas, aparte, hay convenios que no están registradas como averiguaciones ahí sumaríamos como unas 130 denuncias y que llegaron a una conciliación", indicó. Aumentan denuncias. Montes Villegas sostiene que el maltrato está al interior de los hogares, donde no respeta condición social ni el nivel educativo de las personas. No obstante, dijo que las féminas que forman parte del estrato social de nivel alto, son quienes se limitan a interponer una queja, o bien a denunciar a sus victimarios. "Los que denuncian más son las personas de escasos recursos, no digo que en las condiciones más pudientes no se dé, pero es gente que no se atreve, que se pregunta qué va a pasar, o bien al que dirán". La falta de una ley que tenga mayor sanción en contra de los agresores en Sinaloa, impide que se castigue ejemplarmente.

Atención. La agresión sicológica es la principal tarea a tratar por parte de la Procuraduría de la Defensa del Menor, la Mujer y la Familia del Sistema DIF en Ahome, debido a que se da al interior de los hogares, donde muchas de las víctimas consideran que la forma en cómo las tratan sus parejas, es una situación normal. Manuel Alejandro López Molina, titular de la dependencia, dijo que falta fomentar la cultura de la denuncia. "Muchas mujeres tienen miedo a denunciar, porque tienen miedo a muchas cosas. La cultura que tiene es que: no es que sea violencia intrafamiliar, lo toman como algo normal, algo cotidiano", asentó. La realidad dice que existen mujeres que han aguantado hasta 40 años el maltrato físico y sicológico, y que por fin logran despertar para denunciar a sus agresores. El alcohol, las drogas y en ocasiones la falta de dinero, son los principales factores que ocasionan que los gritos surjan, los golpes se den y la violencia en las familias crezca más. Los golpes se quedan grabados en la mente y en el alma, otras agresiones con el tiempo se borran o dejan cicatrices, provienen del maltrato psicológico y físico que puede llegar a ejercerse toda una vida. La solución a este círculo interminable de agresiones es la denuncia, así como el apoyo familiar, psicológico y siquiátrica en muchos de los casos.

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